En el Día Mundial de la Poesía, es necesario recordar a grandes figuras que marcaron parte de la historia en el país y en el mundo. Victoria Santa Cruz fue una de las mujeres peruanas que dio un giro no solo en el arte peruano, sino que también a la mujer y a la caultura afroperuana.
“Tenía siete años apenas, apenas siete años. ¡Qué siete años! ¡No llegaba a cinco siquiera! De pronto unas voces en la calle, me gritaron ¡Negra!” son las letras de la primera estrofa del reconocido poema “Me gritaron negra” de Santa Cruz.
Victoria Santa Cruz, una poeta revolucionaria
Nació el 27 de octubre de 1922 en el seno de una familia dedicada al arte. Su padre fue el reconocido dramaturgo y poeta Nicomedes Santa Cruz Aparicio y su madre fue la danzante Victoria Gamarra Ramírez. Victoria tuvo 9 hermanos en total.
El padre de Victoria fue bastante reconocido en su época y mantuvo contacto frecuente con destacados artistas e intelectuales de la época. La Victoria fue el barrio en el que vivió gran parte de su infancia. Fue la cuadra 4 de la calle Sebastián Barranca la que vio parte de la primera evolución de Santa Cruz Gamarra.
Entre los años 20 y 40, la familia Santa Cruz se mudó al distrito de Breña, fue allí donde se gestaron varios de los éxitos que hoy disfrutamos.
En 1961 viajó a París para estudiar en la Universidad del Teatro de las Naciones a través de una beca otorgada por el gobierno francés. Su talento la llevó hasta la Escuela Superior de Estudios Coreográficos donde destacó como diseñadora de vestuario de dos obras importantes.
En 1968 retornó al Perú y fundó la Compañía de Teatro y Danzas Negras del Perú. Las presentaciones resaltaron en Perú, pero también alrededor del mundo, tal como sucedió en los Juegos Olímpicos de México de 1968. Estados Unidos fue otro de los destinos que aclamaban el talento de Victoria Santa Cruz.
Me gritaron negra
Cuenta con varias creaciones propias. Una de de ellas es “Me gritaron negra”, una de las obras más destacadas y que hoy en día es considerada un himno para la cultura afroperuana.
En la letra de este poema, Santa Cruz revela que de pequeña, cuando solo tenía cinco años, le gritaron negra. Hecho que la marcaría y que luego la haría evolucionar para convertirse en “la madre de la danza y el teatro afroperuano”.
El rol de los obstáculos
¿Qué significaron los obstáculos en la vida de Victoria Santa Cruz? Para ella fueron momentos que la ayudaron a conocer quién es en realidad. Así lo reveló en una entrevista con el recordado intelectual, Marco Aurelio Denegri.
“Me di cuenta que el obstáculo cumple un rol [...] Si uno empieza a comprender y a ponerse de pie, es decir, asumir su responsabilidad sin buscar a quién culpar, empieza uno a encontrar esa clave que dice ‘Conócete a tí mismo’, porque mientas el ser humano no sepa quién es tendrá siempre a quién culpar. Es muy cómodo, pero es una trampa”, manifestó la poeta en entrevista con Denegri.
Fue una mujer que lidió con la discriminación durante casi toda su vida; sin embargo, su espíritu y carácter la llevó enfrentar todo ello con la fuerza que siempre la caracterizó.
“En un aspecto de mi proceso fui víctima y no aguanto a las víctimas, creen que todo el mundo está contra ellas. La realidad no es fácil, ni difícil, la realidad es”, afirmó en su momento en el programa ‘La Función de la Palabra’.
Su último espectáculo lo hizo en el 2004 y contó con la presencia de Eva Ayllón y la artista Bartola. Falleció el 30 de agosto del 2014.