Paro en Puno: Vías bloqueadas y marchas exigiendo la renuncia de Dina Boluarte y el cierre del Congreso

Puno se encuentra sumido en un ‘paro seco’ regional convocado para hoy, en el cual diversos sectores de la sociedad civil han unido fuerzas para exigir justicia por las muertes en las protestas, así como la renuncia de la presidenta Dina Boluarte, la disolución del Congreso de la República y la realización de una Asamblea Constituyente.

La convocatoria fue una decisión de la Asamblea Regional del Comité Colegiado de Puno. “En un paro seco se paraliza y no hay movimiento en cada una de las jurisdicciones donde estamos, en cada distrito y provincia incluido”, indicó el presidente del Frente Unificado de las Cuencas de Puno.

Por su parte el dirigente de la provincia de Azángaro, Abraham Cotacallata, en declaraciones a Exitosa, señaló que se “viene consolidando lo que será la tercera marcha a Lima” contra el gobierno de Dina Boluarte y anunció que los viajes serán a partir del 18, 19 y 20 de julio.

Desde las primeras horas de la mañana, los manifestantes han levantado barricadas y han bloqueado importantes vías de acceso, generando un impacto significativo en la movilidad y en la vida cotidiana de los ciudadanos. Se reportaron el
bloqueo de la carretera Huancané hacia los distritos de Vilquechico, Cojata, Rosaspata y provincia de Moho. Asimismo, decenas de manifestantes se apostaron en el sector Vilapata, en el Ayaviri, impidiendo el pase vehicular.

En la ciudad de Puno, las actividades comerciales se realizaron con normalidad y el transporte público operó sin problemas. Al promediar las 10 de la mañana, se llevaron a cabo concentraciones y marchas en diferentes puntos de la ciudad. Los manifestantes portaban pancartas y entonan consignas exigiendo justicia social y la renuncia de la presidenta Boluarte Zegarra.

Los deudos de los fallecidos en las protestas de Juliaca se sumaron al ‘paro seco’ para exigir al Ministerio Público actuar con justicia en las investigaciones que se realizan.

Los manifestantes rechazaron que las carpetas fiscales sobre la investigación por los muertos y heridos en las protestas se hayan remitido a la Fiscalía de Lima. “Pedimos que la investigación se realice en Juliaca. No encontramos justicia”, expresaron mientras arengaban “Dina, asesina”, “La sangre derramada jamás será olvidada”.

Los miembros de las diferentes bases del Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (Sutep) se movilizaron en la ciudad del Puno llevando una antorcha en forma de rata, que para ellos significa la corrupción que existe en el Gobierno de Dina Boluarte.

Las autoridades locales y regionales han manifestado su disposición al diálogo, reconociendo la legitimidad de las demandas planteadas por los manifestantes. Sin embargo, el presidente del Consejo Anticorrupción de Puno, Fernando Salas, aseguró que no “no hay diálogo”. “No hay posibilidad de diálogo con el Gobierno de Dina Boluarte”, señaló.

Sobre el ‘paro seco‘ en Puno, el titular del Ministerio de la Producción (Produce), Raúl Pérez Reyes, sostuvo que dentro de una democracia las discrepancia políticas no deben reflejarse en protestas violentas. “En ninguna democracia las discrepancia políticas finalmente se reflejan en calles y en violencia sobre todo contra las personas y la propiedad pública y privada. Esas son cosas que no ocurren en una democracia. Nosotros siendo respetuosos de las discrepancias también debemos ser claros que vamos hacer muy firmes en los derechos de los demás”, indicó.

El general PNP Enrique Felipe Monroy, jefe de la X Macrorregión Policial en Puno, reveló que cuatro mil efectivos vienen brindando garantías de seguridad a los ciudadanos que cumplen sus labores diarias. El mando policial dijo que las fuerzas policiales resguardan las instituciones públicas y privadas, como el caso del Aeropuerto Internacional Inca Manco Cápac, de la ciudad de Juliaca, que tuvo que ser cerrado dos veces debido a las protestas.

La jornada de paro continuará durante todo el día. La ciudadanía ha dejado en claro que no se conformará con promesas vacías.