Al cierre del primer trimestre, en Lima Metropolitana se registraron 5,1 millones de empleos. Esta cifra es un 4.1% más que en el primer trimestre del año pasado y un 6.1% más en comparación con el periodo prepandemia, reportó el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).
Sin embargo, aunque el mercado laboral en la capital continúa recuperándose, lo está haciendo con condiciones menos favorables, es decir, la calidad del empleo no lo hace, analizó el Instituto Peruano de Economía (IPE).
En detalle, el IPE reportó que la tasa de empleo adecuado fue de 58.6% en este primer trimestre. Si bien esta cifra es superior a la de hace un año (55.2%), aún es inferior a la observada antes de la pandemia (63.3%).
En este período de análisis también se observó que 2.1 millones de trabajadores de la capital se encontraban subempleados entre enero y marzo. De este total, 1.7 millones son trabajadores subempleados por ingresos (32.3% del empleo en Lima Metropolitana), es decir, no perciben ingresos suficientes para cubrir una canasta mínima de consumo. Con este resultado, la tasa de subempleo por ingresos no ha mejorado en diez meses y se encuentra en niveles de hace 12 años.
Variación de los salarios
Los ingresos en Lima Metropolitana también están mostrando una lenta recuperación. El ingreso laboral promedio de un trabajador en la capital fue de S/1.841 mensuales entre enero y marzo de 2023. Aunque este monto supera en términos reales al del año anterior en un 3%, se encuentra todavía un 11% por debajo del nivel prepandemia. Así, esto se traduce en que la capacidad adquisitiva de los trabajadores de la capital se ha reducido en casi S/230 desde el inicio de la pandemia.
“En detalle, el ingreso laboral real se encuentra por debajo de los niveles del 2019 tanto para los hombres (-13.4%) como para las mujeres (-5.6%) en Lima Metropolitana. La brecha de género en salarios persiste: por cada S/1 que percibe en promedio un trabajador limeño, una trabajadora gana S/0.76″, señaló el IPE en un reciente reporte.
Además, esta lenta recuperación de los ingresos se relaciona con la mayor cantidad de trabajadores en empresas de menor tamaño. En promedio, estas presentan una productividad laboral mucho menor que las empresas más grandes. En el primer trimestre, las micro y pequeñas empresas (1 a 50 trabajadores) registraron 292 mil trabajadores más que antes de la pandemia. Por su parte, las medianas y grandes empresas (más de 50 trabajadores) cuentan con tan solo 2 mil empleos más que en el 2019.
Por último, según edades, los trabajadores jóvenes de 14 a 24 años continúan siendo los más afectados, anotando una caída de 8.2% respecto al nivel prepandemia. Esto equivale a una pérdida de 72 mil empleos juveniles. Además, el grupo de 25 a 44 años presentó una caída de 0.5%, es decir, 13 mil empleos menos. En contraste, el número de trabajadores de 45 años a más se ubicó 26.8% por encima de la prepandemia, lo que representa un incremento de 380 mil empleos.