Los reyes de Holanda visitaron el palacio de Buckingham en lo que fue la primera visita al Reino Unido desde el ascenso de Guillermo y Máxima al trono.
En el primer encuentro con la reina Isabel II llamaron la atención con un gesto que rompió con el protocolo establecido.Tanto el rey como la reina de Holanda besaron en la mejilla a Isabel, cuando lo permitido por la realeza británica es solo un apretón de manos en donde la reina debe ser la primera en extender su mano.
Pero la polémica no dejó pasar por alto la elegancia de la reina Máxima para los distintas visitas y galas en Londres. Para el encuentro al palacio Máxima optó por un diseño en tweed con cinturón oversize de la firma Claes Iversen.
Para la gala de noche, Máxima eligió un vestido de Jan Taminiau -su diseñador de cabecera- en tono verde degradé y capa transparente. Al look le sumó una sofisticada tiara Stuart de piedras preciosas acompañado de un broche en forma floral.
A la hora de visitar el Támesis optó por un vestido en fucsia con bordado negro del diseñador Oscar de la Renta. ¿El touch glam? El fascinator de Philip Tracy.
Texto Celeste Lattanzio. Fotos FOTONOTICIAS
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