El teniente alcalde de Lima, Renzo Reggiardo, indicó hoy que la norma que declara como “zona intangible” al Centro Histórico de la ciudad, en respuesta a las masivas movilizaciones contra el gobierno de Dina Boluarte en las últimas semanas, es “indefinida” y engloba un área de 10.32 km2. Además, mencionó que esta iniciativa busca proteger el patrimonio cultural y también garantizar la seguridad de las personas.
“Hay turistas y vecinos que asisten a estos lugares, pero se ven envueltos en una situación caótica, critica y violenta que no se puede seguir permitiendo”, apuntó. La autoridad edil exigió a las personas que protestan que lo hagan, pero fuera de la capital o en sus distritos.
“Las marchas están protegidas por la ley, pero no podemos aceptar la violencia. Eso nos mortifica mucho. Esta violencia brutal que hemos visto es inaceptable y no la podemos avalar. Si quieren marchar, que lo hagan fuera del Centro Histórico”, anotó Reggiardo.
En esa línea, el excongresista también respondió a los críticos a la norma que piensan ir al Tribunal Constitucional para exigir la derogación de la ordenanza. “Las personas que, en todo su derecho, consideren recurrir al TC, que lo hagan. Nosotros también tendremos nuestros argumentos”, enfatizó.
Reggiardo agregó que se calcula daños valorizados en más de dos millones de soles en la ciudad. “No solo han generado daño humano, sino material”, acotó.
Promesa cumplida
El último domingo de enero, el alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, había condenado los destrozos que se habían ocasionado en las infraestructuras de la capital.
“Tenemos que hacerle frente a todas estas marchas que están paralizando Lima, porque Lima sí nos toca gobernarla, con base en unirnos todos para evitar esas marchas, por lo menos el Centro de Lima, que vamos a declararlo zona intangible absolutamente”, aseguró.
López Aliaga anunció que se le prohibiría el ingreso a las personas a la Plaza San Martín “para hacer su comida”, como también afirmó que luego se van a librar alcohol.
Por esa razón, el viernes pasado, el Concejo Metropolitano acordó declarar intangible el Centro Histórico de Lima.
La línea fronteriza recorre partes de las avenidas Alfonso Ugarte, vía de Evitamiento, los jirones El Águila y Cecilia del Risco, la Prolongación Tacna, Alcázar y Plácido Jiménez, la calle París, las avenidas Nicolás Ayllón, Paseo de la República, 28 de Julio, Guzmán Blanco, Brasil y Arica, así como la Vía Expresa Grau.
En esta área se encuentran, entre otros inmuebles representativos, el Palacio de Gobierno, el Palacio Municipal, las plazas Mayor, San Martín, Bolívar, 2 de Mayo y Ramón Castilla, el Congreso de la República, la alameda de los Descalzos, el cuartel militar Barbones, los hospitales Almenara, María Auxiliadora y Arzobispo Loayza y el Instituto Superior Tecnológico José Pardo.
El acuerdo encarga a distintos organismos de la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML) proteger la intangibilidad y trabajar en coordinación con la Policía Nacional y el Ministerio de Cultura.
Por su parte, la Procuraduría Municipal impulsará las acciones legales correspondientes en aquellos casos que contravengan las disposiciones contenidas en el acuerdo, así como en los que se evidencien daños a la propiedad pública e infraestructura y mobiliario urbano.
La decisión se sustenta en la condición que tiene el Centro Histórico de Lima de ser Patrimonio Cultural de la Nación y Patrimonio Cultural de la Humanidad, reconocido por la Unesco, informó el municipio capitalino.
El abogado Javier Alonso de Belaúnde indicó que con esta declaratoria, la Municipalidad se pone al margen de la Constitución. “Existe una sentencia del Tribunal Constitucional sobre una norma similar (STC N.º 04677-2004-AA)”, la cual “fue inaplicada por ser inconstitucional”, tuiteó el especialista. “Se afectan principio democrático y derechos vinculados a la protesta”, añadió.