Han pasado más de tres meses desde que la vida de Sandra Hoyos Ortiz (26) y las de sus otras tres compañeras (Abrile Rodríguez, María José Zelaya y Fabiana Morán) cambiaron por completo después que el auto donde iban se despistó por el kilómetro 10 de la Panamericana Sur. Desde ese momento, el conductor identificado como Emilio Huidobro no asumió su responsabilidad y las abandonó, denunciaron las víctimas. Está en la cárcel, pero el próximo 10 de abril podría salir en libertad ante una solicitud de cese de prisión preventiva de seis meses.
Infobae conversó con Sandra Hoyos, quien relató todos los obstáculos que se le han presentado a raíz de este accidente. Afirmó que recibió amenazas de un anterior abogado de Emilio. Ella tuvo que ser operada de emergencia por una luxación expuesta en el tobillo izquierdo y presenta fracturas en el sacro, en la pelvis y la cadera.
“Todavía no se ha hecho cargo de nosotras. No quiere asumir nada porque dice que no tiene dinero, que nosotros pedimos mucho, lo cual es mentira. Nosotras solamente estamos pidiendo nuestras terapias y, en el caso mío, una operación que voy a necesitar para las rodillas”, relató.
Sandra recordó que el conductor se fugó tras el accidente y no auxilió a las víctimas; entre ellas, su propio hermano. De esta tragedia, seis resultaron heridos, pero Fabiana Morán perdió la vida. Sin embargo, cuestionó que luego de 13 horas el chofer se acercó a la comisaría para pasar el dosaje etílico.
En tanto, el abogado de Emilio Huidobro le ofreció S/10.000 como una reparación para que se atienda. No obstante, el panorama que vive Sandra es diferente: necesita más de siete terapias porque no puede caminar y depende de su familia.
Cese de prisión preventiva
El pasado 28 de marzo, la defensa legal de Huidobro presentó una solicitud de cese de prisión preventiva. Entre los argumentos del letrado señala que el auto se despistó por una “avería del neumático”.
El documento se encuentra firmado por el abogado Juan Mario Peña Flores, quien defendió al exfiscal de la Nación, Pedro Chávarry, por el asunto de “Los Cuellos Blancos”, en el 2019. Asimismo, estuvo a cargo de otros casos políticos, como el de la exministra de Relaciones Exteriores, Elizabeth Astete, por la vacunación irregular después la pandemia por la COVID-19 en el Perú.
“El reventado (avería) del neumático anterior izquierdo del automóvil, con placa de rodaje AXG-019, de manera imprevista e inesperada para el conductor y sus ocupantes, que provocó la pérdida del control físico de esta unidad, cuando se desplazaba por la carretera (…)”, se lee en el documento al que accedió Infobae.
En este sentido, subraya que los factores contribuyentes del siniestro ocasionaron que el conductor no pueda “mantener una trayectoria en línea recta”. Además, se indica que el exceso de los pasajeros (8) no permitió “el uso de cinturones” por su seguridad.
No obstante, en este mismo expediente se informa que Emilio Huidobro pasó el examen de dosaje etílico casi un día después de ocurrido el accidente; es decir, el 21 de enero de 2023 a las 17:02 horas.
“Fue sometido al respectivo examen, el 21/01/2023 a las 17:02 horas, expidiéndose el certificado de dosaje etílico (…) que indica como resultado “0.00 g/L cero-gramos cero centigramos de alcohol por litro de sangre”, se agrega en el documento.
En ese entonces, la jueza Liliana Chávez Berrios también cuestionó la hora del examen debido a “lo que podría haber disminuido algún grado de alcoholemia” en la sangre. Afirmó que había vulnerado las reglas de tránsito al trasladar a siete pasajeros (las otras víctimas no se presentaron a la audiencia) cuando máximo podía hacerlo con cuatro.
“Han excusado o han dejado entrever, con temor, que Emilio tomó poco o no tomó, pero la verdad es que sí lo hizo. Manejó en estado de ebriedad porque no hay otra palabra para decirle”, manifestó a este medio.
Amenazas
La angustia de la joven de 26 años no terminó allí. Cuando contó que su caso lo haría público, el primer abogado de Emilio, Carlos Rodas, la amenazó que no iban a conciliar con ella.
Ella solo espera volver a caminar y hacer su vida como era antes y, sobre todo, busca justicia.
“Yo recibí amenazas por parte del anterior abogado, Carlos Roda. Me decía que si hacía esto público me iba a ir muy mal porque no conciliarían conmigo o me dejarían para el final”, mencionó y aclaró que tiene una grabación sobre esta intimidación.