La temporada de lluvias en la sierra del Perú ha incrementado los deslizamientos de roca y lodo que van tomando fuerza, se convierten en huaicos y arrasan con todo lo que se encuentra a su paso, incluso las casas y otras infraestructuras que, indebidamente, se construyeron en las quebradas.
En Lima, una zona que corre constante peligro es el distrito de Chosica, la cual ya ha sufrido este tipo de fenómenos como el ocurrido en marzo de 2015, que dejó nueve personas fallecidas y 153 damnificados. En esta zona siete quebradas no tienen protección ante posibles huaicos.
Al año siguiente se instalaron 22 mallas de acero como barreras de protección para contener las rocas y todo el material sólido que se desprende de los cerros. Sin embargo, aún hay un sector desprotegido, según señaló el alcalde de ese distrito, Oswaldo Vargas, al diario El Comercio.
El burgomaestre de Chosica advierte que de las 16 quebradas de la zona solo nueve tienen protección adecuada. “Han pasado seis años del último huaico, lo que significa que hay gran acumulación de material en las partes altas de cada quebrada. Si en este mes o el otro aumentan las lluvias, todo eso va a caer sobre la población”, dijo. “Son más de 200 mil toneladas métricas de piedras y rocas”, añadió.
Además, dijo que ha solicitado a la Autoridad Nacional del Agua (ANA) del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego que se instalen 25 barreras en las siete quebradas vulnerables. También pidió que la inspección de las existentes para garantizar que estén en buenas condiciones debido a denuncias de robo de piezas de acero.
“En la quebrada San Antonio, que tiene cinco kilómetros de profundidad y una pendiente de 30 grados, y en la quebrada Nicolás de Piérola, de 6,3 kilómetros de profundidad, solamente se encuentran instaladas seis mallas, pero se requiere por lo menos cinco más por cada una porque albergan una cantidad enorme de material acumulado”, añadió Vargas.
Cabe indicar que la inversión total de las mallas que se colocaron las quebradas de Chosica ascendió a 22 millones de soles que fueron cubiertas por la ANA.
Plan ante los huaicos
Frente a este panorama, el alcalde Oswaldo Vargas, señaló a inicios de la semana que se ha dispuesto la movilización de maquinaria pesada y de personal para la limpieza del cauce del río Rímac y la instalación de mallas geodinámicas que permitirán retener las rocas traídas por los huaicos.
“Tenemos mallas geodinámicas instaladas en las partes altas, en nueve quebradas, fabricadas con tecnología moderna que permite atrapar todo tipo de material desde las partes altas. Ejecutamos también medidas preventivas, como implementar zonas de evacuación, limpieza de cauces de ríos, la colocación de 17 mil sacos afuera de las viviendas para evitar que el agua o el lodo ingresen”, señaló.
El burgomaestre indicó que ante cualquier huaico o desastre natural que se presente, Chosica cuenta con escaleras de evacuación y caminos de seguridad señalizados que facilitarán una rápida respuesta.
¿Qué es un huaico?
El huaico o “lloclla” en el idioma quechua es un tipo de aluvión de magnitudes moderadas a fuertes que se registra con frecuencia en las cuencas hidrográficas de la Costa, Sierra y Selva del Perú, generalmente durante el período de lluvias, de acuerdo con la terminología elaborada por el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci).
Se trata de flujos con grandes volúmenes de agua, sedimentos y material sólido como tierra, rocas, restos de árboles, maleza u otros vegetales y otros objetos desprendidos por la fuerza del agua.
Este fenómeno se presenta de forma rápida, con fuertes ruidos y olor a barro. Se activa con las precipitaciones y puede provocar inundaciones debido a que los flujos desembocan en los ríos contribuyendo a que estos se desborden.