El Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa recalcó el jueves que el Perú se libró del “zarpazo dictatorial” orquestado por el expresidente Pedro Castillo en diciembre pasado, cuando anunció la conformación de un Ejecutivo de emergencia, la reorganización del sistema de justicia, el cierre del Congreso y una asamblea constituyente.
El veterano escritor inauguró, en Guadalajara (México), la quinta edición de la Bienal que lleva su nombre con un discurso en el que abordó la amenaza del autoritarismo en América Latina y la necesidad de que la cultura sea un factor de respuesta a los peligros que enfrenta la libertad.
“La Bienal tiene lugar este año en un mundo convulso, incierto, sacudido por guerras y amenazado por diversos autoritarismos en una América Latina donde el populismo, la demagogia, el estatismo, la intolerancia y el extremismo ideológico están causando mucho daño”, señaló.
“Algunos países, como el mío, han podido librarse, por fortuna, del zarpazo dictatorial gracias a que, como lo anticipamos tantas veces en la campaña de hace dos años, Castillo, hoy preso, pretendió destruir la democracia desde el poder”, continuó el Nobel en un guiño a la administración Dina Boluarte, quien ha sido citada a declarar en la investigación preliminar por genocidio que enfrenta a raíz de las muertes en protestas, la mayoría por represión policial.
MVLL también se refirió a la coyuntura de Ecuador, cuyo presidente, Guillermo Lasso, decretó la disolución del Parlamento y convocó a elecciones generales anticipadas en medio del juicio político en su contra.
Fue la primera vez que se aplicó esta figura ―contemplada en la Constitución de 2008 y amparada por la Ley Orgánica de la Función Legislativa―, que permite al jefe de Estado disolver la Asamblea Nacional si considera que bloquea su capacidad para gobernar.
“En Ecuador intentan evitar que las fuerzas retrógradas y oscurantistas del pasado, encarnadas por el prófugo Rafael Correa y otros, vuelvan a apoderarse del Estado, pero hay muchos que ya están en líderes autoritarios de los que costará tiempo y esfuerzo liberarse”, anotó.
Para Vargas Llosa, este panorama “en muchos casos se da por culpa de los votantes ―que no supieron medir las consecuencias de sus preferencias— y, en otros, por actos de fuerza o circunstancias que torcieron la voluntad popular”.
“En todo caso, en América Latina la libertad no pasa por un buen momento y, frente a ello, una respuesta necesaria es la afirmación de la cultura. De ahí que encuentros como el nuestro no tengan una connotación puramente literaria, sino que también son una defensa de valores que, en el actual contexto latinoamericano, están venidos a menos”, abundó.
El literato resaltó que en México, país anfitrión de la Bienal, reine “plenamente” la “cultura de la libertad”, pese a que “ha soportado amenazas y desafíos muy duros”. Sus declaraciones llegan la misma semana en que el presidente de ese país, Andrés Manuel López Obrador, rompió parcialmente las relaciones con Perú y ratificó su negativa a transferir la presidencia de la Alianza del Pacífico a Boluarte.
El Congreso declaró persona non grata a AMLO, defensor tenaz y aliado de Castillo, mientras que la mandataria replicó que su homólogo despliega “mucha ignorancia para tanta inteligencia del pueblo mexicano”.
Boluarte, centrada en una pesquisa por la presunta comisión de los delitos de genocidio, homicidio calificado y lesiones graves, otorgó en marzo pasado la Orden del Sol a Vargas Llosa, a quien definió como “un hito que enaltece a la cultura peruana” y “un defensor estoico de la democracia y la libertad”.
“En momentos de tristeza y dolor, como hemos vivido en días recientes, sus lauros y trascendencia nos dan esperanza en el destino del Perú, para el cual estamos trabajando como nos comprometimos desde el primer día”, expresó.
Por su parte, el literato, que acudió a la ceremonia en Palacio acompañado por sus hijos y exesposa Patricia Llosa, la defendió de los ataques de algunos líderes de la región y afirmó que “es una injusticia sostener que en el Perú se ha producido una ruptura del orden constitucional y de la democracia”.
“A esos gobernantes hay que recordarles que en Perú prevalece la democracia y rechazamos firmemente su injerencia que viola las normas internacionales y los más elementales principios de la buena vecindad”, siguió en alusión a México, Colombia y Chile.