La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) reveló en su informe “Situación de Derechos Humanos en Perú en el contexto de las protestas sociales” que 56 personas murieron y otras 912 quedaron heridas durante las manifestaciones que iniciaron para pedir una nueva Constitución, así como la salida de los congresistas y de Dina Boluarte como presidenta.
Estos ataques ocurrieron en el marco de 477 protestas que se realizaron entre el 7 de diciembre de 2022 y el 23 de enero de 2023, según información recabada por la Defensoría del Pueblo, que la CIDH consideró para su estudio.
También se contabilizaron 323 movilizaciones, 80 paralizaciones, 68 concentraciones y plantones, 6 vigilias, 45 marchas por la paz y al menos 68 hechos violentos.
Durante el periodo descrito, 2 bebés fallecieron porque no pudieron ser atendidos en centros de salud, ya que las carreteras se encontraban bloqueadas debido a las manifestaciones. Entre los fallecidos, también se reportaron 8 adolescentes y un policía que, según datos recibidos por la CIDH, apareció quemado.
En tanto, de las 912 personas heridas, 580 fueron miembros de las fuerzas del orden.
Cronología de los hechos
Para conocer el contexto en el que personas fallecieron y quedaron heridas, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) consideró información sistematizada por la Defensoría del Pueblo y su Adjuntía para la Prevención de Conflictos Sociales y la Gobernabilidad. También empleó información de fuentes del Estado peruano, organizaciones de la sociedad civil y medios de comunicación.
En esa línea, destacan que el 7 de diciembre de 2022, tras la detención de Pedro Castillo, se reportaron concentraciones en el frontis de la prefectura de Lima. Allí personas manifestaban para que liberen al exmandatario. Al mismo tiempo, otros ciudadanos pedían que no se cambie la Constitución.
En esa misma fecha, se realizaron protestas en Arequipa y otras partes del Perú. Al día siguiente, el 8 de diciembre, cerca de mil personas salieron a las calles en Lima. Lo mismo ocurrió en Cajamarca, Trujillo, Puno, Ayacucho, Huancavelica y Moquegua. También se bloquearon rutas.
El 9 de diciembre, en Lima, se reportaron confrontaciones afuera del Congreso entre personas que protestaban y la Policía Nacional del Perú (PNP). También bloqueos de carreteras en Lima y Arequipa. Fue en este contexto en el que Boluarte, como presidenta, anunció que evaluaría el adelanto de elecciones, una de las demandas de los manifestantes.
En Andahuaylas y Apurímac, el 10 de diciembre, se reportaron manifestaciones y hechos violentos entre ciudadanos y la Policía Nacional del Perú (PNP). También el secuestro de dos agentes y ataques contra entidades del sector justicia. Los ciudadanos tomaron la pista del aeropuerto de Huancabamba, Andahuaylas, Apurímac. De allí, 20 personas resultaron heridas, incluyendo 4 policías.
“El 11 de diciembre, se hicieron públicos los fallecimientos de Beckham Romario Quispe Garfias, de 18 años; y D.A.Q, de 15 años. También el 11 de diciembre se denunciaron agresiones y amenazas contra el personal de las compañías de bomberos voluntarios y contra la infraestructura de cuarteles. El 12 de diciembre, se dieron manifestaciones y homenajes a las personas que fallecieron en Andahuaylas el fin de semana previo. La Defensoría del Pueblo reportó hechos de conflictividad que resultaron en la muerte de 4 personas. Entre ellas, un adolescente, R.P.M.L., de 16 años, en Chincheros, Apurímac; John Erik Enciso Arias y Wilfredo Lizarme Barbosa, ambos de 18 años, en Andahuaylas, Apurímac; y Miguel Arcana, de 23 años, en Cerro Colorado, Arequipa”, determinó el estudio.