Mario Vargas Llosa vuelve a ser condecorado por las autoridades peruanas, esta vez por la Municipalidad Metropolitana de Lima que está bajo la dirección del líder de Renovación Popular, Rafael López Aliaga. Durante un evento realizado en el Teatro Municipal este aseguró estar conmovido y agradecido de ser quien le otorgue la Medalla del orden al mérito en grado de gran cruz al ganador del Premio Nobel de Literatura.
“Para mí es un sueño. Nunca pensé estar en esta foto. Es un sueño otorgarle yo, Porky, esta condecoración”, dijo el alcalde de la capital frente al homenajeado, Patricio Llosa, congresistas como María del Carmen Alva y Edward Málaga y demás autoridades públicas. Sin embargo, segundos después el discurso del burgomaestre dejó de lado la trayectoria literaria del escritor y se centró en sus planes de gobierno.
“Mi misión es estos cuatro años es que Lima compita y supere a Sevilla. Hacer una Lima que sea un atractivo mundial y peatonal. Tener la quinta Heeren en el circuito turístico mundial. Sueño con tener eso”, señaló para extender la invitación a la inauguración a un proyecto que apenas se ha planteado. En otro momento, el alcalde aprovechó para comentar la crisis política de los últimos dos años.
“Correrán ríos de sangre”, recordó López Aliaga como una de las frases dichas por los simpatizantes de Pedro Castillo cuando se planteaba la moción de vacancia. Este aprovechó para recordar sus días de campaña en las que asegura haber dicho que “contra ríos de sangre, ríos de amor”. Sobre el Nobel, agradeció que durante el paso de los años haya cambiado su mentalidad para “dar luz”.
“Le pido que nos siga iluminando con esa honestidad intelectual. La honestidad lo ha hecho mirar y cambiar y dar liz. Así ha orientado al Perú por la ruta de ser un país respetado. Usted, don Mario, hace respetar el prestigio de nuestro país; por eso es muy merecido el homenaje que estos haciendo. Había duda entre mi gente sobre dar este homenaje o no, pero dije sí, vamos. Es un tributo a una persona tan ilustre”, indicó.
Condecoración previa
El pasado 9 de marzo, el miembro de la Academia Francesa, Mario Vargas Llosa, llegó a Palacio de Gobierno para ser condecorado con la Orden del Sol por la presidente Dina Boluarte. En su discurso defendió la legitimidad de la presidente y consideró que “algunos” presidentes extranjeros “han intervenido de manera indecorosa en los asuntos peruanos, arrastrando a los vecinos y poniendo en duda la legitimidad” de la jefa de Estado.
Agregó que respeta la política que “encarna” Boluarte, pese a que The Economist dejó de considerar al país como un régimen democrático y lo rezagó a la categoría de régimen híbrido, debido al “entorno político inestable, una polarización extrema y una alta tolerancia hacia el gobierno militar”.
Aunque señaló que no se ha desligado de la coyuntura peruana, pese a que radica en el extranjero desde que fue derrotado por Alberto Fujimori (1990-2000), Vargas Llosa no se refirió a las muertes en las protestas antigubernamentales por las cuales Boluarte enfrenta una investigación preliminar por genocidio.