La guía internacional Taste Atlas ha clasificado a Lima como uno de los destinos para disfrutar de una variedad excepcional de platos típicos. El reconocimiento destaca la diversidad de sabores y el uso de pescados y mariscos frescos en la escena gastronómica limeña. La fusión innovadora de ingredientes tradicionales con técnicas culinarias internacionales convierte a la capital en un verdadero punto de encuentro para los amantes de la comida.
Lima es reconocida como la tercera ciudad del mundo con la mejor comida
El ranking 2023 que presenta la guía internacional Taste Atlas presento un Top 10 de ciudades donde se encuentra la mejor comida del mundo. Un verdadero ‘foodie’ debe reconocer sus sabores y disfrutar de estas delicias, al menos una vez en su vida.
No es sorpresa para los peruanos que nuestra capital, Lima, esté considerada dentro de las mejores 5, dejando atrás a Ciudad de México, Tokio, New York, Nápoles, entre otros.
La ‘Ciudad de los Reyes’ se encuentra ubica en el puesto tres, con 4.66 de puntaje. Por una diferencia mínima quedo debajo de Florencia y Roma, en Italia.
¿Qué comer en Lima?
Este sitio especializado también recomendó una lista de platos que los visitantes deben probar. En el caso de Perú, estos pueden encontrarse en casi todos los distritos, con precios variados, así como vivir experiencias únicas para degustar sabores únicos. Aquí te presentemos los infaltables que los viajeros necesitan disfrutar, de acuerdo a Taste Atlas:
- Butifarra
Al igual que otros platos reconocidos de nuestra gastronomía, tiene sus raíces en la fusión de culturas. En este caso, la creatividad de los peruanos se unió al consumo europeo tradicional de embutidos. La sarsa criolla se sumó posteriormente para realzar esta delicia y añadirle ese toque distintivo que solo nuestra versión posee.
- Salchipapa
Surgida en las calles de Lima en los años cincuenta, fue una opción económica y rápida para aquellos con recursos limitados o trabajadores que necesitaban una comida rápida para continuar con sus tareas. Aunque en otros países ya existían platos de comida rápida, en Perú aún no era común consumir alimentos preparados en las calles. Esto llevó a un aumento de puestos de venta, conocidos localmente como carretillas, que ofrecían salchipapa atraer a los comensales con su bajo precio, preparación rápida y delicioso sabor.
- Ceviche
La tradición de prepararlo se originó en la época preincaica con la cultura Mochica, quienes maceraban pescado fresco con el jugo de la fruta cítrica “tumbo” y hierbas locales. Durante el imperio Inca, la receta evolucionó al marinar el pescado con chica de jora, una bebida andina sagrada, además de sal y ají.
Después de la llegada de los españoles, se agregaron dos ingredientes clave: la cebolla y el jugo de naranjas agrias. En el siglo XX, las naranjas agrias fueron sustituidas por limones.
- Anticucho
En el pasado, antes de la llegada de los españoles, la carne de llama era consumida en Perú y se condimentaba con hierbas aromáticas y ajíes. Durante el período del virreinato, los esclavos se alimentaban con las menudencias y sobras de las vísceras de las reses. Con la gradual llegada de los conquistadores, el plato fue transformándose hasta adoptar su forma actual: grandes trozos de corazón de vaca ensartados en palitos de caña como brochetas y asados a la parrilla.
- Ají de gallina
Durante el siglo XIV, en Cataluña, España, era común servir el Menjar Blanc, un plato que consistía en pechuga de gallina hervida en trozos, sazonada con azúcar, nueces y almendras, y espesada con harina y arroz. En la gastronomía española actual, se mantiene una variante de este sin carne avícola.
Durante la época colonial, esta presentación llegó al Perú y se transformó en el Ají de gallina que conocemos hoy en día. La receta mantuvo la pechuga, el arroz y las nueces, pero reemplazó las almendras y el azúcar por pecanas y ají amarillo, agregando así color y sabor característicos.