En Tumbes, una de las regiones azotadas por las lluvias generadas por el ciclón Yaku, un grupo de damnificados arriesgó su vida al cruzar el caudal de la quebrada Casitas-Bocapán, en la provincia Contralmirante Villar, cargando el ataúd de un familiar.
Ocurrió el último viernes por la tarde. Otros 50 moradores cruzaron el afluente para acudir al cementerio de Cañaveral, donde fueron sepultados los restos de Rosa A.R, según Correo.
La quebrada se activó por segunda vez esta semana, y aisló a nueve centros poblados. En imágenes difundidas por TV Perú se aprecia al grupo de familiares trasladando el féretro de una orilla a otra, pese a la corriente.
Los caseríos de Casitas afectados de manera severa son Tacna Libre, Bellavista, Cherrelique, La Choza, Cienego Norte, Cienego Sur, Chicama, El Cardo en la parte alta y Averías en la zona baja.
Hasta la fecha, el Centro de Operaciones de Emergencia (COEN) tiene registro de al menos 12 mil personas damnificadas y 45 mil ciudadanos afectados por las lluvias en todo el norte.
La presidenta Dina Boluarte arribó a Tumbes este sábado junto a otros integrantes del Ejecutivo para “inspeccionar y atender la emergencia”. Se comprometió a enviar ayuda humanitaria y maquinaria pesada para remover los escombros.
Sin embargo, los habitantes de los distritos de Tumbes, Puerto Pizarro y Corrales cuestionaron que la mandataria no haya recorrido las zonas más afectadas y que las municipalidades no hagan un empadronamiento en los lugares afectados.
En diálogo con RPP, pidieron que se verifique la situación de cada familia antes de entregar la ayuda humanitaria traída por el Gobierno Central. “Hay gente que necesita realmente y no ha recibido ayuda. Ahora que se pongan la mano al pecho los gobiernos regionales”, señalaron.
Tumbes se encuentra en alerta roja junto con Cajamarca, Lambayeque y Piura, pues “son sectores donde se van a presentar precipitaciones de intensidad extrema”, según César Sierra, director de respuesta del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci).
Los expertos esperan que el ciclón Yaku se retire de las costas el próximo 15 de abril. Desde que comenzó la temporada de lluvias, en 2022, las víctimas letales suman 58.
Desde noviembre, al menos 57 personas han resultado heridas, hay por lo menos ocho desaparecidos, así como 8.222 damnificados, 420 viviendas destruidas, 2.509 en una condición que las dejó inhabitables y por lo menos 14.000 estructuras afectadas.