Javier Frana analizó a Juan Pablo Varillas de cara a su histórico duelo ante Novak Djokovic en Roland Garros: “Llegará bien plantado”

Cuando Juan Pablo Varillas nació, había pasado más de un año de las hazañas de Jaime Yzaga en los Grand Slams. Aunque para su generación, su referente peruano fue Luis Horna, ‘Juanpi’ nunca pudo ver a un tenista nacional estar entre los dieciséis mejores del Roland Garros, uno de los torneos más importantes del tenis mundial. Él con 27 años lo logró.

El camino del tenista nacional ha sido largo esta temporada: jugó el Abierto de Australia, participó del tour ATP, además, estuvo en los Masters de Miami, Montecarlo, Roma y Madrid. Ha ganado cinco ATP Challengers en su carrera profesional, sin embargo, durante esta temporada el reto ha sido mayor y el reconocimiento también.

Esta semana se convirtió en el único tenista que ha jugado sus primeros partidos en el cuadro principal de un Grand Slam a 5 sets desde 1968. Como peruano también marcó un hito en la historia del tenis nacional al conseguir luego de 29 años ingresar a octavos de final en un campeonato de esta categoría.

Ahora, la primera raqueta peruana vivirá uno de los partidos más importantes de su carrera ante el histórico número 1 en varias ocasiones, así como también ganador de 22 Grand Slams, 38 Masters 1000, 15 ATP 500, 12 ATP 250, 6 ATP World Tour Finals y una medalla de bronce olímpica en Pekín 2008, Novak Djokovic, quien debutó en el 2004, cuando Varillas solo tenía 9 años.

El tenista peruano volverá a jugar en la Philippe Chatrier, cancha principal del Abierto de Francia. Un escenario con capacidad para 14 mil 840 espectadores, donde Varrillas jugó ante el canadiense Félix Auger-Aliassime (10 ATP) por la primera fase del Roland Garros 2022 y cayó en cinco sets.

Previo al duelo entre el deportista nacional y la leyenda serbia, Infobae Perú realizó un análisis del progreso del tenista nacional con Javier Frana, ex tenista argentino que consiguió ubicarse hasta el puesto 30 del ránking ATP y 14 en dobles. Además logró ganar 1 título en dobles en Roland Garros y una medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992.

Frana obtuvo 10 títulos en singles y dobles. Después de su retiro se convirtió en uno de los comentaristas deportivos más importantes de América y actualmente es asesor en el equipo de Sebatián Báez (42 ATP).

- En Perú se está hablando mucho de las últimas grandes participaciones de Juan Pablo Varillas en Roland Garros, pero la influencia que ha tenido su entrenamiento en Argentina, como la de su entrenador, Diego Junqueira, ¿ha sido vital? Un tiempo se le criticó cuando no le estuvo yendo bien en el circuito ATP, pero hoy es otro el resultado...

No hay dudas que la decisión de Juan Pablo en este último proceso de ir y desarrollar su carrera en Argentina ha sido una decisión acertada. Hoy le está dando sus resultados. Él consideró que era el lugar ideal. Su entrenador es argentino y seguramente sintió que tener ese roce constante con muchísimos jugadores le iba a dar la posibilidad de lograr sus objetivos, de crecer, de evolucionar. Claramente ese proceso está dando sus resultados.

Creo que quien critica los resultados muchas veces omite algo que es muy valioso: el análisis del proceso. Hay gente que lo entiende y gente que no. A partir de ahí surgen opiniones que el tenista en cierta manera tiene que aislarse, salvo cuando la crítica tiene un fundamento basado en la calidad de ese desarrollo. Un tenista no evoluciona de la noche a la mañana, por más que contrate al mejor entrenador del mundo, el mejor preparador físico, es todo un trabajo día a día. Él y su equipo completo fueron claramente por ese camino.

- Juan Pablo Varillas ya lleva varios años en Argentina. El nivel de sus rivales ha sido totalmente mayor desde que enfrentó al tenista chino en primera ronda, ¿cuán importante ha sido mantener su entrenamiento en Argentina? ¿Debería continuar apostando por tener tanto un entrenador argentino como también continuar su entrenamiento por lo que le ha aportado?

Lo valioso es que él sostuvo, fue seguramente monitoreando y concentrado en su evolución. Hay veces que uno evoluciona y siente que juega mejor, pero los resultados no siempre la acompañan inmediatamente. Uno va sintiendo que está siendo mejor jugador que antes y eso es clave para ir encadenando las decisiones, que él lo haya sostenido, se haya mantenido objetivamente y convencido es parte de eso. Claramente que ir a un lugar donde se respira tenis, se respira competición y tienes una cantidad interminable de jugadores de todo tipo y de todo nivel para poder entrenar, siempre es mejor porque te mantiene muy enfocado constantemente.

- ¿Podría comentarme alguna diferencia o algo que haya visto en Juan Pablo Varillas y otros tenistas peruanos?

De afuera lo que más se ve en Juan Pablo es una mayor estabilidad en los mejores momentos, es decir, hoy subió su piso de rendimiento, ya no tiene altibajos tan marcados y creció un montón. Es un jugador que está mucho más convencido y que afronta las oportunidades con mucha más decisión con mucha más precisión y eso termina siendo clave. Esa ha sido, por lo menos en lo que he visto de él últimamente, la parte más importante en cuanto a su mejora. Mentalmente también el estar mucho más convencido que las oportunidades que se le presentan son producto de su buen rendimiento y de sus méritos y las está empezando a concretar.

