Centro Histórico de Lima: Inmuebles patrimoniales en riesgo por hacinamiento, tugurización y negocios informales

El incendio de la histórica casa Marcionelli, ocurrido el pasado 19 de enero, durante las protestas sociales en Lima, ha puesto en evidencia el riesgo a los que están expuestos los inmuebles patrimoniales que alberga el Centro Histórico de la capital peruana. Años atrás vale recordar que, también se reportaron otros siniestros similares que dejaron en escombros a la emblemática casona El Buque (Barrios Altos) y al patrimonial edificio Giacoletti (Plaza San Martín).

Según Rudolf Giese, decano de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Ciencias y Artes de América Latina (UCAL), de los 7.126 inmuebles con valor patrimonial que conforman el Centro Histórico de Lima, 1.248 han sido declarados inhabitables o tugurizados. Adicionalmente, 1.325 inmuebles se han identificado como microzonas en necesidad de renovación urbana.

Además, de acuerdo a cifras de Prolima, de los 735 inmuebles declarados como monumentos históricos, ubicados en el ‘Damero de Pizarro’, aproximadamente el 83% está en peligro de colapso y solo el 17% está en una condición relativamente estable. Esto ha llevado a la interrogante de ¿si las autoridades vienen cumpliendo su rol para recuperar este patrimonio histórico de los peruanos?

“Aproximadamente unos 610 inmuebles del Centro Histórico de Lima -que tienen valor patrimonial- están en peligro. Es un número importante sobre todo entendiendo la condición de patrimonio cultural de la humanidad que tiene la capital por sus monumentales edificaciones. También, se estima que hay cerca de 47.000 familias que viven en condición de hacinamiento en dichos inmuebles históricos”, declaró a Infobae el arquitecto Rudolf Giese.

Hoy en día estos inmuebles patrimoniales son una verdadera bomba de tiempo debido a que no cuentan con un planificado sistema de instalaciones eléctricas y sanitarias. Además, las estructuras de estas casonas están hechas de adobe en la primera planta y quincha en la segunda. También, sus columnas y entrepisos están construidos de vigas de madera; por lo cual no tienen una condición adecuada de mantenimiento.

“Las casonas patrimoniales del centro histórico presentan problemas de malas instalaciones eléctricas, lo cual pueden originar lamentablemente incendios. Asimismo, otros inmuebles tienen fugas de agua que generan problemas con el adobe frente a la humedad. Esto va a causar que las infraestructuras se debiliten de pronto. Sumado a la tugurización genera un rápido deterioro de estos bienes”, comentó el catedrático de la UCAL.

El Centro Histórico de Lima fue declarado como Patrimonio Cultural por la Unesco, desde 1972, y de Patrimonio de la Humanidad desde 1991, lo cual le ha valido que se ponga en valor en términos culturales, turísticos y económicos. Sin embargo, dicha denominación podría estar en riesgo sino se ejecuta un plan integral para su recuperación.

“Lima está inscrita en la lista de patrimonio mundial de la humanidad precisamente porque posee bellas edificaciones con alta riqueza cultural e histórica. También, estas casonas conservan parte de la historia de la arquitectura de la humanidad en tiempos del virreinato, la República y épocas un poco más modernas asociadas con el arte neoclásico”, precisó Giese.

Ante la consulta sobre ¿si persisten los problemas de las casonas del centro histórico, Lima podría perder su valor como Patrimonio Cultural de la Humanidad? el arquitecto señaló que la capital está en una peor condición frente a la Unesco por el estado de sus casonas.

Otros riesgos que poseen las casonas del Centro Histórico de Lima son la tugurización y el funcionamiento de negocios informales. En ese sentido, el arquitecto de la UCAL expresó que se debe trabajar desde el sector público y privado para tratar estos problemas que ponen en riesgo la vida de familias y de los mismos turistas que visitan cercado de Lima.

“Estas casonas en condición de tugurización, desde la década de los sesentas, no han tenido una intervención de mantenimiento. Desde hace muchos años están descuidadas; y más bien, las familias que habitan en su interior lo han subdividido para alquilarlas a otras familias que migraban de provincias hasta Lima para buscar mejores condiciones de vida. Es así que, en casonas, donde antes vivía una familia, hoy día viven entre 20 a 30 familias”, comentó Giese.

En los inmuebles patrimoniales del ‘Damero de Pizarro’ también operan negocios informales vinculados con la actividad industrial. Según el especialista en temas urbanísticos, este componente comercial genera a que haya depósitos clandestinos que puede poner en riesgo a la vida de los trabajadores y de las personas que transitan a pie el centro histórico.

“Todo lo que se hace al margen de una supervisión o un adecuado control técnico, evidentemente genera riesgo. Entonces, hay un trabajo de las autoridades políticas de controlar, regular, normar el adecuado crecimiento y desarrollo de la ciudad, así como erradicar los negocios informales del centro histórico”, dijo el catedrático de la UCAL.

Con el fin de poner en valor y reducir el riesgo de los inmuebles monumentales de Lima, el decano de la Facultad de Arquitectura de la UCAL propuso a que se trabaje en una normativa que incentive la inversión pública y privada para el saneamiento físico y legal de las casonas del Centro Histórico de Lima. También, planteó a que se inyecte fondos económicos para que se puedan realizar proyectos a largo plazo para la recuperación de los inmuebles históricos de la ciudad.

Otra propuesta para recuperar el centro histórico y sus inmuebles patrimoniales, Giese indicó que el ‘Damero de Pizarro’ no solamente está conformado por casonas sino también por plazas y calles que le dan un importante valor comercial; es por ello, que planteó que se deberían peatonalizar otras zonas de Lima, debido a que se generan nuevas dinámicas en términos económicos, culturales y de entretenimiento.

“Nosotros de alguna manera pensamos que este mix de lo cultural y lo económico, revalorizando el metro cuadrado de estas casonas es importante para que la población esté involucrada en la recuperación del lugar. Y si no se involucran no van a entender el valor que se busca dar a todo este proceso de recuperación del centro histórico con servicios y turismo”, comentó el arquitecto.

También, señaló que el valor de alquiler más alto en todo Lima es la que está localizada en el centro de Lima, donde el metro cuadrado llega a costar entre USD 70 a USD 80. El Centro Histórico de Lima es un motor y dinamizador económico que va redituar en beneficio de toda la ciudad y los pobladores que viven en el centro histórico”, puntualizó.