A través de un comunicado, la empresa Ferrocarril Transandino S.A. (Fetransa), concesionaria de la vía férrea del sur y suroriente del país, autorizó la reanudación de las operaciones ferroviarias en el tramo Pachar-Ollantaytambo-Machu Picchu-Hidroeléctrica, región Cusco, la cual se encontraba paralizada por varios días debido a los efectos de las protestas que, entre otras cosas, piden la renuncia de la presidenta Dina Boluarte.
Fetransa señaló que se tomó esta decisión “luego de verificar que la vía férrea en este tramo se encuentra en condiciones operativas luego de haber sido rehabilitada tras sufrir daños a consecuencia de las protestas registradas en la zona” y añadió que el último fin de semana se verificó que “no se han registrado bloqueos ni daños en la vía férrea en el referido tramo”.
Con apoyo de la Policía
También indicaron que cuentan con el resguardo de la Policía Nacional y la custodia militar en las principales estaciones ferroviarias y puntos de bloqueos anteriores que afectaron la infraestructura de la red ferroviaria.
Sin embargo, advierten que esta autorización estará supeditada a que la situación de seguridad en estas zonas se mantenga y no se produzcan bloqueos ni daños ni hechos que alteren las operaciones ferroviarias.
“En caso contrario, nos veremos obligados a suspender las operaciones ferroviarias; sin perjuicio de las acciones que los operadores ferroviarios puedan adoptar en resguardo de la seguridad de sus pasajeros y trabajadores”, señalan.
El servicio del tren Ollantaytambo - Machu Picchu se encontraba suspendido desde el 19 de enero y de manera definitiva se cancelaron las operaciones desde el 21 del mismo mes, luego del cierre de la ciudadela inca, también como previsión.
Grupos de manifestantes bloquearon varios tramos de la carretera Cusco-Ollantaytambo. Ante esta situación de emergencia las autoridades dispusieron suspender las operaciones del tren.
Reanudan operaciones
La empresa PerúRail comunicó que este miércoles 8 de febrero reanudará de forma parcial sus operaciones ferroviarias entre Ollantaytambo, Machu Picchu e Hidroeléctrica.
Además, dispuso la operación de sus trenes mixtos (coches locales + turísticos) los días miércoles y domingo, a partir de este 8 de febrero hasta contar con las condiciones necesarias para la operación ferroviaria.
Las operaciones extraordinarias de tren estarán sujetas a las indicaciones de seguridad brindadas por el concesionario.
La empresa reiteró su predisposición para reanudar la operación regular de sus servicios de tren hacia Machu Picchu, en condiciones seguras y sin exponer la integridad de pasajeros y trabajadores.
Rechaza acusaciones de municipalidad de Machu Picchu
PeruRail S.A. también se refirió al pronunciamiento de la Municipalidad de Machu Picchu Pueblo que lo acusó de un supuesto desinterés de reanudar sus operaciones en la zona.
Argumentaron que las operaciones de sus trenes en la ruta a Machu Picchu estuvieron suspendidas debido al cumplimiento a la restricción de las operaciones ferroviarias dispuesto por el concesionario, como medida de seguridad ante el reiterado bloqueo y daño de la vía férrea en acciones de protesta del paro indefinido en la región Cusco.
“Por tanto, rechazamos las afirmaciones de la Municipalidad de Machu Picchu respecto a un supuesto desinterés de brindar servicios de tren para los pobladores del distrito; toda vez que, desde el inicio del paro indefinido en Cusco, PeruRail viene demostrando predisposición para realizar operaciones extraordinarias del tren local”, sostuvieron.
Agregaron que estas operaciones se realizaron para facilitar el abastecimiento de alimentos y otros productos a la población de Machu Picchu Pueblo y sus comunidades, bajo las condiciones de seguridad requeridas para estas operaciones.
Cabe indicar que el turismo es uno de los sectores más afectados en el Cusco debido a las paralizaciones y bloqueos. Incluso Machu Picchu y el Camino Inca fueron cerrados debido a las protestas. Al respecto, la Asociación Peruana de Empresarios del Turismo (Apemtur) señaló que esta situación afecta a este sector productivo que registra una pérdida de 4.000 reservas hoteleras hasta marzo de 2023, lo que significa que no se generen ingresos de S/10 millones al día.