Durante el 2022, el número de unidades productivas de hogares (negocios) en el Perú sumaron 9.1 millones, de los cuales 5.5 millones se encuentra en la informalidad, según el estudio Informalidad 360° del Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (IEDEP) de la Cámara de Comercio de Lima (CCL).
Ello evidenciaría una expansión de 7.9% respecto al 2021, siendo la tasa más alta desde 2014 y excluyendo el rebote estadístico del 2021, reveló el gremio empresarial.
“Este resultado se debería al bajo crecimiento económico que viene registrando el país lo que impulsa a las familias a generar sus propios negocios e ingresos, más aún considerando que en los dos últimos años hemos enfrentado elevadas tasas de inflación”, sostuvo el jefe del IEDEP de la CCL, Óscar Chávez.
Tomando en cuenta la Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO) 2022, elaborada por el Instituto Nacional de Estadísticas e Informática (INEI), en el año anterior, el empleo informal alcanzó a 13.4 millones de peruanos representando el 75.7% del empleo total, cifra superior en número en 2.2%, pero menor a la tasa registrada en el año 2021 (76.8%).
Cabe mencionar que el IEDEP de la CCL considera negocios informales aquellos que no están registrados en la Superintendencia Nacional de Aduanas y Administración Tributaria (Sunat).
Según el análisis elaborado por el gremio empresarial, del total negocios informales, el 39% tiene una antigüedad menor a un año, mientras el 28%, entre uno y cinco años. Solo un 7% de este tipo de negocios supera los 20 años.
En regiones y actividad económica
A nivel regiones, Lima concentra el mayor número de negocios informales (35.9%), seguido de Piura (7.2%), La Libertad (6.1%) y Lambayeque (5.0%), todos estos departamentos están ubicados en la zona costera del país.
Y conforme a la actividad económica que desempeñan, los negocios informales se concentran mayormente en Comercio (34.2%), Transporte y almacenamiento (22.2%) y Alojamiento y restaurantes (12.6%).
Cuando se consulta a estos negocios sobre las razones principales por las que no se han registrado en la Sunat, el 51.2% considera que no es necesario, mientras que el 33.1% advierte que su negocio es pequeño o que produce una baja cantidad y un 8.5% señala que es un trabajo eventual.
En menor medida, el 1.9% señala que no podría asumir una carga tributaria, mientras el 1.3% piensa que los trámites son muy complicados; en tanto el 1.3% indica que desconoce si debe registrarse; 0.8% señala que no sabe dónde o como registrarse y el 0.7% precisa que le quita demasiado tiempo.