Las altas temperaturas e intensas lluvias que vienen afectando, principalmente la costa del Perú, evidencian la presencia del fenómeno de El Niño Costero, lo que podría seguir ocasionando un fuerte impacto en la economía y daños en la infraestructura vial.
De acuerdo con la Comisión Multisectorial del Estudio Nacional del Fenómeno El Niño (Enfen), hasta el momento, se mantiene el estado de “Alerta de El Niño Costero” en el país, debido a que se espera que las condiciones de este fenómeno climático continúen desarrollándose, por lo menos hasta julio y con una mayor probabilidad de magnitud débil.
En las últimas semanas, tal como ha informado Infobae, las intensas lluvias y tormentas eléctricas en Tumbes, Piura y Lambayeque han generado el desborde de quebradas y ríos que han arrasado terrenos de cultivo agrícola y han interrumpido la comunicación en vías de transporte. Asimismo, se ha visto daños en la infraestructura pública y privada (centros de salud, colegios, puentes, centros comerciales, entre otros).
Ante este evento climatológico, el presidente del Banco Central de Reserva (BCR), Julio Velarde, estimó que las intensas lluvias podrían haber ocasionado un impacto del 0.25% en el Producto Bruto Interno (PBI) del mes de marzo.
En ese sentido, el titular del BCR aseguró que en este contexto la economía peruana crecerá a un ritmo de 2.6% este año, menor de lo proyectado inicialmente, para luego alcanzar una expansión de 3% en el 2024. En el 2022, la economía nacional creció 2.7%.
Por su parte, el ministro de Economía y Finanzas, Alex Conteras, proyectó que, si se viene un fenómeno de El Niño, se estaría hablando de un impacto de 1 o 2 puntos porcentuales del PBI. Es decir, un desastre de esta magnitud, tal como ocurrió en 2017, implicaría pérdidas económicas de hasta S/18 mil 600 millones, aproximadamente.
Pérdidas económicas
Según un análisis de Credicorp Capital Asset Management, las pérdidas económicas en promedio por las intensas lluvias y un probable fenómeno de El Niño serían de S/ 13 mil millones, principalmente por el impacto en regiones como Piura, Lambayeque y Tumbes, donde ocurren mayores afectaciones por las prolongadas precipitaciones.
“Desde la oferta, la región norte tiene un impacto o pérdidas en la producción agrícola relacionada principalmente a agroexportación. También hay una relevancia en el sector turismo y a otros sectores que juegan alrededor de estas industrias, que son de comercio y servicios. Turismo está relacionado a comercio y casi igual que agroindustria explica alrededor del 10% o 15% del PBI regional”, comentó Darío Valdizán, director de Buy Side Research de Credicorp Capital Asset Management a Diario Gestión.
Mientras tanto, el ministro de la Producción, Raúl Pérez Reyes, estimó que las lluvias relacionadas con el ciclón Yaku ocasionaron pérdidas en el sector manufactura por cerca de 20 millones de soles a nivel nacional.
Sectores económicos más afectados
Con la llegada del ciclón Yaku a mediados de marzo, y las intensas lluvias asociadas a él, generaron interrupciones temporales de carreteras en la costa norte y centro, afectando la actividad económica, en especial en sectores como transporte, comercio y agropecuario; por lo cual estiman que el PBI de marzo solo haya crecido alrededor de 1.5%, informó el Departamento de Estudios Económicos de Scotiabank.
“Considerando los efectos de las protestas sociales y del ciclón Yaku, el PBI habría cerrado el primer trimestre con un crecimiento de alrededor de 0%, en contraste con nuestro estimado previo de 2.0% -alineado con nuestra proyección inicial de una expansión de 2.4% en el 2023″, precisó Pablo Nano, analista de Scotiabank.
“Hacia adelante, prevemos una aceleración de la actividad económica en la medida que estos dos eventos no se repitan nuevamente. En ese sentido, la Enfen ha señalado una alerta de El Niño Costero debido al incremento por encima de lo normal de la temperatura superficial del mar, que se prolongaría hasta agosto y que podría dar lugar a un Fenómeno de El Niño (FEN) de intensidad ‘débil’. Un FEN de estas características incidiría marginalmente sobre la actividad productiva en lo que queda del 2023″, anotó el economista.
No obstante, la posibilidad de un evento más global, como el arribo de un FEN Oceánico hacia fin de año, afectaría más notoriamente la evolución del PBI —dependiendo de su intensidad—, aunque los efectos se sentirían principalmente a inicios del 2024.
