Keiko Fujimori, la lideresa de Fuerza Popular que este viernes descartó padecer una neoplasia maligna, fue sometida a una intervención quirúrgica para extirparle por completo la tiroides, una glándula minúscula con forma de mariposa que se sitúa bajo la piel del cuello.
Se trata de un órgano que segrega las hormonas tiroideas, las cuales regulan la velocidad de los procesos químicos del organismo (índice metabólico) de dos maneras específicas: estimulando casi todos los tejidos para que produzcan proteínas y elevando la cantidad de oxígeno que utilizan las células.
Romyna La Rosa Vásquez, jefa del Servicio de Endocrinología del Instituto Neurometabólico, precisa a Infobae que estas sustancias químicas afectan a muchas funciones corporales vitales: desde la frecuencia cardíaca, la velocidad de combustión de las calorías, el mantenimiento de la piel, el crecimiento, hasta la producción de calor, la fertilidad y la digestión.
“En este caso, hubo un diagnóstico previo de una lesión que presentaba un riesgo del 30% de convertirse en cancerígena. Por ese resultado, toda la glándula, incluido el nódulo tiroideo —donde estaba la lesión― se ha retirado completamente”, señala la especialista.
Según Miguel Torres, portavoz de Fuerza Popular, Keiko Fujimori pasó por esta cirugía —tiroidectomía total— el miércoles pasado. El procedimiento estuvo a cargo del doctor José Carlos Gutiérrez, cirujano de cabeza, cuello y maxilofacial.
La política fue intervenida “sin ningún contratiempo” y el siguiente paso era realizar “una patología del tumor extraído para definir su naturaleza exacta y posterior tratamiento”. La Rosa Vásquez explica que el análisis de un tumor tiroideo se desarrolla “con cortes muy finos” en toda la lesión.
“En el caso de Fujimori se ha descartado la presencia de una neoplasia maligna, entonces se ha seguido otro protocolo. Ahora ya no tiene glándula. Y la glándula tiroidea no se regenera, de modo que de por vida deberá seguir reemplazo hormonal. Felizmente, esta hormona existe en tabletas [levotiroxina]”, explica la también jefa del Equipo Funcional de Endocrinología del Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas.
La dosis estándar, según la experta, son 100 microgramos de levotiroxina al día, la misma que se administra vía oral y en ayunas. “Media hora antes del primer alimento por todos los días. Sin embargo, los exámenes de sangre ―primero al mes, luego cada tres meses o seis y después cada año— indicarán si la dosis es adecuada, o si hay que subirla o bajarla”, matiza.
La médica remarca que, si un paciente con este cuadro no continúa el reemplazo hormonal, “el metabolismo se va a la baja, se vuelve lento, y deviene en resequedad de cabello y piel, falta de eliminación de líquidos, hinchazón del cuerpo, tránsito intestinal lento e hipersomnia (mucho sueño)”.
Con un tratamiento riguroso, en cambio, el paciente “puede seguir una vida completamente normal”. El pasado 20 de abril, la lideresa opositora, quien lleva una dieta cetogénica (baja en carbohidratos), había anunciado la detección de un tumor tiroideo “de 4 x 2 cm aproximadamente”.
La hija y heredera política del expresidente Alberto Fujimori (1990-2000) afronta actualmente un proceso judicial por presuntos aportes irregulares de la empresa brasileña Odebrecht en las campañas presidenciales de 2011 y 2016, cuando fue superada en las urnas por Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski, respectivamente.
Paulina del Rocío Roque, fiscal adjunta del Equipo Especial Lava Jato, expuso esta semana unas 5 mil 900 pruebas en su contra. Fujimori también ha sido implicada por el Ministerio Público en una organización criminal liderada por Fidel Ramírez, tío del excongresista Joaquín Ramírez, contra quien se ejecutó días atrás un megaoperativo de incautación de bienes.
Según la tesis fiscal, ella integraba el brazo político de la red criminal junto con Pier Figari, su exasesor, con quien captaba “bienes ilícitos para obtener poder político” y “blindar” a la organización en agravio de la Universidad Alas Peruanas (UAP) y del Estado. Por este caso se han incautado 214 inmuebles en nueve regiones del país y hay otros 14 imputados.