D’Onofrio, Artika y Yámboly, las tres marcas de helados preferidas por los peruanos

Los helados peruanos se caracterizan por sus particulares sabores gracias a la variedad de frutas que tenemos.

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Estas son las marcas preferidas
Estas son las marcas preferidas por los peruanos.

El postre favorito en verano: los helados. Estos productos se llevan todas las palmas y gran parte de nuestro dinero en esta época del año y en el Perú existen tres marcas que son las más reconocidas y preferidas por los peruanos. Según se pudo conocer, la venta de helados crecerá en esta campaña de verano 2023 ante un mayor consumo fuera de casa. D’Onofrio, Yámboly y Artika, compiten en un mercado que mueve ya más de 800 millones de soles en ventas anuales.

Por tal razón, en la siguiente nota te contaremos un poco de la historia de estas tres marcas preferidas por los consumidores nacionales. Cada una cuenta con distintos emprendedores que con mucho esfuerzo en sus inicios sirven de inspiración para todos.

Helados D’Onofrio

Hay marcas que llegan a calar en las personas y se convierten en patrimonio nacional. Algo así es lo que ocurre con los helados D’Onofrio. El particular sonido de la corneta, la carretilla y el color llamativo, son parte de los días de calor en Lima y las ciudades del Perú. Tiene más 120 años en el mercado peruano y el 88% de la preferencia de los consumidores, siendo favorita por su antigüedad y variedad de sabores.

Este comercial se hizo muy popular porque recordaba el peculiar sonido de la corneta. VIDEO: Donofrio

Pedro D’Onofrio es el fundador y de allí el nombre de este postre. Él llegó con su familia a Lima a fines de 1897 con un carro de madera a tracción humana para repartir helados, el cual tenía pintadas las palabras “Hokey Pokey” (origen de las palabras latinas “hocus-pocus”). Esta fue la primera carreta y la originaria de todas las que vemos en la actualidad.

Pachacamilla fue la primera calle donde se ubicaron, luego pasaron a Granados y en el cruce de Sanía y Tipuani, en el barrio de Chacarilla (hasta 1914). Finalmente, se trasladaron al local de la avenida Grau, donde se quedaron largos años. Desde allí partía un particular sonido con una corneta, el cual anunciaba a la gente que el helado había llegado a su calle. En la actualidad tiene una infinidad de productos de hielo y crema y es común ver una carretilla amarilla con su singular sonido.

Helados Yamboly

Helatony’s SAC, más conocida como Yámboly, es un negocio de helados muy popular en el país debido al precio y sabor que hace atractivo al producto para millones de peruanos. La historia detrás de este éxito se le atribuye a Dora Rodríguez, dueña de la empresa.

En su adolescencia, Dora fue amenazada por Sendero Luminosa con reclutarla. Ante ello, su padre, quien falleció en una masacre terrorista, la envió a Lima, a la casa de una tía, con el objetivo de que tuviera un futuro menos violento. Con solo 15 años de edad, se mudó al populoso distrito de San Juan de Lurigancho para luego ser vendedora en un mercado, cambista por un tiempo y luego incursionar en la venta de los helados Chantybón.

Tiene proyectado comprar un nuevo
Tiene proyectado comprar un nuevo terreno en Huachipa.

Esta emprendedora mujer pudo posicionarse como distribuidora de aquella marca ya extinta entre 1997 y 2005, y forjó su propia cartera de clientes. Cuando se presentó la oportunidad de comprar la fábrica de Chantybón, no dudó y adquirió las instalaciones en La Victoria por unos 180 mil dólares, los ahorros de toda su vida. Años después, esta mujer compró un terreno de 5 mil metros cuadrados en SJL, expandiéndose en el segmento poblacional más popular del país.

En la actualidad, Yámboly tiene el objetivo de ingresar a un nuevo mercado y hay un esfuerzo que respalda la expectativa, el aumento en un 50 % de la producción de helados en la planta de San Juan de Lurigancho. Además, tiene en sus planes construir una nueva planta industrial en Huachipa de 30 metros cuadrados.

En el 2018 Yamboly cambió
En el 2018 Yamboly cambió su imagen y presentaciones.

Helados Artika

Artika, antes conocida como Alaska, es hoy en día, una de las marcas más representativas del Perú. Su historia inicia en el “ombligo del mundo”, Cusco, cuando cuatro hermanos, Yolanda, Pedro, Francisco y José Mejía, deciden emprender un negocio en el pueblo de Quillabamba en 1978. El postre que mejor sabían hacer eran los helados y la familia, amigos y vecinos, pedían a gritos que lo prepraren.

Aún sin nombre participaban en ferias de pueblos aledaños, pero ya en 1992, este hobby de los hermanos se convirtió en Alaska en 1992, año que decidieron trasladarse a Arequipa y que también despegaron en sus ventas. Con ganas de agrandar su público, la marca se instaló en Huancayo y poco tiempo después llegó a Lima.

Cuatro hermanos empezaron con este
Cuatro hermanos empezaron con este nogocio como un hobby.

Su incursión en la capital contó tan solo con una máquina, diez vendedores y un pequeño carro para movilizarse. Además, pese al difícil contexto (el fenómeno de «El Niño» de 1997-1998), el precio de 0.50 céntimos por sus helados y el buen sabor terminó convenciendo a los clientes. Ahora, con más de 40 años en el mercado, destaca por sus particulares sabores.

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