Marianella Ledesma, expresidenta del Tribunal Constitucional (TC), criticó duramente las resoluciones emitidas por ese organismo en favor del Congreso de la República para la elección de un nuevo defensor del Pueblo, la reforma del Consejo Directivo de la Sunedu y otros importantes casos que tenían de por medio una demanda competencial.
“El Tribunal Constitucional está destruyendo nuestro país. Está destruyendo la institucionalidad del Perú, debería pronto señalarse con nombre y apellido esas seis personas (tribunos) que están destruyéndola”, manifestó Ledesma.
Afirmó que no solo es el tema de la Sunedu, al evitar el control para la calidad educativa, sino también la destrucción del sistema de recaudación tributaria, al exonerar a grandes empresas deudoras del pago de impuestos.
“Han destruido o habilitado la posibilidad que los condenados por corrupción, terrorismo o narcotráfico, puedan postular en actos de elecciones populares y, si eso no es poco, ahora pretender poner, debilitando el sistema electoral, una causal que ni siquiera el constituyente se imaginó”, agregó.
Para Ledesma, el actuar de los tribunos muestra que mantienen una posición “nada imparcial”, porque ellos han sido elegidos por ese mismo Congreso.
“Hay un dupla Congreso-Tribunal Constitucional destruyendo nuestro país. Y, por eso, es urgente que nos replanteemos la posibilidad de ir a una asamblea, cónclave o reunión constituyente para hacer un estudio de la Constitución, no se puede seguir de esta manera”, señaló.
Además, precisó que sí cabe usar el verbo “destrucción” para los actuales tribunos, pues no tiene claro que “el poder se ejerce no de manera arbitraria y se reparte en un lógica de balances y contrapesos”
“La labor las atribuciones que tiene el Congreso de la República, por ejemplo de elegir un defensor o de elegir los miembros del tribunal, deben darse bajo un marco de garantías ¿Quién controla esas garantías?”, indicó.
Sostuvo que, en la lógica del Estado Constitucional, quien controla esas garantías debe ser los jueces constitucionales, pero “que es lo que hace ahora el tribunal y, por eso digo destruir la institucionalidad, resolver que al Congreso ya nadie lo puede controlar”.
“Ya no lo pueden controlar los jueces constitucionales y me imagino que cuando publiquen su sentencia, por lo menos, nos irán a decir, si ya no van a ser los jueces del Poder Judicial los que van a controlar ¿quién lo hará?”, acotó.
Añadió que “la regla fundamental” en un ejercicio democrático es el equilibrio, el reparto de poderes, el balance y el contrapeso. “¿Quien va a controlar ahora la labor del Congreso a la Sunedu o frente a la elección del defensor. Eso es lo que hace que esta sentencia sea nefasta para la institucionalidad del país”, reafirmó.
En su último pronunciamiento, el TC anunció que resolvió por mayoría de cinco votos, declarar fundada la demanda competencial planteada por el Congreso de la República contra el Poder Judicial, en consecuencia, nulas las resoluciones emitidas en el proceso de amparo que impedían seguir el procedimiento de designación del Defensor del Pueblo.