Sobrevivieron a un accidente en la Panamericana Sur, pero no pueden trabajar y conductor aún no asume los gastos médicos

El pasado 21 de enero del presente año, un terrible accidente de tránsito paralizó las metas y proyectos de siete jóvenes que iban en el vehículo que era conducido por Emilio Huidobro. Esa madrugada, a la altura del kilómetro 10 de la Panamericana Sur, Fabiana Morán perdió la vida. Mientras que las otras personas lograron sobrevivir, pero dos de ellas denuncian que el investigado no se ha hecho cargo de los gastos médicos.

El Poder Judicial dictó seis meses de prisión preventiva contra el conductor hasta que duren las investigaciones. El próximo mes de julio se vence esta medida y saldría en libertad.

Infobae Perú conversó hace un mes con Sandra Hoyos Ortiz (26), quien afirmó que no se llegaba a un acuerdo con el abogado para asumir los costos de sus atenciones. Hasta el momento, esta situación no ha cambiado. Lo mismo señala María José Zelaya (21), la otra joven que aún depende de un familiar para que continúe con sus actividades.

Sandra Hoyos relata que ha tenido una leve mejora desde la última vez que nos ofreció una entrevista. En ese entonces, no podía caminar debido a las fracturas en el sacro, en la pelvis y en la cadera. Además, comentó sobre una operación en la rodilla que debía realizarse, pero esta tendrá que esperar.

No obstante, precisó que hasta el momento no se ha llegado a una conciliación entre ambas partes. El abogado de Emilio, Juan Mario Peña, señaló a otros medios de comunicación que las jóvenes pedían una suma elevada, por lo cual no se concretaba el acuerdo. Esto fue negado por Hoyos.

Hoyos afirma que ha pasado varios meses de angustia, porque aún no ha podido conseguir un trabajo —el cual perdió por el accidente— que le permitan ausentarse para que asista a sus terapias. De esta manera, al no ser indemnizada a tiempo para que cubra los gastos médicos, se pone en peligro su recuperación.

La misma situación pasa María José Zelaya, quien también debe hacer terapias físicas por las fracturas en la cadera, pelvis, coxis y costilla. Espera que en los próximos meses pueda recuperar fuerzas en sus extremidades inferiores para que vuelva a caminar gracias a los tratamientos que recibe.

Zelaya cuenta que su abogado desistió del cobro por “daños y perjuicios” cuando se encontraba internada, pero solicitó que se cubra los gastos médicos. “Por mi parte hemos quedado que solo debe pagar la clínica y las terapias, lo que es justo”, mencionó.

No obstante, su diagnóstico era aún complicado y no podía caminar. Ante ello, tuvo que comprar una silla de ruedas y muleta para poder trasladarse. María José ha tenido que parar sus estudios en Gestión de Modas hasta recuperarse por completo. Al igual que su amiga Sandra, no puede trabajar y depende económicamente de sus padres.

En marzo, el doctor Peña solicitó el cese de la prisión preventiva. Entre los argumentos que se presentó ante la jueza fue que el accidente ocurrió por una “avería del neumático”. Así como también que su defendido no manejaba a “excesiva velocidad” ni en estado de ebriedad, pero aseguró que sí se “auxilió a las víctimas”.

Para ambas jóvenes, Emilio estuvo manejando en “excesiva velocidad”, por lo cual logró impactar y derrumbar un poste de alumbrado público. “El doctor piensa que, inventando sobre la lluvia, de la llanta va a poder lograr algo, pero realmente fue la velocidad y eso está por corroborar la Fiscalía”, señala Zelaya.

“Aquí es mentira eso que dice el abogado, que él [Emilio] estuvo ayudando a las personas. Es mentira, porque no estuvo ayudando a nada. […] Todo ocurrió rápido, sentimos la velocidad y ya de un momento a otro, yo sentí rápido la velocidad y luego el carro dando vueltas, unas cuatro”, agregó Hoyos.

De acuerdo con los testimonios de ambas, el Poder Judicial declaró infundada el pedido de cese de prisión preventiva. A su vez, se ha solicitado un nuevo peritaje y visualizar el video para determinar si el investigado auxilió a los heridos, manifiestan las víctimas.

En el mismo informe, se visualiza que Emilio se presentó en la comisaría y pasó por examen de dosaje etílico a 17:02 horas, el cual dio como resultado “negativo”. Sin embargo, la jueza Liliana Chávez Berrios al dictar prisión preventiva cuestionó que esta prueba se haya realizado luego de 13 horas, por lo que afirmó que pudo haber tenido una “disminución”.

Las investigaciones permitirán conocer cuál o cuáles fueron las causas del accidente y la decisión que finalmente tomará la jueza. Sin embargo, las jóvenes aseguran que solo se ha dilatado el proceso de su indemnización y este continúa luego de cuatro meses del accidente. Una angustia que no saben cuándo se pondrá fin.

Infobae también se comunicó con el abogado de Emilio, Juan Mario Peña, para conocer su versión y si existe la posibilidad de una nueva conciliación a favor de las víctimas. No obstante, precisó que no desea brindar una entrevista por el momento.

“No estamos interesados en más entrevistas, muchas gracias. Lo que tengamos como posición lo haremos dentro del proceso”, escribió.