Nadie puede negar que Gucci salió con los tacones de punta en la colección Crucero 2020. Llamada 'Un himno a la libertad", su show se transformó en una oda en apoyo los derechos de las mujeres. Y es que en esta, su última creación, el director creativo Alessandro Michele se aferró a la idea de "My Body, my choice" ("Mi cuerpo, mi elección"), impuesta en los años '70 y tan vigente en estos días a nivel internacional. La moda muchas veces refleja lo que sucede en la sociedad y el aborto llegó a las pasarelas. Gucci incorporó en sus diseños feministas referencias a una fecha: 22.05.1978 un día clave en la historia italiana, cuando fue aprobada la ley para la interrupción voluntaria del embarazo.
Gucci no pudo elegir mejor escenario: los teatrales Museos Capitolinos de Roma. En este show nada quedó afuera. Fue un espectáculo de liberación donde, entre capas, bordados y esa combinación de texturas a las que nos tiene acostumbrados el Gucci de Alessandro Michele, se apostó por los mensajes fuertes. De la misma forma que lo hizo Viktor and Rolf.
En la pasarela se lucieron modelos con úteros, el ciclo menstrual completito. Basta de vergüenza, ya no hay temas que no se puedan tocar y así lo entendió Michele quien decidió incorporar un aparato genital femenino (sí, si se suele utilizar el corazón o el cerebro para distintas cosas, ¿por qué no hacer popular un aparato genital?) en uno de sus vestidos. Adiós vergüenza y hola a la belleza, que interpretó con florecimientos.
Además, en el show se lució una t shirt amarilla diseñada por el artista MP5 en pos de la igualdad los derechos. El total de lo recaudado con su venta será destinado a asociaciones que ayudan para el que el tea aborto deje de ser tabú. Un porcentaje de las ventas de esta colección crucero en tanto serán donado a distintas causas afines a la protección de los derechos de las mujeres.
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