La congresista Ruth Luque se pronunció al cumplirse un año del desastre ecológico que se registró en el mar de Ventanilla tras el derrame de petróleo causado por la empresa Repsol. La parlamentaria aseguró que en este tiempo, la corporación no ha realizado las acciones suficientes para resarcir este problema que afectó a miles de familias peruanas y especies marinas.
A través de su cuenta oficial de Twitter, la legisladora indicó que Repsol no realizó y que “minimizó la magnitud” del daño que ocasionó el derrame. Además, que no se efectuó lo acordado con el gobierno, por lo que solicita que se siga investigando el hecho.
“Hace 1 año despertamos con un desastre ecológico, producto del derrame de petróleo. Repsol no tomó suficientes acciones y minimizó la magnitud. Hasta el día de hoy, familias afectadas, pescadores, comerciantes, y otros siguen exigiendo justicia y remedición”, publicó la congresista Luque en su cuenta oficial de Twitter.
Ante esta problemática, la Defensoría del Pueblo solicitó al Gobierno de la presidenta de la República, Dina Boluarte, realizar una acción “articulada y continua”, e implementar medidas “en mediano y largo plazo” para el cuidado del medio ambiente.
“Se requieren realizar monitoreos y estudios permanentes a las zonas afectadas, lo cual permitirá adoptar medidas inmediatas para proteger el ambiente y la salud, más aún cuando estamos en temporada de verano y de oleajes anómalos”, señaló Lissette Vásquez, adjunta para el Medio Ambiente, Servicios Públicos y Pueblos Indígenas de la Defensoría del Pueblo.
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En ese sentido, el órgano de control, solicitó a la Dirección General de Salud Ambiental e Inocuidad Alimentaria (Digesa) del Ministerio de Salud (Minsa), que realice diversos análisis para garantizar el uso correcto de las playas, ya que en esta temporada los bañistas suelen disfrutar de este espacio, pero se debe determinar si están o no contaminadas por el derrame del hidrocarburo.
Además, consideró importante concluir los estudios que se realizan sobre los impactos negativos que ocasionó el derrame del petróleo y garantizar las labores de remediación ambiental, con el objetivo de proteger la salud de los ciudadanos.
“Tenemos que garantizar que se pueda compensar la totalidad de afectados, de manera justa. Sabemos que se han venido produciendo algunos adelantos de las compensaciones”, añadió.
Daños que no se olvidan
El derrame de petróleo de Repsol, catalogado por el Gobierno peruano como el peor desastre ecológico de los últimos tiempos en Lima, contaminó un total de 48 playas ubicadas en los distritos de Ventanilla, Santa Rosa, Ancón, Aucallama, Chancay y Huacho, según información del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA).
También, la presencia del hidrocarburo dañó completamente los recursos hidrobiológicos, afectando la economía y el estilo de vida de miles de pescadores, operadores turísticos y personas que trabajaban y dependían del mar.
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“Aunque las personas busquen otras alternativas, no hay muchas oportunidades de trabajo porque toda la economía de Ancón gira en torno al mar. Tan solo en esta asociación somos 800 personas afectadas, entre pescadores y agentes de pesca, como los chalaneros, jaladores y lavadores. Además, detrás de cada persona, hay una familia”, informó el dirigente Luis Garrido Chávez, presidente de la Asociación de Pescadores Artesanales de Ancón (Apescaa) a la Agencia Andina.
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