Empoderadas y talentosas: la revolución femenina llega a la industria de la maquinaria pesada

Un cambio cultural en la forma en que se percibe a las mujeres en roles tradicionalmente masculinos, está abriendo nuevas oportunidades. Profesionales del Senati hablan con Infobae de este nuevo escenario que las desafía a destacar en el sector.

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Isabel Pagán y Daniella Vilca
Isabel Pagán y Daniella Vilca nos permiten conocer el mundo de los fierros que aprendieron en Senati. (Infobae/Carlo Fernández)

La industria de la maquinaria pesada ha sido tradicionalmente dominada por hombres, lo que ha resultado en una baja participación femenina y la existencia de desafíos en términos de discriminación y desigualdad de oportunidades laborales.

Sin embargo, en los últimos años se ha visto un aumento en la presencia de mujeres interesadas en trabajar en esta área, y se están llevando a cabo programas de capacitación y educación para desarrollar sus habilidades en este campo.

Ellas ocupan roles importantes, como operadoras, técnicas de mantenimiento, ingenieras y gerentes de proyectos. Las empresas están empezando a reconocer el valor de estas mujeres, quienes aportan en términos de diversidad, innovación y resolución de problemas, y están trabajando para crear entornos laborales más inclusivos y equitativos.

Infobae conoció las historias de dos peruanas formadas en Senati que han colocado punto final a los prejuicios y han cumplido sus objetivos de ser profesionales que destacan en el sector tras estudiar la carrera de Mecánica de Maquinaria Pesada.

Isabel Pagán, la instructora de Senati que marcó su propio destino le contó a Infobae su historia. Video / Edición: Carlo Fernández Castillo / Infobae.

Isabel Pagán, la instructora de Senati que marcó su propio destino

La historia de Isabel Pagán comienza a los 13 años cuando encontró a su padre reparando el carro de la familia junto a sus hermanos. Su curiosidad por saber qué estaban haciendo y cómo lo hacían despertó su interés de conocer más sobre los fierros.

El día que le confesó que se quería dedicar a la industria de las maquinarias, su padre tuvo miedo porque “en esas épocas, ver a una mujer meterse en el carro, embarrarse de grasa, no era muy conocido. Creo que era un temor de que me pase algo”.

“Con la paciencia de mis instructores y colegas de estudio logro cumplir mis objetivos porque no fue fácil entrar al mundo de la mecánica y tratar de amoldarme a la rudeza y fuerza que esta carrera demandaba esos años”, dijo a Infobae.
La docente Isabel Pagán durante
La docente Isabel Pagán durante una de sesión práctica junto a sus alumnos de Senati. (Infobae/Carlo Fernández)

Comentó que antes las mujeres estaban destinadas a estar solo en la cocina. En su familia esperaban que se convierta en enfermera, pero su pasión por los fierros fue aún mayor. Aunque ella tenía una plena confianza en sus habilidades, recuerda que los comentarios no eran muy alentadores. “Era mucho el machismo. Me he sentido afectada. Que una mujer no puede, prácticamente porque no es para mujeres”, manifestó. Ella lo asumió como un reto.

“Ver el brillo de felicidad en cada rostro de mis alumnos cuando termina una sesión de clase y sentirse llenos de emoción a seguir continuando”, expresó.

Hoy en día, no se ha apartado de las aulas. Su rol como docente en la institución le ha permitido ver una nueva realidad entre sus alumnos, que hay más mujeres que están interesadas en involucrarse en maquinaria pesada. “Yo les diría a las chicas, si yo he podido, por qué no ellas”, comentó.

Daniella Vilca, estudiante de maquinaria pesada de SENATI se confesó con Infobae acerca del mundo de los fierros. Video / Edición: Carlo Fernández Castillo / Infobae.

Daniella Vilca, una joven de acero

Al igual que muchos jóvenes peruanos, Daniella Vilca no tenía muy claro lo que quería estudiar al terminar el colegio. Aunque pensó en algunas opciones, se había propuesto dedicarse a una actividad que pueda ejecutar de manera manual y que la lleve a retarse físicamente. “Al ver en las noticias sobre la carrera y cómo las mujeres están entrando en ese rubro en Europa, me pregunté, ¿y por qué no en Perú? Ya que, aquí también hay muchas mujeres en el rubro de la mecánica; donde hacen de todo y manejan el mismo conocimiento que un mecánico del género opuesto”, explicó.

“Me inspiré y comencé a buscar datos, informes y documentales sobre cómo está creciendo el rubro de la maquinaria junto a la tecnología, y, finalmente, decidí optar por la carrera de Mantenimiento de Maquinaria Pesada”, dijo a Infobae.

Cuando hizo el anuncio a su familia sobre formarse en Mantenimiento de Maquinaria Pesada, no podían creerlo. Ella aceptó la postura que tomaron, y se mentalizó que ella podía hacer lo mismo que un hombre: sacar pernos, desmontar y mantenerse firme en su visión.

Una postal de Daniella Vilca
Una postal de Daniella Vilca junto a sus colegas de Senati. (Infobae/Carlo Fernández)

Daniella vivió una situación similar a la de Isabel Pagán. Relató que, durante sus primeros días, no sabía cómo acoplarse al grupo, ya que era la única mujer en el aula, y hasta incluso le mencionaron que quizás se había confundido de salón. Con el paso de los meses, creó una confianza con sus colegas, con quienes aprende de esta apasionante carrera que la lleva a retarse todos los días.

Siguiendo los pasos de esa mecánica que vio en un documental, quiere continuar con sus estudios para conocer más de esta profesión. Sabe que, aunque la cuota de mujeres sigue siendo una minoría, eso no significa que no sean valiosas y necesarias en el campo laboral, sobre todo en provincias y el extranjero.

“No es nada complicado si es tu meta. Las chicas podemos hacer de todo, de ser mecánicas hasta ingenieras. Hay muchos trabajos que nosotras podemos hacer. Esta carrera es de trabajar en grupo”, reveló al recordar que sigue aprendiendo y mira con optimismo su futuro lejos de Senati.

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