Hijo de “La Tota” sobre la matanza de San Miguel: “Mientras disparaban y mataban a mi familia decían ‘qué rico’”.

Luego de más de dos meses de la trágica masacre en el distrito de San Miguel donde asesinaron a Israel San Román, o más conocido como ‘La Tota’, y a su familia; el único sobreviviente, Israel Elías San Román Tapia, su hijo mayor, decidió romper su silencio y brindar detalles del fatídico día.

Como se recuerda, aquella lamentable mañana del 6 de febrero, “La Tota” se dirigía a un día familiar en la playa y viajaba en un vehículo junto a su esposa, tres hijos y sus padres. Sin embargo, sicarios los interceptaron y acribillaron, sobreviviendo solo el hijo mayor de esta familia.

“Es la primera y última vez que hago una entrevista. Lo hago por mi seguridad y para que se haga justicia por mis hermanos y mis abuelos que están en el cielo”, declaró Israel Elías San Román Tapia, hijo mayor de “La Tota”, para el dominical Panorama.

“No solo lo mataron a él [mi papá]. Yo también estoy muerto en vida”, añadió a modo de resumen sobre estos más de dos meses.

En una delicada entrevista, San Román Tapia, en primer lugar, aseguró que los responsables de la muerte de su familia, tanto los actores intelectuales como los materiales, son los mismos que ha identificado la Policía Nacional del Perú (PNP) en su tesis.

Para el cuerpo policial, el autor intelectual del asesinato sería David Durán Larrea, alias ‘Loco Paul’, quien había salido recientemente de la cárcel y cuya información era de conocimiento de “La Tota”.

Cuando ocurrió esta masacre, San Román Tapia tenía 17 años. Y pese al vínculo sanguíneo, él era diferente a su padre. Los últimos tres años de su etapa secundaria la vivió internado en el colegio Leoncio Prado, donde recibió honores por sus buenas notas.

Sin embargo, en la calle, la realidad era distinta. Y, por ello, “La Tota” le había contado al respecto.

“Hijo, para que te des cuenta, lamentablemente, la gente es así. La gente ve que estás en algo, estás tranquilo, estás estudiando, siguiendo tu vida por lo legal, pero no van a parar, hijo”, cuenta San Román Tapia sobre una de las conversaciones que tuvo con su padre.

Bastó solo un corto tiempo para que dicha premonición, lamentablemente, se cumpla y sicarios le quiten la vida a seis de sus familiares.

“Cuando yo bajo del vehículo (luego de los disparos) veo a mi papá que tenía muchos huecos en la cara, en la cabeza. Mi hermano estaba agonizando. Mi abuelo también. Cuando veo a mi madre tenía tres huecos en la cara”, detalló.

El hijo mayor de “La Tota” hoy teme por su vida y siente que, en cualquier momento, el ‘Loco Paul’ actuará.

“Siento que en cualquier momento va a salir un reportaje de que el último sobreviviente de la masacre de San Miguel fue hallado sin vida. Voy a ser asesinado”, señaló.

Israel Elías San Román Tapia también narró que su hermana murió en sus brazos y que, mientras trataba de salvar a su hermano, este se quejaba con mucho dolor de molestias en su espalda.

“(Mi hermano) me abrazó y me dijo que me cuide mucho. Luego falleció. Me quitaron a mi madre, a mis hermanos, a mis buelos, personas inocentes. Presidente Dina Boluarte, mi vida corre peligro, no me dejen solo, necesito que me ayuden”, añadió.

Según cuenta, esta masacre se realizó hasta con un total de 50 balazos.

A San Román Tapia le dio una segunda vida su abuela, cuenta él mismo. Cuando los sicarios interceptaron el vehículo donde viajaban, empezaron acribillando a quienes se encontraban en la parte delantera, sus padres, y luego a quienes se encontraban atrás.

“En el fondo, escuchaba a mi hermana y a mi abuela gritar. Alguien dice ‘hay alguien atrás’. Creo que lo decían por mí. (Los sicarios) meten la cabeza y disparan a mi abuela. Ella me cubre como si fuera un manto y yo me acurruco en ella. Es así como no me llega ninguna bala”, narra el joven.

En este lapso, el hijo mayor de “La Tota” también recuerda el nivel de frialdad de los sicarios, quienes junto a la balas también lanzaban insultos.

“Mientras disparaban decían: ‘Te moriste perro, solo no vas a estar. A ti y a toda tu familia’. Mientras mataban (a mi familia) decían: ‘qué rico’. Alguien me vio y dijo: ‘ahí está el hijo de La Tota”. Y ese es el que arrasa (mata) con todo. Mata a mi hermana, a mi abuela, a mi mamá, a todos. A mí no me cae ningún impacto por mi abuela”, detalla.

Ahora, Israel Elías San Román Tapia solo espera que se le brinden garantías para su vida, en tanto logra salir del país, pues el sicariato le arrebató absolutamente todo.

“No quiere vivir más en el país. Acá no tengo nada que hacer. Cada segundo mi vida corre peligro. Mi deseo es salir del país sí o sí”, culminó.