Dina Boluarte participó de una conferencia de prensa en Palacio de Gobierno en el que confirmó que no seguirá impulsando el proyecto de adelanto de elecciones, pedido que fue repetido por un sector de la ciudadanía en las protestas en contra del gobierno de turno. “El tema está cerrado”, dijo la jefa de Estado asegurando cederá el poder el 28 de julio de 2026 cuando culmine el periodo constitucional por el que fue elegida junto a Pedro Castillo.
“La prensa en general sabe que el tema de adelanto de elecciones está cerrado. Nosotros seguiremos trabajando de manera responsable y en ese respeto al Estado de Derecho, la democracia y la Constitución, hasta julio del 2026″, dijo Dina Boluarte tras culminar la sesión del Consejo de Ministros. Su postura difiere de la mostrada a semanas de asumir el cargo cuando señaló que era una presidenta de transición en medio de una crisis política.
El Poder Ejecutivo ha sido autor de al menos dos proyectos de ley para propiciar un adelanto de elecciones en el que la ciudadanía eligiría una nueva fórmula presidencial, nuevos congresistas y nuevos representantes ante el Parlamento Andino. Sin embargo, la incapacidad del Congreso para consolidar acuerdos postergó por semanas la aprobación de alguna de las propuestas.
Entre los primeros desacuerdos registrados entre bancadas del Congreso y el gobierno de Dina Boluarte se encontraba la fecha en que se celebrarían los comicios. Si bien el Parlamento aprobó el proyecto de adelantar las elecciones para abril del 2023, este necesitaba de una segunda votación que nunca fue agendada. Desde las bancadas de izquierda se insistía que debía promoverse una Asamblea Constituyente.
Una reciente encuesta de Ipsos reveló que el 74% de ciudadanos consideran que debería adelantarse las elecciones al 2024. Aquellos que apuestan por nuevos comicios en el 2025 solo representan el 5% de encuestados. Del lado contrario, un 17% de la ciudadanía se mostró a favor de que Boluarte Zegarra culmine con su mandato constitucional en el 2026 y un 5% evitó responder sobre el tema.
Según una reciente encuesta de Ipsos, más del 50% de los ciudadanos peruanos cree que la situación política y económica del país ha empeorado durante los primeros cien días de gobierno de la presidente Dina Boluarte. Según la citada encuestadora, un 52% de ciudadanos considera que la gestión pública de los ministerios, en líneas generales, “sigue igual”. 70% y 46% opina que el control de la delincuencia y la corrupción, respectivamente, “ha empeorado”.
Seis meses complicados
Dina Boluarte juramentó como presidenta del Perú la tarde del 7 de diciembre del 2022, horas después del golpe de Estado de Pedro Castillo. El respaldo de las Fuerzas Armadas y la vacancia aprobada por el Congreso de la República permitió que se concretara la sucesión presidencial. Desde entonces se iniciaron una serie de manifestaciones en contra del nuevo gobierno que, además, pedían el retorno de Castillo.
Ciudades como Cusco, Arequipa, Junín, Puno, Juliaca y Huamanga fueron escenarios de protestas. Con el paso de los días, empezaron a registrarse las primeras víctimas de la represión policial y militar. Al cierre de esta nota, la Defensoría del Pueblo confirmaba que fueron 70 los ciudadanos que perdieron la vida entre civiles y miembros de las Fuerzas Armadas.
Organismo internacionales han denunciado presuntas violaciones a los derechos humanos de los manifestantes. Desde la Comisión Interamericana de Derechos Humanos se refirieron a presuntas masacres en diversas ciudades mientras que Amnistía Internacional indicó presuntas ejecuciones extrajudiciales. Desde el gobierno se ha pretendido negar dichos señalamientos y aseguró que espera la versión del Ministerio Público.