Un estudio elaborado por investigadores de la Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM) descarta la posibilidad de que quede algún remanente importante de hidrocarburo frente a las costas del Perú y tampoco que exista actualmente daños a la flora y fauna de la zona, al cumplirse un año del derrame de petróleo ocurrido en el mar de Ventanilla, en la provincia constitucional del Callao, y que se extendió hasta la provincia de Chancay, al norte de Lima.
El estudio estuvo respaldado por la empresa Gestión Pesquera Sostenible SAC e integrantes del círculo de investigación Oceanográfica “CIO - Challenger” conformado por egresados y estudiantes de la UNALM.
Como se recuerda, el 15 de enero del 2022 se produjo el derrame de alrededor de 10,400 barriles de petróleo tipo crudo de Buzios (un hidrocarburo que se somete a refinamiento para obtener petróleo diesel, gasolina y otros derivados) en un volumen equivalente a 436,800 galones o aproximadamente 1.654 metros cúbicos, el equivalente a media piscina olímpica llena de petróleo que fue vertido en el mar de Ventanilla.
Te puede interesar: Solo tres playas están aptas para bañistas donde ocurrió el derrame de petróleo
Monitoreo oceanográfico
Como parte de la investigación, entre el 4 y 12 de diciembre del año pasado, se realizó un monitoreo oceanográfico y biológico en más del 95% del área, correspondiente a 14 playas con su respectiva zona marina, entre Ventanilla y Chancay, afectada por el derrame de petróleo.
Las conclusiones del estudio técnico aseguran que los rezagos de petróleo crudo ya se han dispersado, evaporado o sedimentado en mínimas cantidades hasta zonas principalmente fuera de las 30 millas costeras, habiendo desaparecido casi todo el petróleo.
“Los fondos marinos cerca de la costa se encontraron limpios de petróleo de acuerdo con múltiples observaciones con un dron submarino sumergido en fondos entre 4 y 18 metros en diferentes zonas entre Ventanilla y Chancay”, manifestó el autor del estudio, Luis Alfredo Icochea Salas, actual director del Departamento de Manejo Pesquero y Medio Ambiente de la Facultad de Pesquería de la UNALM.
En cuanto a las playas, Icochea Salas señaló que en el distrito de Ventanilla fueron visitadas las playas Costa Azul, Punta Cavero y Bahía Blanca, en el distrito de Santa Rosa se hizo lo propio en Playa Chica y Playa Grande; en Ancón se recorrieron el balneario de la Marina, Playa Hermosa, Conchitas y Muelle de Ancón; mientras que en el distrito de Chancay de la provincia de Huaral se visitaron las playas Chacra y Mar, Cascajo, Chorrillos, Chancay y el muelle de Chancay.
El investigador de la UNALM aseguró que tampoco se observó ningún efecto nocivo debido al derrame de petróleo en peces, algas, crustáceos y moluscos del área, lo que fue demostrado al ser analizadas 109 muestras biológicas en el laboratorio Analytical Laboratory (ALAB), acreditado para analizar la presencia de hidrocarburos.
En algunas playas se encontró aves marinas muertas, sobre todo de pelícanos, debido, al parecer, a la gripe aviar que se reportó a finales de año en nuestro país. Sin embargo, dijo que la causa de la muerte de estas aves podría ser la ingesta de microplásticos presentes en las playas.
Finalmente, Icochea Salas afirmó que esta investigación ha sido entregada y expuesta ante el Ministerio del Ambiente y está a disposición de las otras autoridades competentes en materia de salud pública y conservación ambiental.
Te puede interesar: Ancón confirma que sus playas seguirán cerradas debido al derrame de petróleo de hace un año
Playas de Ventanilla aún no son aptas
Pese al estudio, según un informe del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA), las playas de Ventanilla aún no se encuentran aptas para los bañistas, ya que el mar todavía estaría contaminado producto del derrame de petróleo ocurrido en enero del 2022.
Así lo manifestó el nuevo alcalde de Ventanilla, Jhovinson Vásquez, al señalar que en los primeros días de su gestión ha sostenido reuniones con representantes de la empresa Repsol a fin de evaluar y solucionar este problema en beneficio de los veraneantes y vecinos.
“El OEFA ha dado un informe donde indica que nuestras playas (Ventanilla) siguen contaminadas con hidrocarburos y no están aptas para bañistas. Esta situación sigue perjudicando a todos los vecinos. Ayer tuve una reunión con Digesa y manifestaron que mientras OEFA no emita un informe favorable, los veraneantes no deberían ingresar a las playas Costa Azul 1, Costa Azul 2 y Bahía Blanca”, señaló.
Sin embargo, el alcalde dijo que han solicitado un nuevo análisis del agua a la OEFA, ya que el último informe de dicho organismo fue realizado en noviembre del 2022.
Piden intervención del Minsa
Por otro lado, recientemente la Defensoría del Pueblo requirió al Ministerio de Salud (Minsa) evaluar y, de ser el caso, adoptar, medidas inmediatas que permitan proteger la salud de la población ante la permanencia de petróleo en las playas afectadas por el derrame de crudo a inicios del año pasado.
La institución pidió que el Minsa lidere la coordinación de acciones concretas con autoridades locales, lo cual debe ir acompañado por información clara.
El pedido fue hecho con carácter de urgente ante el inicio de la temporada de verano. Asimismo, tras haber culminado la prórroga de la declaratoria de emergencia ambiental y al estar próximos de que se cumpla el primer año desde que ocurrió el derrame de petróleo.
SEGUIR LEYENDO