- ¿Qué es lo que representa no solo para el Perú, sino para Sudamérica, tener un tenista que se encuentre mejorando día a día?

El crecimiento de Juan Pablo, como dices, no impacta únicamente en Perú, claramente que es donde más impacta, pero también está muy bien porque es un ejemplo más de que sí se puede lograr cosas importantes cuando se trabaja con seriedad, decisión y convicción. Eso es algo que ‘Juanpi’ viene haciendo desde hace tiempo. Más allá de una excelente persona, ha sido un gran profesional, muy aplicado, muy enfocado. Además, con todos aquellos compañeros que convivió cuando su ranking no era tan bueno, ahora lo ven jugando con Djokovic en una cuarta ronda de Roland Garros. Abre la posibilidad, te anima y te estimula a que si él lo pudo hacer, también otros más lo pueden hacer. Eso empuja, suma y contribuye a la reputación que tiene el tenis sudamericano en que siempre está generando figuras nuevas y hace que el tenis en general de nuestra región se vea potenciado porque son jugadores que han salido a base de mucho trabajo, de mucho sacrificio y teniendo pocos recursos, escasos recursos o limitados.

- ¿Juan Pablo Varillas ha llevado a cinco sets todas sus participaciones en Grand Slams, es eso normal? ¿Cómo puede afrontar la siguiente etapa con ese desgaste físico?

Nunca es recomendable sumar demasiados partidos a cinco sets, sobre todo cuando se va avanzando porque las energías y sobre todo la cabeza se va cansando. Son muchas horas que uno tiene que estar sosteniendo un nivel de concentración muy grande. A veces el físico lo puede llegar a aguantar si no se juega con excesiva tensión o presión. El problema es que el desgaste que se tiene mentalmente de tantas horas de concentración en una cancha, en algún momento empiezan a sentirse, y afecta, porque más allá del desgaste propiamente físico a esa energía, te hace sentir que estás lento, fuera de punto. Habrá que ver, cómo se va sintiendo y qué tan rápido se va recuperando en los días libres que tiene. Pero de todas maneras ha mostrado una condición física inigualable y mentalmente ha tenido un crecimiento y un fortalecimiento que es justamente la razón de por qué está acá, en la instancia que está.

- ¿Qué duelos entre tenistas peruanos y leyendas del tenis, están a la altura del Varillas vs. Djokovic próximo y claro, qué espera de ese gran próximo encuentro? ¿Qué potencial ve en Varillas?

Recuerdo algunos partidos de Jaime Yzaga, jugó con Connors, con las grandes figuras. Son de los que más recuerdo, porque compartimos época. Esto es una posibilidad de que vuelva Perú va a tener grandes jugadores como lo fue Lucho Horna, también ‘Juanpi’ que empieza claramente a pertenecer a ese grupo. Tener el privilegio de jugar con Djokovic en una distancia de cuarta ronda en un torneo de Grand Slam como Roland Garros. El torneo francés es muy especial para el tenis sudamericano. Es el lugar donde si uno puede jugar bien en algún momento quiere que sea ahí. Ojalá que ‘Juanpi’ pueda estar plenamente en todos los aspectos y que sienta que está ahí porque su tenis está en ese nivel y pertenece a ese nivel y que no fue una cuestión de una casualidad, porque claramente no lo fue. Esto es un proceso que ya viene de largo y que va teniendo sus evoluciones.

Lo importante estar siempre un paso adelante y eso es lo que hoy le permite estar acá. Él que llega a cuarta ronda siempre tiene sus posibilidades y tiene con qué poder hacerle frente a esa instancia, sin embargo, no va a ser un partido para fácil. Además, en general, los jugadores como Djokovic a medida que avanza el torneo van ganando más confianza, van afinando más sus golpes y obviamente que se hace más difícil enfrentarlos, pero eso no quita que para ‘Juanpi’ va a ser una experiencia extraordinaria y que va a estar bien plantado en el encuentro.

- Finalmente, Roland Garros es un torneo bastante especial para los sudamericanos, usted también debe tener un cariño especial debido al título que consiguió. ¿Será posible con el próximo retiro de Rafael Nadal a futuro y su ausencia este año, volver a ver a un sudamericano alzando el trofeo en el Abierto de París?

Sin duda que la ausencia de Nadal siempre es llamativa y más en este torneo que lo ha jugado por tantos años y que lo ha ganado en tantas oportunidades. Lógicamente que aquellos que tienen aspiraciones se les abre una puerta más, pero bueno veremos qué es lo que ocurre. Djokovic es el que más responsabilidad tiene por su trayectoria, pero de todas maneras cada partido es una historia distinta y es un verdadero desafío. Roland Garros es, tal vez de los cuatro torneos de Grand Slam, que para el tenis sudamericano es el que más nos representa, nos identificamos y es en el que en general suele haber buenos resultados de todos los jugadores que ya están consagrados, los que están insertados en el circuito y de otros que tal vez llegaron a clasificación y logran no solo atravesarlas sino también avanzar en el torneo de una manera impresionante. Eso tiene que ver justamente con esa motivación extra que genera el lugar y que genera estar haciendo lo que a uno le gusta en el mejor lugar posible y soñado.