“Tenía siete años apenas, apenas siete años. ¡Qué siete años! ¡No llegaba a cinco siquiera! De pronto unas voces en la calle: ¡Me gritaron Negra!”, así inicia Victoria Santa Cruz, símbolo de la cultura peruana, en uno de sus poemas más icónicos. Los versos de “¡Me gritaron negra!”, publicado en el año 1978, reflejan situaciones de racismo de hace 45 años, sin embargo, aún esas experiencias se viven en nuestra sociedad.
El racismo está en las calles, en las escuelas, en las universidades, en los centros laborales y también, en los estadios de fútbol. El deporte se volvió un excusa para que los hinchas se escuden bajo una camiseta para discriminar a otras personas, por lo que no hay justificación, pero sí una razón: el fútbol es el reflejo de nuestra sociedad.
Y si alguno piensa que la discriminación solo se da en países menos desarrollados, se equivoca. En los últimos días, una de las super estrellas del fútbol mundial fue víctima de racismo. Vinicius Jr, el jugador que viste la camiseta del Real Madrid, campeón de la Champions League y el Mundial de Clubes, fue insultado con diferentes frases racistas por la hinchada del Valencia en un partido de La Liga española.
Y el Perú no es la excepción. Pese a que vivimos en un país de distintas razas, a veces lo olvidamos. Vemos un campo de juego como una burbuja en la que uno tiene la posibilidad de insultar o racializar a otra persona amparado por un grupo de otros individuos justificándolo con el furor del momento. Pero igualmente en diversas ocasiones ha habido cómplices por la falta de acción o búsqueda de generar conciencia por parte de las autoridades, organizadores, clubes, futbolistas y también, medios de comunicación.
¿Cuáles han sido los últimos casos en Perú? ¿Hubieron sanciones? ¿Hay alguna forma de erradicarlo? Infobae Perú habló con la comunicadora especializada en raza, etnicidad, género y medios, Ana Lucía Mosquera Rosado y el sociólogo y profesor Carlos Bejarano, para entender esta problemática encauzada hace décadas en el fútbol nacional e internacional.
Caso Kevin Quevedo y cantos racistas en el estadio Garcilaso de la Vega en Cusco
La fecha 16 del Torneo Clausura del 2022 quedó manchada por actos racistas. La primera de ellas ocurrió cuando se jugaban el minuto 52 del partido entre Universitario de Deportes y Melgar de Arequipa en el estadio Monumental de Ate. Desde la tribuna occidente del recinto deportivo le lanzaron un plátano a Kevin Quevedo del cuadro arequipeño. Si bien el hecho sucedió durante el partido, no se paralizó.
Durante esa misma jornada, en el estadio Garcilaso de la Vega en Cusco, poco antes que inicie el partido entre Alianza Lima y Cienciano, se escuchó el canto: “El que no salta es un gorila, el que no salta es un gorila”. Ambas acciones fueron repudiadas por los clubes, así como por el Ministerio de Cultura, sin embargo, las sanciones fueron leves.
La Federación Peruana de Fútbol (FPF) sancionó a Universitario con una multa de 10 UIT (46 mil soles) y la inhabilitación por una fecha de la tribuna Occidente del estadio Monumental, desde donde se lanzó el plátano. En tanto a Cienciano recibió la sanción 15 UIT (69 mil soles), además, de la sanción por una fecha de la tribuna norte del estadio Inca Garcilaso de la Vega.
Luis Tejada se va de la cancha
El delantero panameño Luis Tejada fue víctima de los insultos racistas durante su paso por el fútbol peruano. El atacante había regresado al balompié nacional luego de su paso por México y vestía la camiseta la Universidad César Vallejo (2014).
En febrero con el cuadro ‘poeta’ visitó a Universitario en el estadio Monumental y fue discriminado. El local fue sancionado con una multa de 10 mil soles. En el partido ante Sporting Cristal jugado en octubre, hinchas de la tribuna oriente comenzaron a lanzarle insultos racistas cuando se jugaban 61 minutos del partido.
El delantero ofuscado con la situación estuvo a punto de irse, sin embargo, fue convencido por sus compañeros de quedarse. Esa actitud de los agresores le valió la inhabilitación de la tribuna oriente por un partido, una multa de 2 UIT (7 mil 600 soles), además, se identificó a cinco agresores y se les prohibió el ingreso al estadio por dos años.
Pero no fue el único episodio de discriminación que tuvo que afrontar el atacante. En el 2015, en su regreso a Juan Aurich, volvió a ser objetivo de insultos racistas. Se jugaban 71 minutos del encuentro entre el cuadro chiclayano y el Cienciano del Cusco por el Torneo del Inca, cuando le cobraron un off side a Luis Tejada.
