Patricia Benavides: sus datos académicos son inexactos y no hay evidencia alguna de sus tesis, ratifica Susel Paredes

La congresista volvió a exponer sus hallazgos en torno a los grados de Patricia Benavides e invocó a la JNJ a transparentar el avance de su investigación por este caso

Patricia Benavides, titular del Ministerio Público, tiene cuestionamientos por su tesis doctoral que, hasta el momento, no hace pública. (Universidad de Lima)

Los datos académicos que consignó Patricia Benavides en su expediente de 2010, cuando fue ratificada por la Junta Nacional de Justicia (JNJ), y en su adjunto de 2021, cuando fue ascendida a fiscal suprema titular, son inexactos y discrepantes, remarcó este martes la legisladora Susel Paredes, quien lidera un pedido público para que la fiscal de la Nación trasparente la información sobre sus grados.

En un mensaje difundido en Twitter, la congresista enfatizó, además, que todavía no hay evidencia física ni virtual de las tesis con las que Benavides obtuvo los títulos de maestría y doctorado en la Universidad Alas Peruanas (UAP), y que “ante la ausencia de respuesta o descargos públicos, los cuestionamientos [...] siguen vigentes”.

En su ratificación de 2010, la titular del Ministerio Público consignó que obtuvo el grado de “maestría en Derecho Civil y Comercial” y el de “doctorado en Derecho” en la Universidad San Martín de Porres, aunque omitió toda mención de la UAP, al igual que en su ascenso de 2021.

Ese mismo año (2010), además, la magistrada declaró seis meses de estudio en inglés y dos en quechua, pese a que la “Ley exigía el conocimiento de dos idiomas extranjeros para el grado de Doctor”, comentó la parlamentaria en RPP.

De noviembre a diciembre de 2007, Benavides cursó el runa simi en el Instituto Superior de Quechua (Insuq) hasta nivel intermedio; y de agosto de 2007 a febrero de 2008, solo nivel básico, en el Instituto Internacional de Sistemas Empresariales (IISEP), que dicta, entre otros cursos, Cosmetología y Gastronomía.

Esta misma información no fue expedida en 2021, cuando Benavides devino en fiscal suprema. Todas las casillas sobre manejo de otros idiomas se encuentran vacías, a diferencia de su documento de 2010.

Desde marzo pasado, Paredes insiste en que la magistrada difunda sus investigaciones que se encuentran no habidas, pues por esos años ninguna universidad estaba obligada a tener un repositorio, según admitió la propia casa de estudios en Hildebrandt en sus trece.

Parte del jurado no recuerda su sustentación ―por la que obtuvo calificación máxima—, y siete excompañeros de clase revelaron al semanario que no la vieron en el aula. A finales de abril, la JNJ ratificó que la investiga por supuestas irregularidades en su título. Es decir, si comprobara que la tesis no existiera o es una farsa, su destitución sería inmediata.

El despacho de Susel Paredes dijo a Infobae que por ahora espera respuestas oficiales sobre “los avances y los temas exactos que están siendo investigados”. Todavía no han recibido ningún documento, por lo que invocó a transparentar el proceso.

Bruno Amoretti, periodista de Hildebrandt en sus trece que destapó el misterio de la tesis doctoral de la fiscal ―clave para que obtuviera su puesto—, comentó que la JNJ deberá ser muy “cuidadosa” con sus decisiones.

“Si la fiscal puede demostrar en los procesos internos del organismo que existen su tesis y que fue hecha con estándares académicos válidos, no tendrá nada que temer. Si no, el reglamento señala que debe ser destituida, porque gracias a ello obtuvo el mayor puntaje y logró su cargo”, dijo.
Patricia Benavides, titular del Ministerio Público, tiene cuestionamientos por su tesis doctoral que, hasta el momento, no hace pública. (Universidad de Lima)

“Tanto hermetismo genera muchas sospechas. Creo que ella debería mostrar su trabajo para que se someta al escrutinio público. [...] Todo apunta a que la JNJ tendrá mucho trabajo por hacer y deberá ser muy cuidadosa con sus decisiones”, matizó.

Benavides, quien lidera los casos abiertos contra Pedro Castillo y Dina Boluarte, es investigada, además, por los cambios del equipo especial Cuellos Blancos, que sigue una red de corrupción en la Judicatura; y de usar su cargo para beneficiar a su hermana en una investigación sobre presuntos sobornos para liberar a reos imputados por narcotráfico.

Recientemente, la JNJ le abrió una nuevo proceso por recibir una condecoración del alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, procesado por presunto lavado de activos. Aníbal Quiroga, quien la defiende legalmente, ha confirmado que su patrocinada acumula un total de 19 denuncias presentadas ante la JNJ, las cuales “pretenderían destituirla”.
La fiscal de la Nación manifestó que está trabajando con las otras fiscalías de la región y respondió a las críticas. Video: TikTok/jmamagwxrj2

Las acusaciones tienen “un elemento interesante porque ella, siendo una fiscal joven, es nacida en la JNJ. La misma JNJ, que ha nombrado magistrados y jueces importantes, y ha renovado de manera importante la Corte Superior, la elige a ella [a mediados de 2022]”, expresó el constitucionalista en Willax.

Para Quiroga, la misma “pugna ideológica” que se volcó contra Castillo, preso tras orquestar un autogolpe, ha surgido ahora contra la representante del Ministerio Público.

En una aparición pública en Huaura, donde inauguró la Sala de Entrevista Única del distrito fiscal, la segunda mujer más influyente del país hizo referencia a los cuestionamientos de manera escueta. “Toda mi vida personal y profesional ha sido y será con respeto a la ley, por eso soy fiscal. Seguiremos investigando y trabajando en beneficio de la ciudadanía, pese a quien le pese”, zanjó.