Alejandro Toledo pisó territorio peruano el último domingo 23 de abril para que enfrente la justicia peruana. A solo un día de su llegada, el Juzgado Transitorio Especializado de Extinción de Dominio de Lima admitió a trámite una demanda de extinción de dominio contra ocho inmuebles del expresidente y de su familia.
Los inmuebles que serían incautados son los que se encuentran ubicados en Punta Sal (Tumbes) y en la urbanización Camacho, en el distrito de La Molina (Lima). Ambas propiedades se encuentran al nombre del expresidente y de su esposa, Eliane Karp.
Asimismo, una casa, tres estacionamientos y dos depósitos, que se están ubicados en el distrito de Santiago de Surco. Estas propiedades se encuentran a nombre de la suegra del jefe de Estado, Eva Fernunbug, de quien también sería incautada una cuenta bancaria por la suma de USD 42, 237.70, “más intereses que corresponde”.
De acuerdo con la información del Poder Judicial, esta demanda busca que se declare como titular de los derechos al Estado peruano, bajo la representación del Programa Nacional de Bienes Incautados (PRONABI) de manera definitiva.
Esta demanda fue presenta por la Sexta Fiscalía Provincial Transitoria de Extinción de Dominio. De acuerdo con la tesis fiscal, estas propiedades fueron adquiridas con los millonarios sobornos que habría entregado la empresa brasileña Odebrecht al exmandatario Toledo.
Ante ello, el Poder Judicial precisó que notificará a la esposa y suegra del expresidente. Mientras tanto, a Alejandro Toledo “corresponde emplazarle con la demanda, anexos, autos” y de esta resolución.
Contradicciones de Toledo
En un primer momento, Alejandro Toledo justificó que los inmuebles adquiridos por su suegra fueron con la indemnización que se le otorgó al ser víctima del Holocausto. Sin embargo, se conoció que no se encontraba en esta lista.
Estos inmuebles se encuentran bajo la administración de la Comisión Nacional de Bienes Incautados (Conabi). Esto luego de haber sido incautados ante la presunta compra con dinero ilícito que habría recibido Toledo, tal y como lo afirmó en un momento su amigo y empresario, Josef Maiman.
En la audiencia de control de identificación realizada el domingo 23 de abril, Toledo brindó su dirección de uno de los inmuebles incautados, precisamente el que se encuentra en La Molina.
Según las imágenes de Punto Final, la lujosa propiedad del matrimonio Toledo Karp ahora se ha convertido en el almacén de una institución de Estado. En lo que era dormitorio solo se ve cajas con documentación. Asimismo, la piscina se encuentra sin agua y poco queda los recuerdos del expresidente.
Alejandro Toledo pasará su segunda noche en el penal de Barbadillo luego de su extradición a Perú para cumplir 18 meses de prisión preventiva hasta que duren las investigaciones por el caso Interoceánica. Sin embargo, Ecoteva es otro de los asuntos que se encuentran pendiente y por el cual su situación podría aumentar.
El caso Ecoteva también es investigada su esposa Eliane Karp y su madre por el dinero ilícito que habrían recibido, con el cual se presume que se adquirió estas propiedades.
Toledo se ha declarado “inocente”, pero lo que se sabe hasta el momento sobre su caso es que su esposa también podría llegar a territorio nacional para que responda por las acusaciones en su contra por los casos de corrupción.