Marco Antonio Palomino, procurador público del Poder Judicial, contrató a su cuñado Rolan Llacsahuanga y a varios amigos de su hermana Norma Palomino para que laboren en la institución del Estado que él lidera, pese a que esto podría configurarse como el delito de nepotismo, según Cuarto Poder.
A Palomino se le nombró en el cargo que actualmente ostenta en 2019. Dos años después, Llacsahuanga, esposo de la hermana de este y pastor evangélico en sus ratos libres, ingresó a trabajar en el área administrativa de la Procuraduría Pública del Poder Judicial.
De acuerdo al informe periodístico, en febrero de 2021, el cuñado participó del “Proceso CAS 009-2021″ de esa entidad, cuando ya Palomino era el máximo titular. El puesto era de apoyo administrativo y obtuvo el “primer orden de mérito” como único concursante, lo que devino en su contratación.
En la “declaración jurada de incompatibilidad y nepotismo”, Llacsahuanga” no precisó que tenía vínculos de parentesco y al parecer olvidó que su cuñado era el mismísimo procurador.
El 5 de febrero de 2011, el pastor Llacsahuanga se casó con Cecilia Palomino, hermana de Marco Antonio Palomino, quien -por ese entonces- ya tenía vínculos con varias altas autoridades del Poder Judicial.
Cuarto Poder reveló un registro con detalles del contrato de Llacsahuanga en la Procuraduría y remarcó que este pasó de plazo “determinado” a plazo “CAS indeterminado, lo que le permitiría ser personal permanente, y solo a tres meses de haber asumido funciones administrativas en dicho organismo.
“Acá estaríamos ante un supuesto de nepotismo. Este sanciona la prohibición de contratar a un familiar no solo por consanguinidad hasta cuarto grado, sino por afinidad hasta segundo grado y ahí están precisamente los cuñados. Es muy grave”, dijo el abogado César Abanto al dominical.
“Debe sustraerse de cualquier situación que genere algún tipo de conflicto personal en el desarrollo de sus funciones y deberes. Las cualidades esenciales del procurador tienen que ser experiencia, liderazgo y probidad“, acotó.
Llacsahuanga, con las denuncias encima, decidió renunciar al cargo aludiendo un malestar de su madre. Jamás aceptó ni mencionó a su cuñado. Tampoco quiso declarar al dominical que lo buscó en reiteradas oportunidades para obtener sus descargos.
Amigos de la hermana
Según el informe, Norma Palomino no trabaja en la Procuraduría, pero aquí entraron a laboral varios de sus compañeros de promoción de la Universidad Seminario Evangélico de Lima.
La hermana del procurador Palomino registra en Sunedu ser “Bachiller en Misterio Pastoral” siendo diplomada en diciembre del 2021, grado y fechas que coinciden con los actuales trabajadores de la procuraduría Arroyo Alania, Isaac; Cáceres Almonacid, Patricia; Vásquez Alvarado, Sergio, y Laguna Torres, Benjamín.