Federico Salazar y la vez que confesó que estuvo a punto de separarse de Katia Condos: “Tuve depresión y era como un bulto”

Federico Salazar es uno de los periodistas de televisión más queridos. Sus décadas al frente de la pantalla chica en el noticiero de la mañana lo han convertido en un ícono para todos aquellos que se alistaban al colegio con su conteo de las horas para no llegar tarde a clases.

Pese a mostrar muy serio con las noticias y ameno con las bromas, no todo ha sido felicidad para él. Y es que, recientemente ha confesado que sufrió de depresión, luego de haber sido víctima de la COVID-19, esto causó ausencia en su hogar. En una reciente entrevista con el canal de YouTube ‘La Habitación de Henry Spencer’ de Luis Carlos Burneo, relató como vivió este proceso.

Relató que no hablaba ni muchos tenía energía para nada y la poca que le quedaba solo la concentraba para su trabajo y luego, al volver a casa, solo se echaba en la cama.

“(En ese momento) Estás deprimido, no hablas, no tienes energía para nada. Yo llegaba y lo único que hacía era tirarme a la cama. Es bien bravo. Toda la energía la concentraba para el programa, después no me quedaba nada. Llegaba y me tiraba a la cama”, agregó.

Por otro lado, confesó que llegó a verse con el psiquiatra y estuvo medicado por aproximadamente un año. Aunque no hay forma de comprobar que fue una secuela del COVID, considera que fue así porque antes de la enfermedad no le había pasado eso.

“Estuve medicado, nunca dejé mi terapia. Estuve como un año o quizá un poquito más. No está comprobado científicamente que la depresión y el insomnio, sean parte de lo que llaman el long COVID, pero para mí es muy fácil porque antes no tenía y después el COVID tenía”, agregó.

Aunque logró salir de este duro momento, algo sucedió que terminó cambiando el ritmo de su vida. Y es que luego de recuperarse, nuevamente se contagió de COVID-19 y la depresión reapareció. “Me pasó una cosa curiosa. Fui mejorando hacia el año, quizá un poquito más, con la medicación. Ahí comencé a mejorar bastante y cuando ya estaba bien, de pronto me da un segundo COVID. Me volvió a tumbar. Con depresión e insomnio”, agregó.

Al volver a un segundo COVID con depresión e insomnio, la relación con Katia Condos se iba desgastando. Según contó Federico Salazar, él no era una pareja presente para su esposa y con lo que le pasaba en su salud mental parecía no estar presente para su familia.

Incluso, pese a estar en la mesa, parecía no estar presente porque no hablaba ni tenía alguna reacción con lo que sucedía alrededor. “Katia me ha contado que yo almorzaba con ellos y miraba para abajo. No hablaba, no me reía”, relató el periodista.

Por ello, tuvo que conversar con su esposa. Tomaron un viaje y hablaron de lo que les sucedía y demás cosas de parejas que debían mejorar. “Primero conversé con Katia porque esto fue llevándonos a una especie de separación sentimental. Entonces tuvimos un viaje que me habían invitado y yo la invité a ella. Ahí hablamos largo y tendido de muchísimas cosas de pareja y esto, ahí convenimos en varias cosas”, sentenció sobre el tema.