El misterio que une a Natalee Holloway y Joran van der Sloot: extorsión, amenazas y 18 años de un caso sin resolver

El caso del asesino neerlandés Joran van der Sloot ha dado un giro significativo. Estaba recluido en el penal de Challapalca por el crimen de Stephany Flores en 2010, pero fue entregado temporalmente el último jueves al FBI para ser juzgado por el delito de extorsión y estafa contra Elizabeth Ann Holloway, madre de la joven desaparecida, Natalee Holloway en 2005 en Aruba.

La norteamericana, de 18 años en aquel momento, desapareció durante un viaje a la isla, su caso ha sido ampliamente conocido y seguido a nivel internacional. A pesar de los extensos esfuerzos de investigación, el caso nunca ha sido resuelto y su familia ha luchado durante años en busca de respuestas.

Bajo estrictas medidas de seguridad y después de varias disputas legales, Van der Sloot fue trasladado desde la prisión de Ancón I hasta el Grupo Aéreo N° 8 donde fue entregado a los agentes federales. La operación se llevó a cabo con meticulosa planificación para garantizar su seguridad y evitar cualquier posible intento de fuga o altercado.

El traslado del europeo se realizó en las primeras horas de la mañana del jueves, y su llegada al aeropuerto se produjo alrededor de las 7 a.m. Las autoridades encargadas de su custodia implementaron una serie de medidas de seguridad rigurosas para garantizar que el proceso de extradición transcurriera sin contratiempos.

Natalee Holloway era una brillante estudiante de 18 años que desapareció misteriosamente el 30 de mayo de 2005 en Aruba.

Vivía en Mountain Brook, Alabama, y se graduó de Mountain Brook High School el 24 de mayo de 2005, tan solo unos días antes de realizar el viaje al Caribe.

Natalee era la hija mayor de Dave y Elizabeth, también conocida como Beth. Se divorciaron en 1993, y Holloway y su hermano menor fueron criados por su madre.

Siete años más tarde, en 2000, Beth se casó con George ‘Jug’ Twitty, un destacado empresario de Alabama, y la familia se mudó juntos a un suburbio de Birmingham.

Natalee se graduó con honores de su escuela secundaria. También era miembro de la Sociedad Nacional de Honor y formaba parte del equipo de baile de la escuela. La adolescente tenía previsto asistir a la Universidad de Alabama con una beca completa, donde planeaba seguir una trayectoria pre-médica, una ruta educativa seguida por estudiantes universitarios antes de estudiar Medicina.

Natalee y sus compañeros fueron acompañados a Aruba por siete chaperones, aunque se reunían con los estudiantes cada día para hacer un seguimiento, no estaban detrás de ellos todo el tiempo.

Pronto se descubrió que habían estado bebiendo mucho durante el viaje, incluyendo a Natalee, según un investigador que dijo lo siguiente: “Ella bebía todo el día, todos los días”, y agregó que todos los graduados comenzaban con alcohol en el desayuno.

El investigador describió las fiestas como “salvajes”. Manifestó que había “mucho cambio de habitaciones cada noche”, y el Holiday Inn informó que los estudiantes no serían bienvenidos el año siguiente.

Natalee fue vista por última vez por sus compañeros de clase alrededor de la 1:30 a.m. del lunes 30 de mayo de 2005, la mañana de su vuelo de regreso a Estados Unidos.

En ese momento, la joven salió de un bar en un automóvil con el estudiante neerlandés de 17 años llamado Joran van der Sloot, quien vivía en la isla y asistía a la Escuela Internacional de Aruba, y sus dos amigos surinameses, los hermanos Deepak Kalpoe, de 21 años (dueño del carro), y Satish Kalpoe, de 18 años.

Natalee no llegó para abordar su vuelo de regreso a casa más tarde ese día.

Su equipaje empacado y su pasaporte fueron encontrados en su habitación del Holiday Inn, lo que llevó a las autoridades a lanzar búsquedas en toda la isla y en sus aguas circundantes. A pesar de sus esfuerzos, no encontraron más rastros de ella.

