Leucemia, el tipo de cáncer más frecuente en los menores de edad en el Perú

La leucemia se ha convertido en el cáncer más frecuente diagnosticada a un menor de edad, según el Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN). Alrededor de 600 niñas, niños y adolescentes, se les identifica esta patología anualmente en el Perú, la cual puede acabar con la vida del infante al no ser detectada a tiempo.

Ante ello, Infobae conversó con la oncóloga pediátrica del Hospital Edgardo Rebagliati, Ana María Gloria Paredes, para saber cuál es la situación actual en el país y qué aspectos se deben tener en cuenta para prevenir el cáncer infantil. Asimismo, aseguró que son los menores quienes muestran más vigor para vencerlo.

La especialista informó que es más fácil detectar el cáncer a un menor de edad debido a que tienen “sus órganos sanos”. De esta manera, los padres deben estar alerta ante cualquier dolor o presencia de algo extraño en el cuerpo. Al diagnosticarse a tiempo ayudará a combatirlo desde el principio y el número de posibilidades de vencerlo es mayor.

Según la oncóloga pediátrica, la leucemia tiene varias consecuencias que pone en riesgo la vida. Entre ellas se ha detectado la presencia de fiebre, cansancio, pérdida de peso, anemia y el sangrado debido a que está afectando las células sanguíneas. Ante cualquier alerta se debe acudir a un médico.

Estos síntomas deber ser alarmantes para todo padre, a quien se recomienda llevarlo a un centro médico. “A veces también hay problemas, puesto que no solo se presenta todos o algunos síntomas; sino también los signos, entre ellos el dolor articular. Y muchas veces se confunde”, argumentó.

Por otro lado, pidió a las madres de familia cuidarse desde un embarazo porque ingerir bebidas alcohólicas u otro tipo de sustancia peligrosas puede ocasionar efectos secundarios contra el menor.

En el Colegio Médico del Perú existen 37 oncólogos pediatras para atender a toda la población infantil, un número que preocupa frente al porcentaje que se estima en diagnóstico cada año con leucemia u otro tipo de cáncer, por lo que es necesario contar con expertos que puedan atenderlos ante un efecto secundario.

La doctora precisó que es importante contar con estos especialistas para combatir el cáncer con más experiencia. Asimismo, reveló que muy pocos pediatras oncológicos pueden viajar a provincia para quedarse de manera permanente, es así como los pacientes infantiles deben viajar a Lima.

En este sentido, manifestó que solo existen profesionales que se encuentran en las regiones de Arequipa, Trujillo y La Libertad. Agregó que pronto viajarían pediátricos oncológicos hacia Cusco y Cajamarca.

En el último estudio publicado en el 2022, el Ministerio de Salud (Minsa) informó que en el Perú se estima que 1.800 niños y adolescentes menores de 18 serán diagnosticados con cáncer. En tanto, la tasa de curación es variable entre el 30% y 90%, de acuerdo con la patología. Asimismo, del total, el 8,5% abandona el tratamiento y se reporta que 400 niños fallecen a causa del cáncer.

Desde otro punto, la presidente de la República, Dina Boluarte, anunció que se destinó 515 milllones de soles para el Minsa y los gobiernos regiones. De esta manera, podrán atender de manera focalizada y realizar los diagnósticos a tiempo.

La leucemia entró a casa de Miranda que con tan solo siete años fue diagnosticada. Una patología que la obligaba con urgencia un trasplante de médula ósea. Esto se complica más porque no tiene un donante al 100% de compatibilidad, la única que es compatible, y al 50%, es su madre (no siendo suficiente). Por ello, conseguir uno era una motivación para que la familia luche por su engreída y como decía Miranda: “Yo venceré a Leo”.

Llegó el día que el cabello se le caía, las quimioterapias eran cada vez más fuertes y las recaídas también. Logró salir de varias intervenciones e ir a casa, pero siempre preguntaba cuándo regresaría al colegio -una pregunta que nadie podía responderle-. Su madre renunció a su trabajo para dedicarle todo su tiempo a su pequeña que la necesitaría.

Miranda logró vencer a “Leo”, afirmó su mamá. Sin embargo, a los pocos meses de un gran avance, “Leo” volvió con más fuerza y tenía que internarse. Es así como ambas realizaron pulseras para vender por las redes sociales e irse hasta Alemania con la finalidad de continuar con su tratamiento.

A ella le encantaba reunirse con sus amigos, quienes tenían el mismo diagnóstico, en los pasillos de la clínica. La pequeña de ahora nueve años recibió la noticia que uno de sus compañeros había fallecido, estuvo muy triste durante varios días.

A los pocos meses, no había buenos resultados. No obstante, la esperanza de viajar hasta Alemania junto a su mamá iba incrementando. La triste noticia, la menos esperada, llegó: Miranda se convirtió en el angelito de la familia. Desde hace más de tres años, su progenitora la recuerda con sus fotografías que reflejan lo feliz que era la pequeña.