El huaico en Jicamarca, a causa de las intensas lluvias en Lima que venían siendo provocadas indirectamente por el ciclón Yaku, dejó destrucción y numerosos damnificados. Pero, en medio de todo ese dolor, el caso de Emilio, un pequeño de 3 años que se salvó de milagro tras ser arrastrado por un fuerte huaico, ser convirtió en un consuelo para la población.
El valiente niño regresó la tarde de este jueves 16 de marzo a su casa en compañía de su madre, luego de ser dado de alta del Hospital de San Juan de Lurigancho, donde permaneció desde un día antes y recibió todas las atenciones médicas para cuidar de su salud.
“Primeramente, agradecer a Dios, y también al señor que lo ha rescatado: ‘Gracias por agarrarlo a mi hijo, sinceramente’. Y agradecer en general a todos, del hospital, a todos lo que me han dado la mano. Mi hijo ya está mejor”, manifestó la mamá a TV Perú.
Además, la mujer detalló que los especialistas del nosocomio le indicaron que los estudios practicados a su hijo no arrojaron nada de preocupación, por lo que decidieron darle el alta. Tampoco tendrá que recibir ningún tratamiento. Ella salió en brazos con el niño, quien aún tenía visibles heridas que le dejó la avalancha de lodo y piedras que lo arrastró.
Las imágenes del rescate del pequeño ya dieron la vuelta a nivel nacional. El hombre que hizo posible sacar del huaico a Emilio fue identificado como Armando Hugo Ureta Yalico, quien no pensó dos veces para meterse entre el lodo a rescatarlo.
A la prensa, Ureta Yalico dijo no comprender cómo el niño de tres años logró salvarse, pues venía siendo arrastrado desde una pendiente y hace varios metros atrás.
“No sé cómo llegó hasta aquí con vida, ya que él venía desde una pendiente. No dudé en ningún momento en socorrer al bebé”, afirmó.
Lo primero que vio al sostener al niño en sus brazos fue que tenía lesiones a causa de los golpes que sufrió por la fricción. Otros dos vecinos, quienes también aparecen en el video del rescate, ayudaron a poner a buen recaudo a Emilio.
La presencia de Armando en la zona, que coincidió con los efectos del ciclón Yaku, fue para visitar a un primo en este lugar de San Juan de Lurigancho. Él ha permanecido ahí desde el pasado 14 de marzo.
El huaico fue reportado en el anexo 22 de la zona de Jicamarca desde las 16:00 p.m. del miércoles 15 de marzo, por lo que ocasionó inundaciones en diversas zonas de la localidad y dejó damnificadas a decenas de personas.
Papá sigue hospitalizado
La mujer detalló que su esposo, José Luis Castillo, aún sigue internado en el Hospital de San Juan de Lurigancho. Este fue arrastrado junto al pequeño. Dijo que será dado de alta entre hoy y mañana, para que se reencuentren los tres.
“Gracias a Dios, mi intuición de seguir luchando, me agarré fuerte de la última varilla, con mi hijito”, narró a los medios de prensa antes de ser ingresado a cirugía. Recordó que se encontraba en su vivienda junto a su pequeño cuando el huaico los sorprendió y los arrastró.
El padre de familia contó que estuvo luchando para salvar la vida de ambos, pero debido a la fuerza y densidad del huaico su hijo se soltó de sus brazos. “A mi hijo lo suelto porque ya no podía. Como sea me subí al techo de una casa, pensando en mi hijo”, señaló.
“Golpeado, sin fuerzas pensé en mi esposa. Después de unos minutos, cansado de luchar, me dice un vecino: tu hijo está bien”, sostuvo y manifestó que saber que su hijo se encontraba con vida lo motivó a levantarse, pese a los contusiones que sufrió. Asimismo, expresó su agradecimiento a los vecinos que rescataron a su pequeño hijo. “Les debo mucho”, expresó.