"Los emprendedores en general tenemos un espíritu bastante inquieto. A los 21 años, cuando trabajaba en una empresa grande y mi jefe me dijo 'te tenemos acá para que trabajes y no para que pienses', renuncié.Tenía la inquietud de cambiar cosas, pero ahí no podía cambiar nada. Salvo esos seis meses de mi vida, siempre trabajé sin jefe", comenta Tito Loizeau (48), autor del libro Emprender hasta los 90 (editorial Conecta).
Según él mismo cuenta, para ser su propio jefe uno necesita de ciertas cualidades: "Tienen que ver con tu genética y con lo que mamaste de chico. El miedo al fracaso y al riesgo es una de las principales barreras. El emprendedor tiene más noticias malas que buenas en el día a día, entonces, si sos de deprimirte, no podés ser emprendedor. En cambio, ser extrovertido, empático, sociable e inquieto te suma chances", asegura el autor.
Dicho en otras palabras, soñar es fácil y tentador, pero trabajar sin jefe tiene su lado B. "Hay que tener características específicas: mucha responsabilidad, proactividad, visión de futuro, capacidad de proyectar y de hacerse cargo de las consecuencias de las propias acciones, poder cumplir métodos y ser ordenado", advierte la psicóloga Rosario Matas (M. N. 50.181) del Hospital de Clínicas.
¿Conviene o no dar el paso, entonces? "Cuando trabajás en una empresa colaborás en un proyecto. En cambio, cuando sos emprendedor tenés tu propia pasión y querés desarrollarla. Es muy distinto colaborar en el proyecto de otro que emprender el propio. No es mejor o peor, es distinto", aclara Ana Vellegal, capacitadora de la comunidad de emprendedores INICIA.
Tito Loizeau señala: "Ser tu propio jefe en un emprendimiento te da cierta libertad, pero es como tener un hijo. Al comienzo demanda un montón, como un bebé, pero a medida que va creciendo te va liberando de la carga horaria y en un momento, como un hijo, él te mantiene a vos. Al comienzo es una contra no tener jefe, pero a medida que crece el proyecto termina siendo muy liberador y podés darte el gusto de ir al cine a las tres de la tarde", dice Loizeau.
LAS CLAVES. Ana Vellegal comparte algunos tips a tener en cuenta si estás pensando en dar el gran salto.
x El orden: "Cuando no tenés jefe hay que ocuparse de muchas funciones y cuanto más orden tengas en el espacio físico y virtual –y, por ende, en la cabeza- vas a perder menos tiempo en administrar las tareas".
x La tecnología, arma de doble filo. La especialista explica que conviene tener un horario fijo para revisar mails y chats y no andar todo el tiempo revisando. "Si a cada ruidito voy a chequear, se me consume el día y hay que optimizarlo. Por ejemplo, a las 'en punto', a 'las y cuarto' y a 'las y media' se puede cortar lo que uno está haciendo y revisar mails, chats y responder. En el tiempo que me queda libre, trabajo, pienso".
x Saber estimar los tiempos. Vellegal lo explica así: "Cuánto tiempo tardo en hacer esta tarea, en llegar a otro lado. Si tengo en claro esto mi agenda va a tener una cronología real. Hay gente que calcula llegar de Belgrano a Berazategui en 5 minutos y no le alcanza el tiempo. La estimación debe ser realista y debe tener un margen de tiempo extra en el caso de un imprevisto".
x La agenda y las listas. La capacitadora de INICIA recomienda jerarquizarlas para no perder el foco: "Las A son las actividades de suma importancia que si no se resuelven se convierten en un incendio; las B incluyen cosas importantes, pero que no tienen tanta premura, aunque si no se hacen pueden transformarse en A; y las C, son actividades que no son vitales, pero conviene anotarlas para no olvidarse".
La psicóloga Rosario Matas cierra con un mensaje tan determinante como valioso: "Hay gente que no sirve para tener un jefe y otra que realmente lo necesita para funcionar bien, desde la seguridad de tener un lugar adonde ir hasta de estar dentro de una estructura. A muchos sentirse solos y sueltos les da inseguridad. No todos pueden decidir todo el tiempo, correr riesgos o planificar inversiones". ¡Esto también anotalo!
Texto: Carolina Koruk (mcarolina_k@hotmail.com) Fotos: Latinstock
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