La historia heroica de Tom, el perro de Malvinas

Viajó en un Hércules que aterrizó en las Islas. Allí fue un animal de compañía que cautivó a más de un soldado. Cómo fue su final y dónde se encuentra el monumento que mantiene viva su memoria

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El doctor Romero cuenta la historia de Tom, el único perro civil que llegó como polizón a las Malvinas

Hoy te quiero contar la historia de Tom, el único perro civil que llegó a las Malvinas. Todo empezó de golpe en una localidad del centro de la provincia de Buenos Aires, en Junín, en un cuartel donde a un Cabo, el Cabo Liborio, de repente le dicen “junte todo, ropa de abrigo que nos vamos para Buenos Aires, que después vamos a ir para el sur”.

No se sabía bien a dónde iban y juntó todos los capotes y, cuando junta los capotes, un perro se le mete entre los pies, lo hace tropezar una vez, dos veces, tres veces.

A la tercera el Cabo Liborio se aburrió, lo alzó, lo guardó entre los capotes y se fue a Buenos Aires. De Buenos Aires, protegido por los distintos soldados, terminó en un Hércules que aterriza en las Malvinas, en una brigada antiaérea, allí fue el animal de compañía.

Tom, el perro de Malvinas
Tom, el perro de Malvinas

El que de alguna manera, los conectaba con el mundo de la ternura. Ese perro detectaba Sea Harrier, ¿te acordás lo que eran los Sea Harrier? Eran los aviones que los ingleses tenían y bombardeaban con fuego a las distintas brigadas antiaéreas y de distintas posiciones argentinas.

Lo cierto es que él, como tiene un oído cuatro o cinco veces superior, le salvó la vida a todos los miembros de esa brigada. Un día antes de la rendición, un Sea Harrier llega muy muy bajo. Él lo advierte, pero una esquirla de Granada, lo mata instantáneamente.

En las tierras y redentas de las Malvinas, descansan muchos de nuestros soldados, este no fue soldado, este fue simplemente el único perro civil que llegó como polizón a las Malvinas.

El Doctor Romero en Ascensión,
El Doctor Romero en Ascensión, el lugar donde vive el Cabo Liborio, y donde le hicieron un monumento a Tom, el perro de las Malvinas

La historia no termina acá, porque años después fuimos a Ascensión, el lugar donde vive el Cabo Liborio, y le hicimos un monumento a Tom, el perro de las Malvinas. “Teatro Operativo de Malvinas”, por eso se llama Tom y una réplica de esa, existe en el Museo de Malvinas.

Teatro operativo de Malvinas por eso se llama Tom y una réplica de ella existe en el Museo de Malvinas. Por lo menos, en la memoria guardamos a este que ladra desde la eternidad.

*El Prof. Dr. Juan Enrique Romero @drromerook es médico veterinario. Especialista en Educación Universitaria. Magister en Psicoinmunoneuroendocrinología. Ex Director del Hospital Escuela de Animales Pequeños (UNLPam). Docente Universitario en varias universidades argentinas. Disertante internacional.

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