Los insultos racistas se comenzaron a escuchar desde la tribuna oriente del estadio Inca Garcilaso de la Vega en Cusco, el panameño producto de la frustración pateó la pelota a tribuna y el árbitro le sacó tarjeta amarilla.
El delantero salió de la cancha molesto y se fue al camerino. A pesar la actitud de la hinchada el partido siguió, Juan Aurich tuvo que concluir el encuentro con diez jugadores, porque ya habían realizado sus tres cambios. Cienciano fue sancionado con la inhabilitación de la tribuna oriente por un partido, además de la multa de 10 UIT (38 mil 500 soles).
Las tres veces contra Julio Landauri
El volante ha sido víctima de varios episodios de racismo dentro de los estadios. No importa la camiseta que vistió, los agresores lo hostigaron. En julio de 2014, vestía la camiseta de Alianza Lima. Los ‘íntimos’ jugaban ante Cienciano en el estadio Garcilaso de la Vega en Cusco. Durante el encuentro la hinchada local insultó a Landauri por su color de piel en reiteradas ocasiones. El cuadro cusqueño fue sancionado con la inhabilitación por una fecha del ingreso al público y la multa de 1 UIT (3 mil 800 soles).
Durante el clásico entre Universitario de Deportes y Alianza Lima jugado en el Estadio Nacional en junio de 2016, Landauri fue víctima de insultos racistas por parte de hinchas ‘cremas’. El equipo de Ate recibió una sanción de 2 UIT (7900 soles).
Luego de su paso por Alianza Lima, Landauri fichó por Sport Huancayo. En el partido con Universitario de Deportes en el Monumental en el 2017, fue nuevamente víctima de ataque racista: la hinchada local realizó sonidos de simios para ofender al jugador. Se jugaban 30 minutos del encuentro, cuando Landauri pateó el balón fuera de la cancha en protesta por los insultos racistas. El árbitro detuvo el partido unos minutos y luego lo reanudó. Los ‘cremas’ fueron sancionados con 2UIT (8 mil 100 soles).
¿Es posible erradicar el racismo en el Perú?
Solo en el fútbol peruano, existen más de 17 casos de racismo que van desde el año 2013 hasta la actualidad. Sin embargo, solo ha habido sanción en seis de ellos. Édgar Villamarín, Luis Advíncula, Luis Guadalupe, Harold Cummings, Christian Ramos, Jhoel Herrera, Renzo Reaños , entre otros futbolistas, han sido víctimas de lamentables actos racistas y la mayoría han sido durante un encuentro donde la hinchada rival frustró un encuentro debido a sus insultos, pero su relación entre ellos es que no hubo ninguna sanción.
“Hay situaciones a las que sí respondemos de manera inconsciente, pero hay actos conscientes premeditados, preparados que intencionalmente tienen como fin molestar, alterar o distraer al jugador, que en este caso son estos actos de racismo que se piensas se planean e inclusivo se hacen en colectivo. Es por ello que sí pienso que es importante que se enfoquen en la sanción, pero eso es solo una parte, porque incluso puede generar un acto más violento si no hay una reflexión sobre el tema”, dijo Ana Lucía Mosquera Rosado sobre la importancia del castigo, pero también de la reflexión.
La afirmación de que el fútbol es un reflejo de la sociedad, es debido a que si bien es cierto, las autoridades oficiales son las encargadas de vigilar que esto no suceda más, también son un ejemplo. Sin embargo, la corrupción y el racismo se ve desde esos mismos entes rectores. El sociólogo Carlos Bejarano, también se refirió al tema y comentó sobre ello.
“El Perú es un país racista e intolerante porque nos crían así y se debe a que en la televisión se veían patrones estéticos que no tenían nada que ver. La FIFA es uno de los entes más corruptos, ¿cómo esos entes te van a enseñar algo? Allanaron la FPF, (Agustín) Lozano está siendo investigado. Cuando vives en una situación de crisis y con una crisis de valores, es claro que también va a pasar en el fútbol. En un partido si hay un acto racista se debe parar a la primera, pero no se hace por los intereses que hay de por medio. No hay ley que vuelva a un racista, no racista, eso es educación”.
El racismo termina siendo una problemática estructural difícil de erradicarla si las mismas personas al mando lo son. Por lo que la única solución en el fútbol es una sanción drástica, como la quita de puntos que finalmente perjudicaría al equipo para su ingreso a un torneo internacional o pelear un título nacional. Además, es necesario generar consciencia continuamente sobre el tema desde el Estado, la Federación Peruana de Fútbol, los clubes y los mismos futbolistas.