Por la primera división del fútbol peruano han desfilado muchos clubes. Algunos permanecieron por varias temporadas, pero sin éxito, mientras que otros tuvieron un paso fugaz y alcanzaron la gloria eterna. Sobre lo último podemos destacar a Deportivo San Agustín, equipo de la capital que venció en una final a los ‘potrillos’ de Alianza Lima y desapareció por culpa de un personaje religioso.
Su surgimiento
El inicio de su historia se remonta a 1970 cuando dos exalumnos del Colegio San Agustín se topan en un campeonato de interbarrios y deciden fusionar sus clubes, San Francisco y Juan Aurich de San Isidro, bajo el nombre de Huracán San Isidro. Una peculiaridad es que no tenía la camiseta con los colores amarillos y rojos, sino una parecida al de Racing de Avellaneda, es decir, celeste y blanco.
Siete años después, la escuadra de José Carlos Manriquez y Pepe Oneto Aurich ganan el trofeo de la Liga Mayor, torneo creado por la Federación Peruana de Fútbol (FPF) y que simulaba a la tercera división. En 1980, se juntan con el Colegio San Agustín y pasan a llamarse Huracán San Agustín, el cual no duró mucho pues, finalmente, se quedó como Deportivo San Agustín.
El apogeo
A partir de ahí su rumbo cambió por completo. Ascendió en 1985 y en la siguiente temporada se proclamó campeón nacional. Dicho plantel era una mixtura de los ‘compadres’, Universitario y Alianza Lima. Por un lado había jugadores de las canteras ‘cremas’ como José Guillermo del Solar, Roberto Martínez, José Ziani y más. No obstante, el capitán era un deportista identificado con el conjunto ‘blanquiazul’, Jaime Duarte.
Por esas épocas, el campeonato peruano también se dividía en dos partes, Torneo Regional y Descentralizado. Por ese motivo, San Agustín y Alianza Lima disputaron dos finales. En la primera, igualaron 1-1, se fueron a los penales y los ‘canarios’ salieron victoriosos (3-1). Y en la segunda, el desenlace fue el mismo, derrota de los ‘íntimos’ por la mínima diferencia con un gol de José Pajuelo.
Esta definición fue especial, no solo porque terminó en el primer título de San Agustín en la máxima categoría, sino también por el significado para el ‘equipo del pueblo’. Y es que fue la última vez que los ‘potrillos’, su generación dorada, estuvo cerca de consagrarse campeones en el balompié peruano. Meses después, exactamente el 8 de diciembre de 1987, sucedió el lamentable accidente del fokker que acabó con la vida de 16 jugadores.
Copa Libertadores y declive
El club de San Isidro también participó en un torneo internacional, lo hizo en la Copa Libertadores, y coincidió en el Grupo 5 con Alianza Lima, Peñarol y Progreso. Estos dos últimos de Uruguay. Registró 1 victoria, 1 empate y 4 derrotas. Así se ubicó en el último lugar y quedó eliminado. Estos fueron sus resultados:
- San Agustín 0-2 Alianza Lima
- San Agustín 3-1 Progreso
- San Agustín 1-1 Peñarol
- Alianza Lima 2-1 San Agustín
- Progreso 3-0 San Agustín
- Peñarol 2-0 San Agustín
En 1989 comenzó el declive de San Agustín. En dicha temporada disputó un partido con Deportivo Municipal para conocer al descendido, no obstante, se decidió que ninguno pierda la categoría. No volvió a ser protagonista, por lo contrario, se acostumbró a pelear por salvarse.
Después de todo, sin el apoyo de su gente por el cambio de localía a Trujillo, terminó bajando a segunda división en 1996. Solo pasaron tres años más para que resbale a tercera, por esa razón, se inscribió a la Liga Distrital de Lince y tiempo más tarde desapareció. En la actualidad no participa en ningún torneo.
El motivo de la desaparición de San Agustín
Infobae Perú dialogó con Antenor Guerra-García Campos, quien escribió el libro “Equipos que fueron”, una entrega que recopiló anécdotas y testimonios de jugadores, técnicos y otros personajes que formaron parte de los 78 clubes desaparecidos en el fútbol peruano, entre los cuales figura San Agustín.
- ¿Qué recuerdas del título de San Agustín en 1986?
San Agustín campeona ese año ganándole dos finales a Alianza Lima. En la final del Campeonato Regional por penales y en el verano de 1987 la definición del título nacional. Ese Alianza Lima es el de los ‘potrillos’. De Escobar, (Luis Antonio) de Casanova (José), de Bustamante (Carlos), que fallecieron en el fokker en diciembre, es decir, meses después de haber jugador la final contra San Agustín.
- ¿Por qué desapareció San Agustín?
El apoyo que tenían era el del colegio. Había un cura agustino que se llamaba Cesario de las Cuevas, era español y le encantaba el fútbol. Apoyaba con las canchas de entrenamiento y les pagaba a los jugadores. En 1990 el padre se retira, se va a Centroamérica y al nuevo director José Souto no le gustaba nada el fútbol y le quitó todo el apoyo económico.
Detalles del libro Equipos que fueron
- ¿Cuál fue la anécdota que más te sorprendió?
“Víctor Passalacqua, arquero de Ciclista Lima, iba los domingos a misa antes de tapar, apenas terminaba la homilía, se retiraba raudamente del claustro, la razón era que él quería evitar toparse con una persona tuerta porque le daba mala suerte. Un día, antes del partido con Alianza Lima, se cruzó con tres tuertos. En la tarde, Alianza le ganó 3-1 a Ciclista Lima.
- ¿Por qué desaparecieron tantos clubes?
Básicamente por el motivo económico. La mayoría tenía grandes mecenas. Estos podrían ser comerciantes o industriales. Por ejemplo, Luis Banchero Rossi, dueño de Defensor Lima, o Issac Fulop, dueño de José Gálvez, eran industriales pesqueros, pero el gobierno en esa época estatiza sus empresas. Todo el dinero que aportaban a los clubes se perdió. Y si no había plata, desciendes porque no te alcanza.