Flor Raggi revela el secreto de un matrimonio feliz durante 20 años

Hace más de dos décadas la modelo y actriz lleva un feliz matrimonio con Nicolás Repetto. Aquí las claves para lograrlo.

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“No creo que exista una clave para mantener la armonía en la pareja, pienso que algo muy importante es admirar al otro”
“No creo que exista una clave para mantener la armonía en la pareja, pienso que algo muy importante es admirar al otro”

Florencia Raggi y Nicolás Repetto son una de las parejas más consolidadas de la farándula local. Lejos de cualquier escándalo, ya cumplieron 20 años juntos. ¿El secreto? Flor te lo cuenta.

“Cuando decidís estar en pareja asumís un gran desafío”
“Cuando decidís estar en pareja asumís un gran desafío”

-Llevás más de 20 años con Nico (Repetto), ¿cuál es el secreto para mantener un matrimonio feliz durante tantos años?

-Mmm… yo no lo conozco, ¿existe? Siento que hay muchos más matrimonios duraderos de los que creemos. Debe ser que tenemos poca prensa. Pero no somos los únicos. Yo lo veo, al menos, entre los compañeros del cole de mis hijos: hay muchas parejas de más de 20 años.

Hace 22 años que Florencia está en pareja con Nicolás Repetto.
Hace 22 años que Florencia está en pareja con Nicolás Repetto.

-Supongo que en este tiempo habrán sufrido alguna crisis.

-Sí, claro, como cualquiera. Somos una pareja absolutamente normal. Y si bien no creo que exista una clave para mantener la armonía en la pareja, pienso que algo muy importante es admirar al otro, pero en su totalidad, hasta con sus defectos. Hablo de admirar como aceptación, pensando: elijo estar con esta persona y no puedo explicarte muy bien por qué, es algo hasta visceral.

El clan completo, Florencia y Nicolás junto a sus hijos Francisco (17) y Renata (19).
El clan completo, Florencia y Nicolás junto a sus hijos Francisco (17) y Renata (19).

-Nada simple.

-No, claro. Cuando decidís estar en pareja asumís un gran desafío, no es la elección de una vida fácil, como algunos quieren creer. Hay que arremangarse y aceptar que el trabajo diario consiste en no proyectar los vacíos propios y carencias en el otro; saber que el otro no viene a completarte, sí a acompañarte.

Divina, en el jardín de su casa de San Isidro
Divina, en el jardín de su casa de San Isidro
 

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