La Primera Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Villa El Salvador ha iniciado una investigación preliminar contra Ney Chávez Santillán, el dueño de un chifa que abatió a un delincuente que había ingresado a su establecimiento haciendo el ademán de portar un arma para amenazar al hijo y la esposa del propietario del establecimiento, quien fue liberado luego de más de 24 horas de detención en la comisaría de ese distrito.
La fiscalía decidió cambiar la situación legal del investigado de detenido a citado, y se le ha expedido un certificado de libertad. Chávez Santillán será investigado por un plazo de 60 días por su presunta participación en el delito de homicidio, en la modalidad de delito contra la vida, el cuerpo y la salud.
Dos disparos
Según la disposición fiscal, el incidente ocurrió el 24 de mayo a las 6:50 horas, cuando el presunto delincuente ingresó al local y amenazó de muerte al hijo menor y la pareja del dueño del restaurante. En ese momento, Chávez Santillán apareció con un arma de fuego y realizó dos disparos contra el fallecido.
Después de percatarse de que el individuo ya no presentaba signos vitales. Además observó que el sujeto tenía un tenedor en la mano izquierda y la mano derecha envuelta en una bolsa blanca. Además, notó que llevaba una botella con un líquido amarillento en la cintura, por lo que decidió llamar a las autoridades policiales.
Entre las diligencias que se llevarán a cabo se encuentran la identificación del cadáver, la recopilación de imágenes de seguridad y otras investigaciones pertinentes.
“Legítima defensa”
Algunos especialistas en la materia se pronunciaron sobre este caso. La abogada penalista, Romy Chang, indicó que no se podría tratar de un delito de homicidio, debido a que en las imágenes se visualiza que fue por “legítima defensa”.
“Este es un caso clásico de legítima defensa, porque estamos hablando de un supuesto donde el delincuente ingresa haciendo un ademán. Además, que busca engañar a las víctimas y hacerles creer que tiene un arma”, señaló al programa Al Estilo Juliana.
Además, indicó que el padre actuó para defender a su familia. A su vez, comparó con otros casos que sujetos ingresan con “armas de juguete”, pero sustentó que el Poder Judicial indica que lo importante “es la valoración de la víctima”.
Agregó que la proporcionalidad del arma es “irrelevante”, porque no se compara que sea un mismo artículo, sino que dependerá de las circunstancias que se podría calificar como “peligro”. “No es arma con igual arma, sino la situación”, dijo la letrada.
Manifestó que si el progenitor hubiera disparado en la pierna a este sujeto se podría haber arriesgado que este tenga un arma de fuego u otro artículo que atente contra su familia o su misma vida.
Romy Chang consideró que el fiscal debe analizar la situación y en caso no halle “una legítima defensa” podría solicitar prisión preventiva ante el Poder Judicial.
Del mismo modo, el exjefe de la Dircote, José Baella, también manifestó que se podría sustentar como una legítima defensa. Sin embargo, aclaró que lo único que podría ser cuestionable es que la mano del sujeto “parecía que llevaba un arma”.
“Creo que estamos ante un caso de legítima defensa y al que tener mucho cuidado, porque todas maneras van a tener que ser regular en la Policía por haber sido en flagrancia”, declaró a RPP Noticias.
Familiares piden justicia
El jueves, la familia y vecinos de Chávez Santillán se dieron cita en los exteriores de la dependencia policial de VES para solicitar la liberación del empresario.
La esposa del empresario también acudió a la Depincri para que brinde sus declaraciones. A su salida manifestó que anteriormente habían sido víctimas de delincuentes y aseguró que Chávez Santillán sí tenía permiso para portar armas.