La razón detrás del misterio de los remolinos en los perros, según la ciencia

Se trata de un fenómeno intrigante en la anatomía canina que revelaría mucho más que simples patrones capilares. Incluso, podrían estar relacionados con el temperamento y la eficacia en el adiestramiento

Los remolinos capilares en perros, más que una simple característica física, podrían tener implicaciones prácticas en el adiestramiento y la selección de perros para tareas específicas (Imagen ilustrativa Infobae)

Los remolinos de pelo, técnicamente conocidos como verticilos capilares, son un fenómeno fascinante presente en la anatomía de algunos perros. Estos patrones únicos de pelo aparecen en diferentes posiciones del cuerpo del can, como la zona del pecho, los codos, las axilas, y son particularmente notables en la parte posterior de los muslos, a cada lado del ano. Estos remolinos no son meras curiosidades estéticas; en realidad, ofrecen una ventana a la comprensión más profunda de la biología y el comportamiento de los perros.

Curiosamente, los remolinos de pelo no son exclusivos de los perros. Otros mamíferos, como los caballos, las vacas y los gatos, también presentan estos patrones capilares. Sin embargo, en los perros, estos verticilos tienen características que los hacen particularmente interesantes.

La dirección de los verticilos o remolinos y algunas de sus características se han relacionado con el temperamento de los perros y con su respuesta al estrés. Esto sugiere que los remolinos podrían ser más que una simple característica física; podrían ser indicadores de aspectos más profundos.

La investigación sobre los remolinos capilares en perros no solo aporta conocimientos sobre su anatomía, sino que también ofrece pistas sobre su comportamiento y habilidades cognitivas (Imagen ilustrativa Infobae)

En uno de los estudios más exhaustivos sobre la presencia de remolinos o verticilos capilares en perros, se llegó a afirmar que la mayoría de los perros comparten la presencia de espirales de pelo en las patas delanteras, a la altura de los codos y en las axilas.

Los remolinos que se ubican junto al recto, conocidos como remolinos isquiáticos, son particularmente comunes, presentándose en aproximadamente el 80% de las poblaciones caninas estudiadas.

Aunque ningún perro doméstico suele mostrar remolinos en la espalda, hay algunas razas raras pero características que son conocidas por mostrar una “cresta” de pelo que crece en dirección opuesta al resto en la espalda. Entre estas razas se encuentran el Rhodesian Ridgeback, el Phu Quoc Ridgeback Vietnamita y el Ridgeback Tailandés. Estas razas, junto a su distintiva cresta, muestran dos remolinos paralelos en la espalda, una característica única y propia de estas razas caninas.

Los remolinos de pelo en perros, un rasgo común pero misterioso, continúan siendo un tema de investigación y debate entre los científicos, con implicaciones potenciales en la cría y el adiestramiento (Imagen ilustrativa Infobae)

Según los estudios realizados hasta la fecha, parece que los remolinos capilares son más frecuentes en perros con pelajes de longitud corta a media y no excesivamente densos, siendo menos frecuentes en razas y perros de pelo largo. Esta observación sugiere que la longitud y densidad del pelaje pueden influir en la formación y visibilidad de los remolinos capilares.

Aunque la función o relación exacta de los remolinos de pelo en los perros no está completamente comprendida, hay algunas hipótesis interesantes. Por ejemplo, en una investigación llevada a cabo hace ya varios años, los resultados arrojaron que, estadísticamente, los perros diestros (se puede saber si un perro es zurdo o diestro) con un remolino en sentido antihorario en el pecho o tórax mostraban el doble de posibilidades de finalizar con éxito un programa de adiestramiento para perros guía, en oposición a los perros con lateralidad izquierda, es decir, zurdos, y remolinos en su pecho en el sentido de las agujas del reloj.

Estas meras cuestiones estadísticas podrían tener un fundamento genético real de aplicación práctica concreta. La investigación continua en este campo promete desvelar aún más secretos sobre cómo estos patrones capilares únicos en los perros están conectados con su genética, comportamiento y habilidades.