La conmovedora historia de Kira, la perra que ayuda a sanar a los niños hospitalizados

Es una Australian Labradoodle entrenada para ingresar en centros de salud. En el Día Internacional del Perro, cuál es su misión terapéutica y qué avances logra en los pacientes pediátricos

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La protagonista de esta iniciativa
La protagonista de esta iniciativa es Kira, una perra Australian Labradoodle, entrenada especialmente para asistir a pacientes, jugar con ellos y acompañarlos en su internación

Cuando un paciente, sobre todo si es un niño o un adolescente, debe internarse en un centro de salud, suele vivir una situación difícil que le provoca miedo, nerviosismo y mucha tensión. En este marco, el acompañamiento terapéutico con animales puede facilitar su adaptación, superar el tratamiento y su estancia en el hospital de la forma más favorable posible. Este tipo de terapias pretende ofrecer una experiencia agradable que deje un buen recuerdo y un aprendizaje.

La pet therapy o terapia con animales, es un tipo de tratamiento asistido que permite disminuir el dolor, reducir el estrés y mejorar el estado de ánimo en niños y adolescentes ingresados en centros asistenciales, a través del vínculo con animales de compañía.

En Argentina se encuentra en marcha un proyecto mediante el entrenamiento de una hembra de la raza Australian Labradoodle, es una cruza de Labrador y Poodle, un tipo de perro de temperamento estable y equilibrado, ideal para servicio y que no suele generar reacciones alérgicas debido a las características de su pelaje, lo cual resulta también beneficioso para su presencia en entornos como hospitales y clínicas.

Otra de las imágenes de
Otra de las imágenes de Kira

Además, gracias a su temperamento, suelen generar vínculos muy amigables con niños y toda la familia. un perro que se caracteriza por ser cariñoso, tranquilo y compañero, inteligente y de buena salud. La iniciativa está liderada por la licenciada Carolina Micha, coordinadora del Servicio de Psicología en internación de Swiss Medical Group.

“El objetivo de la visita [de la perra] es claramente terapéutico, no con simples fines lúdicos. Kira no es simplemente una perra de visita. Hay una díada profesional-can con fines específicos para cada paciente. Luego de realizar la interconsulta con el equipo de salud, se plantean las necesidades de cada paciente. Se aprovecha ese espacio para que el niño/adolescente se relaje, pueda expresar más fácilmente sus emociones y sus miedos mientras interactúa con la perra y la profesional quien va interviniendo con un objetivo”, explicó Micha.

En Argentina únicamente el Sanatorio De los Arcos y la Clínica Zabala, junto con Royal Canin brindan este servicio, ya que se trata de una terapia innovadora y poco convencional.

Kira vive con la licenciada
Kira vive con la licenciada Carolina Micha, coordinadora del Servicio de Psicología en internación de Swiss Medical Group. Juntas forman una dupla que trabaja con los niños internados

La protagonista de esta iniciativa es Kira, una perra Australian Labradoodle, entrenada especialmente para asistir a pacientes, jugar con ellos y acompañarlos en su internación. Según informaron las instituciones que participan del proyecto, desde los 5 meses comenzó su entrenamiento especial para interactuar en la unidad de pediatría con pacientes internados, familiarizándose con el ambiente hospitalario, ruidos, olores, dinámica del sector y aprendiendo comandos específicos. Paralelamente, el equipo de profesionales fue capacitado para conocerla y aprender a trabajar junto a ella. El entrenamiento duró 8 meses, con distintas etapas y objetivos siempre basado en prácticas de refuerzo positivo.

Por su parte, el equipo de Swiss Medical trabajó exhaustivamente en un protocolo de infectología para áreas permitidas de circulación y de ingresos a habitaciones. Esto se debe a que Kira realiza visitas en internación pediátrica y en la guardia a todo tipo de pacientes, ya sean oncológicos, crónicos o agudos, tanto a bebés como niños en edad escolar y adolescentes.

A partir de una indicación clara, Kira aguarda en la puerta de la habitación hasta que el paciente le da permiso de ingresar y al percibir un gesto particular, sube a la cama en el área marcada y, si es oportuno, se acuesta, con otra indicación específica. Las interacciones con Kira incluyen abrazarla, acariciarla, peinarla y hasta conoce trucos como sentarse y saludar con su pata a modo de “chocar los 5″.

Los impulsores de la terapia aseguraron que este método superó todas sus expectativas porque, no solo crea una experiencia grata para el paciente, su familia y el personal clínico, sino que a través de la mascota se logran objetivos terapéuticos que muchas veces son difíciles de lograr. Por ejemplo, que un paciente exprese con facilidad sus emociones, miedos, ansiedades, acepte indicaciones médicas y también se ha logrado una mejoría en la adhesión al tratamiento.

El Australian Labradoodle es una
El Australian Labradoodle es una cruza de Labrador y Poodle, un tipo de perro de temperamento estable y equilibrado, ideal para servicio y que no suele generar reacciones alérgicas debido a las características de su pelaje

“He observado cambios concretos a la vista. Tanto en el estado de ánimo del paciente como de sus padres, siendo esto un punto fundamental en la evolución clínica de los pacientes en general. Además Kira es un motor para que los chicos accedan a situaciones que muchas veces se niegan: caminar después de una cirugía de columna, tomar una medicación que no les gusta, ponerse una vía, bajar a quirófano entre otros”, contó Micha.

Por la gran aceptación de este programa en el Sanatorio De los Arcos y en la Clínica Zabala, las visitas de la perra cuentan con una alta demanda por parte de los pacientes, lo que ha visto fortalecido el proyecto. Kira visita dos veces por semana cada institución, los pacientes la esperan con dibujos, regalos, y con mucho entusiasmo su próxima visita, aseguraron los promotores de la iniciativa.

Kira vive con Carolina Micha y su familia, sin embargo, cuando utiliza su chaleco, juntas se convierten en un binomio profesional. La compañía Royal Canin colabora en velar por su bienestar, ya que le asegura una nutrición de calidad, sus paseos, y sus consultas y cuidados veterinarios. La marca también provee los juguetes y elementos con los que Kira trabaja y también juega.

Los miembros del sanatorio donde
Los miembros del sanatorio donde está Kira, dicen que la aman con locura

“Cuando Kira utiliza el chaleco es increíble cómo cambia, es obediente, aguarda en la puerta, cuenta con una sensibilidad especial para cumplir con su tarea. Ella es increíble y en el sanatorio la aman, la esperan todos y los pacientes preguntan cuándo volverá a visitarlos. Se crea un clima muy lindo. De hecho, el clima laboral cambia. El personal tanto médico como de enfermería la adoran” comenta Carolina.

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