Mientras la capital peruana esperaba con expectación la caída de lluvias intensas generadas por la presencia del ciclón Yaku en el Océano Pacífico, el alcalde ultraconservador Rafael López Aliaga pedía a los ciudadanos elevar una cadena de oración para que el fenómeno se desvíe.
Su invocación llegó dos días antes de que el Gobierno declarara en “alerta roja” a Lima Metropolitana, Lima provincias y la provincia de Callao ante la presencia de precipitaciones extremas.
La presidenta Dina Boluarte anunció que esta medida comprende la alerta de todo el sistema de Defensa Civil y el personal de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, la suspensión de las clases escolares y universitarias durante 24 horas y el trabajo remoto en organismos del Estado y la recomendación para que se haga lo mismo en las empresas privadas.
Como señalaron los pronósticos, las intensas lluvias provocaron deslizamientos de lodo e inundaciones, principalmente en los distritos de Cieneguilla, Chosica, Chaclacayo, Ate, San Juan de Lurigancho, Carabayllo y Punta Hermosa, sin que hasta el momento se hayan reportado fallecidos.
En una entrevista con 24 Horas de Panamericana, López Aliaga señaló que, aunque la comuna no cuenta con “lampas” para hacer frente a la emergencia, hay “coordinación permanente” con el Ejército.
“Estamos trabajando directamente con el ministro de Defensa, justamente porque llegan las alertas (...) he enviado inmediatamente el contingente de militares y mil voluntarios de la municipalidad. (...) es importante que la gente le haga caso al ejército”, dijo.
Esta intervención fue criticada en redes sociales, al igual que su respaldo al gerente de Gestión del Riesgo de Desastre de la Municipalidad de Lima, Mario Casaretto, luego de que la periodista Juliana Oxenford evidenciara una sentencia por violación sexual en su contra, de la que, según su versión, fue absuelto hace 29 años.
“Hay una animadversión de una institución a la que quiero mucho, pero no quiero ir contra mi institución, por un tema interno”, dijo Casareto en Canal N. Junto con esas acciones, López Aliaga ha desplazado personal en varios distritos como Comas, Cieneguilla y Pucusana.
En Ate, además, su gestión proporcionó cinco mil sacos de tierra para afrontar la emergencia, mientras que en Chaclacayo realizó trabajos de limpieza de calles, llenado y colocación de sacos de arena.
También ha convocado a voluntarios para ayudar a las familias afectadas por el ciclón Yaku y pidió a los funcionarios de la comuna recolectar víveres e implementos.
De acuerdo con el último reporte del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi), los mayores valores de precipitación reportados en las últimas 24 horas fueron en Chosica (14,5 mm), Ñaña (12,5 mm), Ceres (8,6 mm) y La Molina (5,1 mm), conforme a su pronóstico de lluvias intensas que sigue vigente hasta el viernes 17.
El río Huaura se mantiene en el umbral rojo del nivel de caudal con 106.43 metros cúbicos por segundo, mientras que los ríos Chillón y Rímac están en el umbral naranja con caudales de 42,28 metros cúbicos por segundo y 87,96 metros cúbicos por segundo, respectivamente.
Las fuertes precipitaciones pluviales incrementadas por la aparición del ciclón azotan el norte desde la semana pasada, donde han dejado, al menos, 7 muertos y causado el cierre de decenas de carreteras y puertos, además de dejar cientos de casas inundadas y ríos desbordados, según datos oficiales.