Han pasado cinco años desde que Combate emitió su último programa por la señal de ATV, el 28 de diciembre de 2018, tras ser superado por Esto es Guerra, su principal rival en la lucha por el rating. Pese a la cancelación del reality de competencia, los fanáticos del espacio aún defienden con fervor a los equipos rojo y verde; y varias de sus figuras recuerdan con cariño su paso por el programa que los lanzó a la fama.
Ahora que el fenecido espacio de ATV no está más al aire, algunas estrellas de Combate han decidido contar lo que pasaba detrás de cámaras cuando los equipos peleaban por sus puntos. Incluso, la productora Marisol Crousillat, conocida como la ‘Reina Madre’, ha revelado las anécdotas que la marcaron durante los años que estuvo a cargo del programa.
“Una vez en Combate me gané un terreno en Miami con Pancho Rodríguez por mejor competidora y mejor competidor. Por hacer esta gracia (y buscar ganar), por irme con todo, me choqué con un bloque de cemento. No me di cuenta que había puesto mi dedo, el anular de la mano derecha, en la comba. Me partí el dedo en tres. Pasé tres meses y medio con un clavo fuera del dedo”, recordó Karen Dejo en diálogo con Infobae Perú.
Combate en el Ejército
Fue el segmento más popular de Combate en su momento. En la segunda temporada, los integrantes del programa—Zumba, Mario Irivarren, Julián Zucchi, Mario Hart, Miguel Arce, Israel Dreyfus, Sheyla Rojas, Darlene Rosas, Michelle Soifer, Yiddá Eslava y Alejandra Baigorria— pasaron dos semanas en la Escuela Militar de Chorrillos, donde fueron entrenados por auténticos militares.
Aunque los televidentes vieron a sus estrellas favoritas superando con éxito diversas pruebas físicas, pocos sabían del cansancio extremo que padecían diariamente. En el podcast Com FM, Mario Irivarren reveló que, además de bajar considerablemente de peso debido a la poca comida y a la falta de sueño, sufrió problemas renales.
“Pensamos que iba a ser de bromita. Grabas, hago la finta, me duermo y me voy. Pero no, vivíamos como los soldados. Estaba asustado. Llegué con 60 kilos y a la semana ya pesaba 55. Todo el día parado, comiendo mal, bajé de peso. En alguna oportunidad fui a orinar y me salió sangre, ya estaba mal de los riñones. Un día me desmayé parado, me llevaron a la enfermería y me dejaron dormir todo el día. Estaba a punto de morirme. Por eso me decían el Niño Somalí, salí flaco”, recordó.
Inexplicablemente, la secuencia dejó de emitirse por Combate y los televidentes no vieron más a los chicos reality en la Escuela Militar de Chorrillos. Según Mario Irivarren, Zumba e Israel, Combate en el Ejército fue censurado por decisión de Ollanta Humala, entonces presidente de la República, pues consideró que la imagen de la unidad militar estaba siendo manchada por Zumba, quien se negaba a tomar con seriedad las órdenes.
Sin embargo, Marisol Crousillat desmintió esta versión, aunque admitió que algunos comandantes no estaban contentos con el comportamiento de Zumba. Explicó que Combate en el Ejército fue cancelado porque Anaturo Humala fue internado en el penal de Chorrillos y el director de la Escuela Militar no quería ver a los participantes del reality cerca del lugar.
“Habían metido preso a Antauro allí, al menos al inicio. Entonces, me llamó el jefe de la Escuela y me dijo: ‘Marisol, hasta acá nomas, no pueden seguir viniendo más porque desde que trajeron a Antauro estamos en el ojo de la tormenta’. Yo quería seguir con el programa, pero me dijeron que ya no. Hubiera sido lindo terminarlo porque funcionaba muy bien”, dijo.
El fantasma de la avenida Brasil
Las primeras temporadas de Combate fueron grabadas en los estudios de ATV, en la concurrida avenida Brasil. De acuerdo con Israel Dreyfus, la producción del programa había sido testigo de apariciones fantasmales en el set, por lo que nadie quería permanecer allí de noche.
“Pocos saben que el set de Combate de la Brasil era una morgue al paso. Terminábamos el programa a las ocho de la noche, y a las nueve todos los de producción volaban por una extraña razón. Yo decía: ‘¿Por qué se van tan apurados?’. Y decían: ‘No sabes cómo penan’. Un día a Pepe Lucho (productor) se le ocurre llamar a una médium, apagaron todas las luces del canal y comenzamos a caminar por el set. Ella decía que sentía a una niña”, contó.
Las peleas y romances armados
Marisol Crousillat ha aclarado que algunos romances que hicieron suspirar a los fanáticos eran, realmente, pauteados por la producción. Algunos ejemplos: Rosángela y Zumba, Yamila Piñero y Ernesto Jiménez, Fabianne Hayashida y Anthony Lam. Intentó “armar” una relación amorosa entre Mario Irivarren y Angie Arizaga, pero esta no funcionó y la modelo se terminó yendo a Esto es Guerra.
Por su parte, Julián Zucchi confesó que en algún momento quisieron emparejarlo con Sheyla Rojas.
“Sheyla era muy buena onda y, además, era simpática. Ella me invitó a cenar como parte del programa, me llevó al Parque de las Aguas. Yo escuché cuando el camarógrafo le dijo: ‘agárrale la mano’. Y me agarró la mano. Yo le dije: ‘Sheyla, no’. Lo peor de todo es que luego fuimos a cenar a un lugar y ella me dijo que estaba viniendo Israel. ¿Quién era? El novio de Sheyla. Terminamos cenando los tres y no acepté más una invitación de nadie”, manifestó.
Lo mismo pasó con las peleas que protagonizaron varios integrantes de Combate. Por ejemplo, Mario Irivarren señaló en su momento que la vez que Stephanie Valenzuela le gritó: “Eres un simple cajero de KFC”, fue parte de un guion que ambos aprendieron.
Karen Dejo también fue testigo de estas peleas “armadas”, pero asegura que su mala relación con Diana Sánchez y Michelle Soifer fue auténtica. Actualmente, las considera sus amigas.
“Yo cuando estuve en Combate tuve un amorío fugaz con Coto. Siempre me acuerdo de mis peleas con Michelle Soifer y Diana Sánchez, llegaron a un extremo de ser bastantes pesados. Sucede que hay personajes que quieren ganar popularidad para quedarse en la TV, entran con el chip de ‘tengo que hacer polémica, tengo que hacerme notar’. Pero también hay personas que no lo necesitan. Yo me llevo bien con todos”, dijo la exbailarina a Infobae Perú.
¿Las eliminaciones eran reales?
Para los fanáticos de Combate, las eliminaciones eran la parte más dramática del programa, pues nadie quería despedir a su participante favorito. Marisol Crousillat confesó, para el pesar de muchos, que la producción escogía con anticipación quiénes se iban a quedar.
“El público sí salvaba (a los concursantes), el público era intocable. Pero ahí teníamos que ver si se podía hacer trampa. Cuando habían dos parados (al frente) y uno se tenía que ir, obvio que queríamos que se quede uno porque daba más cámara, más rating y competía mejor. Para eso, tenías que tener a alguien que te asegurara que se pusiera detrás (que votara por el escogido por la producción). Un día me traicionó Christian Domínguez. Queríamos botar a Fabianne Hayashida y se puso detrás de otro”, complementó para Com FM.