“Consideramos que el balance de riesgo de nuestra proyección de crecimiento del PBI para el 2023 es equilibrado (1.9%). Por un lado, existe la posibilidad que se registre un FEN de una intensidad mayor a la asumida en nuestro escenario base, lo que podría afectar la evolución de sectores como pesca y agropecuario durante los próximos meses”, según informe de Scotiabank.
Regiones que registrarían mayores pérdidas
Según el Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (Iedep) de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), un eventual fenómeno de El Niño costero reduciría en 0.4% la tasa de crecimiento del PBI, que el Banco Central de Reserva del Perú proyectó en 2.9% para este 2023.
Según el Iedep, las regiones más expuestas a este fenómeno climatológico serían Tumbes, Piura, Lambayeque, La Libertad y Áncash. En conjunto, estas cinco regiones aportan el 25.5% del producto agropecuario nacional, el 14% de la manufactura, el 16.4% del comercio y el 15.7% del transporte.
Sobre la producción agropecuaria, las pérdidas podrían llegar hasta S/ 37.8 millones por día, considerando el impacto económico negativo estimado en La Libertad (S/ 15.8 millones) y Piura (S/ 10.8 millones).
En cuanto el comercio, las pérdidas diarias podrían alcanzar los S/ 39.6 millones, contemplando el impacto en Piura (S/ 12.2 millones), La Libertad (S/ 10.3 millones), Lambayeque (S/ 9.9 millones), Áncash (S/ 5 millones) y Tumbes (S/ 2.2 millones).
Pérdidas históricas producto del fenómeno de El Niño
De acuerdo al Ministerio de Economía y Finanzas, históricamente ha habido impactos negativos asociados al fenómeno de El Niño en el país, tal como en 1982-1983 cuando la economía tuvo una contracción del 10%. No obstante, este evento climático generó una moderación del PBI en 1997-98.
“Muchos episodios negativos en la actividad económica del país han tenido relación con la aparición del fenómeno de El Niño y los sectores más afectados han sido pesca, agricultura, construcción, comercio y manufactura. Sin embargo, El Niño Costero puede poner en riego a la ejecución de proyectos tanto como la inversión pública y privada, y eso queremos evitar”, advirtió el ministro Alex Contreras.
Atención a la emergencia
Ante un probable fenómeno de El Niño ha puesto alertas a las autoridades peruanas para tomar medidas ante los posibles daños económicos y a la infraestructura. Sin embargo, las autoridades locales y regionales han denunciado que hasta el momento no se ha destinado una partida presupuestaria ante la emergencia por las lluvias.
Cabe recordar que el Gobierno lanzó el plan ‘Con Punche Emergencia’ —que tendrá un costo fiscal estimado de alrededor de S/ 4.,00 millones— con el objetivo de contrarrestar los efectos adversos que los eventos climáticos han generado en la economía y que, de implementarse rápidamente, podría encender un motor adicional para la recuperación del PBI.
¿Qué es el fenómeno de El Niño?
El Niño es un fenómeno climático que se caracteriza por un calentamiento intenso anormal de las aguas superficiales del mar frente a las costas del Perú y Ecuador, así como por los cambios climáticos a nivel regional y global. Sus efectos se manifiestan en el incremento de lluvias en el norte y sequía en el sur del Perú, alterando el caudal de los ríos y afectando la economía del país.
¿Cómo impacta a las regiones del norte?
A raíz de los recientes acontecimientos climatológicos que han generado intensas lluvias y tormentas eléctricas de grandes proporciones, Javier Bereche, presidente de la Cámara de Comercio y Producción de Piura, dijo a Infobae que los sectores productivos más afectados son los vinculados con la agricultura, agroexportación, turismo, manufactura, comercio, gastronomía, artesanía y cerámica.
“Esta emergencia por las lluvias significa pérdidas para todo el país porque el norte peruano es un gran impulso económico para el país. Cada actividad productiva tendrá afectaciones en distintos porcentajes o volúmenes económicos, dependiendo de la ocurrencia de las lluvias”, sostuvo el presidente del gremio empresarial piurano.
Según Bereche, este año se estimaba crecer en el primer trimestre del año por encima del 3% del PBI de Piura; sin embargo, hasta el momento se ve una economía regional estancada en 0%, debido a que todas las actividades productivas han sufrido algún impacto negativo.