Estar encerrado en una de las cárceles más inhópsitas del país, no es impedimento para que el peligroso y sanguinario ‘Mamut’ siga expandiendo su reino en el mundo del hampa. Este venezolano, cuyo verdadero nombre es Héctor Alfonso Prieto Materano, es la verdadera encarnación del mal. Para la policía de nuestro país, este individuo se alza como el líder temido y reverenciado del infame ‘Tren de Aragua’ en Perú.
Las investigaciones desvelan su ominoso viaje en el año 2022, escapando de las garras de la cárcel de Tocorón en Venezuela, un antro de depravación donde las almas despreciables se refugian. Su propósito diabólico: expandir la infestación de su banda en los negocios ilícitos de trata de personas, explotación sexual, tráfico de drogas y la extorsión. Pero su plan se vio interrumpido a inicios de este año, cuando las autoridades lograron capturarlo.
En la actualidad, Prieto Materano se encuentra confinado en la cárcel de Challapalca, un sombrío y remoto penal de máxima seguridad, ubicado en la cima de la Cordillera de los Andes, a más de cinco mil metros sobre el nivel del mar, alejado de todo, donde el aire es más delgado y los sueños de escape se desvanecen. Pero las garras de este criminal todavía se extienden más allá de los muros de su celda, según el revelador de un informe periodístico.
El penal de Challapalca es el más temido por los delincuentes de todo el Perú. Fue edificado en 1997 para recibir a la cúpula terrorista y ahora es el ‘hogar’ de los peores criminales del país. Tiene tres pabellones: el más temido es el denominado ‘gallinero’, donde no ingresa luz natural y al estar revestido internamente de barrotes de acero, el frío se intensifica. La lejanía del lugar dificulta las visitas familiares. Llegar allí es una odisea. No se pueden usar teléfonos: no llega señal de ningún operador debido a lo inhóspito del lugar.
De acuerdo al reportaje de Panorma, existirían dos células criminales comandadas por Alenny José Belisario Castillo, conocido como ‘La Sombra’, un siniestro y temido delincuente venezolano. Este despiadado sujeto estaría a cargo de continuar el linaje ilícito dejado por su antiguo jefe.
“Sabes que soy un malandro en alta, tú conoces. Cuidado, mona. Tú sabes que a mí me gusta malandrear, mona, tú conoces. En alta...”, se le escucha decir a ‘La Sombra’ en un video para las redes sociales. Esta echado en su cama y porta un enorme revólver.
Según la policía, tras la caída de ‘Mamut’, sus células criminales no solo continuaron con la operación delincuencial, sino que lo extendió al narcotráfico. Ante las autoridades, afirmó ser un próspero empresario dedicado a la venta de motos lineales, pero era todo una “pantalla”.
“Este grupo se autodenominaba los ‘Soldados de Mamut’”, dijo el coronel PNP Víctor Revoredo, jefe de la División de Homicidios, al dominical.
Otros de los soldados de Prieto Materano son Wilker Martínez Suárez, quien estaba procesado en nuestro país por sicariato, banda criminal, extorsión y robo agravado, y John Vega Kasle, también con un amplio historial delictivo.
“Tenían un búnker bajo algunas direcciones del penal de Tocorón. Han sido capturados y desarticulados en Puente Piedra”, informó el coronel Revoredo.
Duro golpe al Tren de Aragua
Alias ‘Mamut’ fue capturado en enero pasado tras ser sindicado como uno de los sicarios de la banda criminal ‘Los Malditos del Cono’, una micro banda delincuencial perteneciente al Tren de Aragua cuyos integrantes cometían homicidios, secuestros, extorsiones, cobros de cupos, tráfico ilícito de drogas y tenencia de armas de fuego y explosivos con los que llevaba a cabo sus fechorías.
Este sujeto llegó a nuestro país en el 2022 por la frontera de Brasil-Perú y se instaló en un departamento en el cono norte de la capital. Desde ese año, vino consolidando su influencia en el crimen organizado y logró que su banda controle el negocio de las extorsiones en 9 distritos de Lima.
Según la manifestación de este temido criminal, ingresó al Perú de forma ilegal tras salir de prisión en Brasil. Anteriormente, salió de Venezuela tras haber permanecido dos años y seis meses recluido en el penal Tocorón donde coincidió con el líder máximo del Tren de Aragua, Héctor “Niño” Guerrero, quien lo envió a Perú en su representación.
Además de la extorsión y sicariato, el negocio “más rentable” de este sujeto y de toda la mafia delincuencial venezolana es la trata de personas. Para ello, “Mamut” captaba a jovencitas de nacionalidad venezolana en redes sociales y les prometía ropa, comida, viaje, estadía y viaje gratuito a Perú. Una vez instaladas en nuestro país, comenzaría el infierno para ellas, al conocer que debían pagar entre S/100 a S/300 soles por día sus proxenetas, caso contrario, serían eliminadas.
“Te voy a picar”
De la información policial se desprende que ‘Mamut’ era uno de los jefes criminales más sanguinarios de las bandas extranjeras. Persona que se oponía a sus intenciones delictivas recibía una terrorifica amenaza. En poder de las autoridades hay algunos audios que dan cuenta de la ferocidad de este sujeto.
“Cuando yo te ubique y te agarre, no quiero lloradera, no quiero chiste, te voy a picar en pedasiquico”, dice ‘Mamut’ a alias ‘Mamera’, otro líder criminal dedicado a la explotación sexual, que no era de su simpatía.
Vida de lujos y descontrol
Varios de estos delincuentes extranjeros del Tren de Aragua, incluido ‘Mamut’, tienen por característica llevar una vida ostentosa que les gusta mostrar por las redes sociales, como divulgando su poder e impunidad. Su mundo no está completo si no tienen a su alcance drogas, ingentes cantidades de alcohol y bellas mujeres, a quienes muchas veces terminan prostituyendo a la fuerza.
En las mismas redes sociales en las que se lucen con armas, publican videos en ostentosas fiestas en el sur de Lima. Visten ropa y zapatillas de las mejores marcas, toman los mejores tragos y lucen relojes, anillos y cadenas aparentemente de varios kilates de oro y hasta con incrustaciones de diamantes.