El país cuenta con una cultura variada y amplia. Las huacas forman parte de la identidad del Perú, pues están presentes en todas sus regiones. En el Día del arquéologo, conoce qué huacas visitar y la importancia de cada una.
Alrededor de todo el país existen 206 huacas que están registradas en el Ministerio de Cultura (Mincul). El día del arqueólogo es un buen momento para conocer más de estos lugares y entender un poco más sobre la cutlura de nuestro país.
Huacas más importantes de Lima
En todo Lima existen 54 huacas; sin embargo, siete de ellas son las que han cobrado mayor relevancia y cuidado por parte del Gobierno. A continuación, te mostramos cuáles son las huacas más importantes de Lima.
Huaca Huallamarca en San Isidro
En su interior, los visitantes podrán apreciar cerámicas y restos vinculados a la cultura Chancay. A simple vista, las personas verán la gran pirámide escalonada que tiene 25 metros de altura. Dos momias en perfecto estado de conservación también forman parte de este lugar.
Huaca Maranga en San Miguel
Hecha con adobe y declarada Patrimonio Cultural de la Nación en el 2003. Su construcción se dio desde los año 100 y 650 d.C. Las huacas de Maranga son dos en total, la huaca Tres Palos y la huaca Cruz Blanca, siendo una de las más antiguas con las que cuenta la región de Lima. Posteriormente, fue sede del Curacazgo de Maranga donde se rendía culto al Señor de Ichma. Entre 1450 y 1532 fue el tambo en el gobierno de los Incas.
Para visitar estas huacas, las personas pueden acercarse al interior del Parque de las Leyendas y visitar las instalaciones.
Huaca Huantille en Magdalena del Mar
Perteneció a la cultura Ichma y también fue habitada por los incas. En su momento fue el templo principal entre cinco huacas que habían en el lugar. Aunque fue invadida por traficantes de terrenos, en el 2006 la zona fue recuperada y restaurada.
Para visitar el lugar, los visitantes pueden ir al Jirón Castilla N°1211 en el distrito de Magdalena del Mar.
Huaca Mateo Salado en Pueblo Libre
Es una huaca ubicada en el límite de tres distritos, Breña, Cercado de Lima y Pueblo Libre. Fue construída por la cultura Yschma y alberga parte de la cultura incaica y la época colonial. Cuenta con cinco pirámides escalonadas y la principal tiene una altura de 18 metros de largo, además de contar con extensos patios.
El nombre de la Huaca Mateo Salado se da en honor al ciudadano francés, Matheus Saladé que llegó a Perú y decidió vivir solo en el lugar.
En la actualidad se encuentra rodeada de inmuebles que son parte de la urbanización del lugar, casas y negocios. Para proteger el lugar se construyó una muralla que rodea los tres monumentos.
Huaca Pachacamac en Lurín
Ubicada al sur de Lima, se trata del lugar más importante de peregrinación que hubo en la zona costera, pues en su interior se encuentra el templo del Sol, construido por la cultura Inca aproximadamente en el año 1450. Las actividades que se llevaron a cabo dentro de este lugar duraron alrededor de 1200 años.
Las personas de aquellos años, se reunían para brindar ceremonias al dios Sol, también conocido como el Inti para así mantener un próspero año de cosechas.
Las personas que deseen visitar el lugar, deberán de ir hasta el kilómetro 31.5 de la antigua Panamericana Sur. Ahí trambién podrán hacer un recorrido por el museo, donde verán exposiciones de arte.
Huaca Pucllana en Miraflores
Cuenta con una ruta turística que es acompañada por un guía especializado en el tema. El lugar tiene dos sectores con caminos y rampas. Es considerada un santuario hecho con una gran pirámide de arcilla y adobe, y tiene siete plataformas escalonadas.
Su nombre proviene de la lengua quechua y se divide de la siguiente manera: huaca es santuario y Pucllana es lugar para jugar.
Las personas pueden visitar este lugar en la cuadra 8 de la Calle General Borgoño. A diferencia de las demás huacas, los asistentes pueden disfrutar en instalaciones cercanas de una comida con vista a la huaca Pucllana.
Huaca Puruchuco en Ate Vitarte
Ubicada en el distrito de Ate Vitarte, este lugar cuyo material principal es el barro, reúne parte de la cultura prehispánica que existió en suelo peruano. Cientos de años atrás fue el aposento del curaca local, razón por la cual es conocida como ‘El Palacio’. En el lugar se pueden observar seis cavidades que fueron hechas para poner las ofrendas, insumos y además formaron parte de actos religiosos.