Si hay algo que caracteriza a Saint Laurent es la provocación. Desde siempre, desde los inicios de la marca, Yves fue considera un genio provocador. Él revolucionó el mundo de la alta costura mezclando lo masculino y lo femenino, liberó los escotes, diseñó el primer smoking para la mujer e incluso se fotografió desnudo en 1971 para presentar su primer perfume para hombre.
Hoy el legado provocador sigue de la mano del director creativo Anthony Vaccarello que ya hizo lo propio con la campaña primavera verano 2017: la presentó con sensuales imágenes en blanco y negro fotografiadas por Collier Schorr. Un cuasi beso entre las modelos Selena Forrest e Hiandra Martinez y una Freja Beha Erichssen salvaje revolucionaron el ambiente.
Ahora Vaccarello sigue apostando a la provocación con un desfile en una playa de Malibú donde jugó con el intercambio de géneros. Una propuesta genderless donde lo femenino se mezcla con lo masculino y que hay que mirar dos veces para darse cuenta si quien desfila es mujer u hombre. Una vez más Saint Laurent mantiene viva la llama de la provocación y las prendas femeninas inspiran la colección masculina.
A la orilla del mar, sobre la arena y con un muro de espejos que reflejaban las olas sobre el acantilado, fue el marco elegido para montar la pasarela. Vaccarello eligió la estrecha franja de la playa de SoCal como sustituto de Marrakesh, presentando una colección que se inspiró en Serge Gainsbourg y Mick Jagger: se inspiró en la gira de los Rolling Stones en 1975 para colores y detalles, y adaptados a un estilo bohemio- -británico-rockero.
En Estados Unidos es verano y muchos famosos y millonarios van a descansar a las playas californianas. Por eso, y por tratarse de un desfile fuera de calendario, Vaccarello eligió Malibú para presentar su colección primavera verano 2020. Y no se equivocó.
Desde la front row estuvieron Miley Cyrus con su marido, Liam Hemsworth; Keanu Reaves; Laura Dern; Amber Valetta; Anja Rubik y Hailey Baldwin.
Vestidos de cuero, lentejuelas y escotes asimétricos, más la elegancia de la sastrería marroquí –ADN de la marca-, mezclados en la colección masculina. Una moda sin género con las tendencias desfiladas tanto por hombres como por mujeres.
Muchas piezas oversize y exceso de negro. Los pantalones tipo harem en seda, raso y lentejuelas sorprenden al ser una propuesta diferente a la silueta skinny de los emblemáticos jeans de la marca y camisas de estilo boho chic.
Trajes de pantalón de cintura alta, camisas, chalecos y minivestidos, sastres blancos y cazadoras vintage. Las prendas más atrevidas son la que dejan ver la piel, con transparencias o con patrones asimétricos que dejan un hombro al aire.
El pantalón de cuero, la capa del invierno, el terciopelo en la sastrería, los vestidos de color, el brillo y las plumas. Chaquetas estilo kimono, túnicas drapeadas y camisas de gasa anudadas en la cintura, chalecos de terciopelo.
Looks como el de túnica blanca con sombrero de paja mantienen la esencia boho chic y el aire marroquí de Saint Laurent. Sin provocación no hay moda diría el mismo Yves Saint Laurent. Y el legado se mantiene intacto.
Texto: Redacción de Para Ti
Fotos: Fotonoticias.
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