El Sporting Cristal de los noventas, probablemente, es el último equipo peruano que gozó de grandes noches en la Copa Libertadores. Entre ellas figura el triunfo 2-1 ante River Plate en la edición de 1996. Aquel 1 de mayo, el conjunto ‘rimense’ tuvo una irrepetible performance durante los 90 minutos de juego, al extremo de que uno de los integrantes del club argentino admitió que “le pegaron un baile”.
Ese enfrentamiento fue por los octavos de final del torneo organizado por Conmebol y se realizó en el antiguo estadio Nacional de Lima. Cristal venía de quedar tercero en el grupo 2 por detrás de Peñarol y Defensor Sporting de Uruguay, mientras que River fue primero de su serie escoltado por San Lorenzo de Argentina y Minervén de Venezuela.
El equipo peruano dirigido por el brasileño José Luis Carbone y formó el siguiente once: Julio César Balerio, Marcelo Asteggiano, José Soto, Jorge Soto, Estanislao Struway, Alex Magallanes, Pedro Garay, Roberto Palacios, Nolberto Solano, Julinho y Flavio Maestri.
La escuadra de Ramón Díaz, por su parte, mandó esta alineación: Germán Burgos, Celso Ayala, Juan Gómez, Gustavo Lombardi, Juan Sorín, Néstor Cedrés, Leonardo Astrada, Matías Almeyda, Gabriel Amato, Enzo Francéscoli y Ariel Ortega.
El árbitro pitó el inicio de las acciones y el marcador no se movió hasta los 18 minutos. Alex Magallanes pisó el área contraria y le metieron una patada en la cara cuando quiso cabecear el balón. Inmediatamente cobraron penal a favor de los locales y Nolberto Solano tomó la pelota. El ‘Maestrito’ remató pegado al segundo poste y venció al guardameta para el 1-0.
Luego, a los 36′, los ‘cerveceros’ aumentaron su ventaja. Julinho comenzó la jugada y abrió con Roberto Palacios por izquierda. Este último amagó a un rival, levantó la cabeza y centró pasado. Ahí apareció Flavio Maestri para pivotear y dejar solo al brasileño, que definió ante la salida del cancerbero. El equipo peruano ganaba cómodamente 2-0.
Cristal no se conformó y fue en búsqueda de más goles. Tuvo ocasiones claras en los pies de Julinho y Roberto Palacios, no obstante, Germán Burgos estuvo inspirado bajo los tres palos. A los 87′, River golpeó con un tanto de Hernán Crespo, quien había ingresado en los primeros minutos de la etapa complementaria. El delantero realizó un buen movimiento, quedó solo, recibió el esférico, lo controló de pecho y lo mandó a guardar.
River Plate campeón
El conjunto de Díaz perdió en Lima, pero en Buenos Aires le dio vuelta a la serie con una contundente goleada (5-2). Hernán Crespo en dos oportunidades, Enzo Francéscoli, Ariel Ortega y Néstor Cedrés anotaron los goles de los ‘gauchos’, mientras que Nolberto Solano de penal y Julinho descontaron.
De esta forma Cristal quedó eliminado y River avanzó y no paró hasta alzar el trofeo de la Copa Libertadores. Superó a San Lorenzo en cuartos, hizo lo mismo con Universidad de Chile en semifinales y venció a América de Cali en la final. Cerró su participación con el título y con los siguientes números: 2 derrotas, 4 empates y 8 victorias.
El relato de Crespo
Años más tarde, en una entrevista con Fox Sports, a Hernán Crespo le recordaron el partido con Sporting Cristal al ponerle su gol de ‘chalaca’ ante los ‘celestes’ en el Monumental de Buenos Aires y el ‘nueve’ no dudó en realizar una confesión de esa noche en el estadio Nacional.
“Allá perdíamos 2-0, un baile bárbaro, yo estaba en el banco y me metió Ramón, hice el 2-1 y me acuerdo que allá en el vestuario, me senté en el fondo, vino Cedrés y se abraza con Enzo, un baile nos pegó. Ese Sporting Cristal era la selección peruana, era difícil... estaba Julinho, Maestri, Palacios y Solano. Entonces entró Cedrés se abrazaba con Enzo y dice ‘muchachos ganamos la copa, acá la ganamos la copa, zafamos de esta noche y ganamos la copa’. Y así fue, la ganamos”, contó el actual entrenador.