Inmediatamente después de que Natalee perdiera su vuelo, su madre y padrastro llegaron con varios amigos a la isla en un jet privado, y se inició una gran indagación: cientos de voluntarios de la isla ayudaron a peinarla en busca de cualquier evidencia, y el gobierno local dio a los empleados públicos el día libre para ayudar. Cincuenta marinos neerlandeses buscaron en las costas, y los bancos locales recaudaron 20 mil dólares para seguir buscándola.

Proporcionó a la policía su dirección, y finalmente él les dijo que había conducido con la estadounidense hasta el área del Faro de California en la playa de Arashi porque quería ver tiburones. Luego, según sus palabras, la dejaron en el hotel alrededor de las 2 a.m., y afirmó que la joven se tropezó al salir del auto, pero rechazó su ayuda.

Van der Sloot agregó que, mientras él y los hermanos Kalpoe se alejaban del hotel, un hombre con una camisa negra se acercó a Natalee.

El neerlandés, Satish y Deepak Kalpoe fueron detenidos en relación con la desaparición de Holloway. Sin embargo, después de ser interrogados por las autoridades, fueron liberados y nunca fueron formalmente acusados por su desaparición.

También se realizaron varios arrestos relacionados con la desaparición de la joven. En junio de 2005, se detuvo a dos antiguos guardias de seguridad, pero fueron puestos en libertad rápidamente sin cargos.

Joran van der Sloot sigue siendo considerado el principal sospechoso en el caso de la desaparición de Natalee Holloway, ya que existen fuertes indicios que lo vinculan al supuesto crimen. Cinco años después de la desaparición de la estadounidense, asesinó a la peruana Stephany Flores: la golpeó violentamente hasta dejarla inconsciente y luego la asfixió con su camisa ensangrentada en una habitación de un hotel en Miraflores.

Después de ser capturado, fue condenado y actualmente está cumpliendo su condena en el penal de Challapalca, considerado el más alto del mundo, a cinco mil metros. Según las disposiciones legales, está previsto que salga en libertad en el año 2038.

Los cargos federales presentados en Alabama contra Van der Sloot se derivan de una acusación de que intentó extorsionar a la familia Holloway en 2010, prometiendo llevarlos hasta el cuerpo de Natalee a cambio de cientos de miles de dólares.

Los fiscales alegan que contactó a la madre de la adolescente solicitando 25 mil dólares para revelar la ubicación del cuerpo de su hija. Luego, supuestamente exigió otros 225 mil dólares si se encontraba el cadáver, y una operación encubierta hizo que el neerlandés inicialmente señalara una casa en la que afirmaba que los restos estaban enterrados allí.

En unos correos electrónicos, el sospechoso admitió haber mentido sobre la ubicación, según afirmó un agente del FBI en una declaración jurada.

En 2010, Joran van der Sloot hizo una impactante confesión al periódico holandés De Telegraaf, admitiendo haber extorsionado a la familia de Natalee Holloway como una forma de venganza. Expresó su deseo de tomar represalias contra la familia de la estadounidense, ya que sentía que le habían hecho la vida difícil durante cinco años.

La confesión de Van der Sloot reveló una faceta perturbadora de su personalidad y planteó nuevas preguntas sobre su involucramiento en los casos de Natalee Holloway y Stephany Flores.

En una investigación del Daily Mail se reveló que, cuando Joran se encuentre frente a un gran jurado, protestará e intentará revertir la acusación: dirá que la madre de Natalee, Beth, fue quien se le acercó ofreciendo dinero si él la llevaba al cuerpo de su hija.

El último jueves, mientras era escoltado por las autoridades policiales, su indiferencia hacia la gravedad de la situación resultaba desconcertante. Su enigmática y burlona sonrisa contrastaba con la seriedad de su entorno.

La historia de Joran van der Sloot es escalofriante y ha dejado un rastro de dolor y tragedia a su paso. Sus acciones han dejado un impacto duradero en las familias de Natalee Holloway y Stephany Flores, quienes han buscado justicia y respuestas durante años.