Inseguridad ciudadana. Según datos de la Policía Nacional del Perú (PNP), uno de los delitos más cometidos en Lima Metropolitana es el robo de autopartes. En estas primeras semanas del 2023, se han reportado diversas denuncias de personas que han caído víctimas del hampa.
Dejar estacionado tu carro en la vía pública se ha convertido prácticamente en un “pecado”, pues esto viene siendo “capitalizado” por los delincuentes que están al acecho en todo momento y que a diario cobran nuevas víctimas.
Infobae contactó con una joven, a quien llamaremos Verónica, a secas, que pasó un mal rato, luego de sufrir el hurto de varias partes de su vehículo, el que había adquirido con mucho esfuerzo hace menos de seis meses.
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“Por lo general, siempre guardó mi carro en una cochera. Soy consciente de que vivimos en una situación de inseguridad constante, sobre todo en la capital. Pero ese día por la hora y el lugar, que estaba en plena vía pública, me confié”, recuerda la joven.
El pasado miércoles 4 de enero, Verónica se dirigió, en compañía de su novio, a un conocido restaurante de barra libre de comida en el distrito de San Miguel, sin presagiar que terminaría sufriendo el robo de varias partes de su vehículo, marca Chevrolet.
“Llegamos a eso del mediodía. Estacioné mi carro afuera del restaurante, en una calle aledaña a la avenida Elmer Faucett. No lo puse en el frontis porque no había espacio. En ese momento no temí que fuera a pasar algo malo, había mucha gente transitando y autos pasando”, señala Verónica.
Ya al interior del establecimiento, tras hacer su pedido, fue alertada por un trabajador del lugar que un sujeto desconocido había intentando retirar los espejos retrovisores, siendo ahuyentado por el mismo personal de seguridad.
“El sujeto ya se había dado a la fuga. Asustada salí rápido en compañía de mi novio a ver qué es lo había sucedido. A primera vista no noté que algo faltara, pero al revisar detenidamente observé que no estaban las letras metálicas del modelo, el logo de Chevrolet, la antena y los esquineros de los retrovisores”, comenta.
Verónica es consciente que el robo pudo ser mayor si el delincuente tenía más minutos para poder retirar otras piezas de su auto. Aunque los daños no fueron cuantiosos, cuenta que tuvo gastar casi 300 dólares para que quede como antes.
“Era un dinero que no tenía en mente gastar. Ya me sirve de experiencia para no dejar en la calle el auto por más que sea a plena luz del día y en un lugar aparentemente seguro”, reflexiona.
Desactivan las alarmas
El coronel en retiro de la PNP, Lizandro Quiroga, quien fue jefe del Escuadrón de Emergencia, explica a este medio que para cometer el robo “con tranquilidad”, los hampones primero apagan la batería y así las alarmas se desactivan. Para consumar el hurto, detalla que solo necesitan de un desarmador, clavo o algún otro objeto punzocortante.
“Al realizar este tipo de delito, los delincuentes casi siempre optan por las llantas, los espejos, los retrovisores y los emblemas y letras de los carros. Como son las piezas que más rápido salen, siempre apuntan a esos”, detalla.
El ex alto mando policial indica que la mayoría de víctimas de este tipo robos tienen carros de las marcas Toyota, Nissan, Hyundai y Kia, aunque al momento de cometer su ilícito si los hampones ven un auto que está “regalado” no lo piensan dos veces y van por este.
“En el caso de la marca Toyota, los Yaris son de los modelos más robados. La mayoría de estas piezas, por no decir todas, terminan en el mercado negro. ¿Y por qué existe este delito? Es como los celulares, porque hay gente que va a comprar estas autopartes robadas”, afirma.
Revela que solo en un día uno de estos ladrones puede robar entre 15 y 20 de estas piezas, las cuales son llevadas al mercado negro para recibir a cambio hasta 50 soles o más por cada una.
“Los autos modernos son siempre su objetivo. En el mercado negro o ilegal, el valor de estas autopartes se multiplica varias veces, lo que hace que se muevan miles de cientos soles por este ilícito”, advierte Quiroga.
Remaches
En Lima, durante el 2022, cientos de ciudadanos han sido víctimas de este tipo de robos. A través de las redes sociales, numerosos son los usuarios que denuncian haber perdido varias piezas “en un abrir y cerrar de ojos”, y a plena luz del día en sitios muy concurridos.
En la actualidad, son cada vez más los dueños de vehículos que acuden a los talleres o mecánicas a que les instalen remaches a sus emblemas y a sus letras metálicas, así como a sus otras partes, a fin de evitar ser una víctima más de los ‘amigos de lo ajeno’.
“Tal vez no es lo más estético, pero en estos tiempos es, por lo menos, lo que te puede brindar algo de seguridad. Incluso, después del robo, he dispuesto que, aparte del remache, le pongan un pegamento especial. Así si el delincuente quiere llevárselo tendrá que romperlo y de nada le servirá”, afirma Verónica.
La Victoria y la ‘50′
Infobae comprobó que el mercado negro de autopartes en algunos puntos de Lima sigue funcionando, muchas veces a vista a paciencia de las autoridades, quienes no se dan abasto, pese a los operativos que realizan constantemente, para acabar con este negocio ilegal.
En el distrito de La Victoria, se ubican a lo largo de la avenida México y Canadá varios locales que operan desde hace bastantes años como puntos de compra y venta de estas piezas de autos. Muchos exhiben los emblemas sin problema alguno, con la finalidad de atraer compradores.
La situación va más allá, pues varios de estos locales hacen “ventas a pedido”, previa coordinación por WhatssApp. Si algún cliente necesita algún emblema o letra metálica en particular, los dueños de estos locales te ofrecen “conseguirlas” de un día para otro.
La Policía tiene certeza que algunos de estos locales trabajan de la mano con ladrones, a quienes les encargan conseguir las piezas para luego venderlas al doble o triple de lo que se lo compran al hampa.
En el distrito de Comas, al norte de Lima, hay un lugar conocido como la ‘50′ que ha sido intervenido innumerables veces por la Policía durante los últimos años. A pesar de esto, este mercado ilegal de autopartes se las ingenia para seguir funcionando y ganar dinero que proviene de lo ilícito.
Movidos por el vicio
Infobae conoció el testimonio de más personas que fueron víctimas del robo de las piezas de sus vehículos. A parte del de Verónica en San Miguel, estos casos corresponden al Centro de Lima, Breña, Jesús María, Lince y San Isidro.
Los afectados coinciden que este tipo de delito es cometido muchas veces por ladrones, que movidos por la adicción a las drogas se dedican a sustraer las autopartes.
La realidad es que como los seguros no cubren dichos robos, son muy pocas las denuncias que llegan a las comisarías. De los casos que conocimos, ninguno formalizó una denuncia ante una dependencia policial.
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