Este departamento que está ubicado en el corazón de Recoleta (en un piso 31) tiene la calidez de una casa. La apuesta por una decoración despojada con una paleta neutra y materiales nobles como la madera, el yute y los textiles naturales dan al lugar un tono fresco y distendido. En el comedor, las lámparas de madera, las sillas con fundas de lona, los almohadones en canvas pintados a mano y la alfombra contribuyen al tono.
Para el living se eligieron muebles de diseño net, un juego de mesas mellizas en petiribí y una biblioteca diseñada a medida (El Postigo Muebles) son protagonistas. Dos sillones enfrentados con fundas en canvas (Tienda Mayor) y almohadones de diferentes texturas en la paleta del beige se combinaron con un juego de sillones gervasoni en madera de petiribí (El Postigo Muebles) y una alfombra de yute con guarda de cuero (Alsina). Las esculturas en madera natural del artista Pablo Murillo en los estantes dan un toque de carácter único.
BIEN NATURAL. La paleta de colores y los materiales se replican en el comedor y logran continuidad en el ambiente unido. La obra de Lourdes Medicci es la gran protagonista del espacio en el que se mantienen las líneas limpias en sillas y lámparas (Net) con una licencia en la mesa de patas torneadas de pino Oregón reciclado (El Postigo Muebles). La alfombra de yute grueso natural (Troccoli) y el zapallo de cerámica en el centro de mesa (Cerámicas Cárdenas) dan un aire cálido.
Respetando la estética adolescente, en el cuarto del hijo mayor se optó por el blanco y negro. Un sillón cama con carrito (El Postigo Muebles) se vistió con un acolchado blanco (Arredo) y una serie de almohadones impresos con un estampado de revistas americanas de los años '70 (De Levie). La selección de cuadritos y chapas decorativas (Falabella) en la pared, iluminados por una lámpara colgante con pantalla de hilo y otra de pie (Tres60 Lámparas) le dan un toque de calidez. Abajo de la ventana el espacio se aprovechó con un escritorio y una silla aluminum (Archivos Activos).
LAS PLANTAS ACOMPAÑAN. La casa está llena de rincones y espacios bien aprovechados en los que los detalles son todo. En el hall de entrada se eligió pintar las paredes de gris, de modo que destacaran la consola (El Postigo Muebles) y el espejo redondo en cuero de pergamino (diseñado por Verónica Pasquini). Frente al ascensor, un cuadro en grafito de Julia Padilla se combinó con un banco de madera a medida y una alfombra de sisal y yute (Troccoli). Un par de hojas de Costilla de Adán le suman más frescura al ambiente.
De espaldas al ventanal del living, dos sillones tipo bergere modernos (Verónica Pasquini) se combinaron con almohadones en terciopelo y una mesita con tapa bandeja, y unas palmeras de interior: un espacio ideal para disfrutar de la lectura.
En el dormitorio principal se eligió una cama con respaldo de madera y centro tapizado en pana (De Levie), combinada con un acolchado en lino natural (Ramos Generales) y manta de alpaca (El Postigo). El toque de color lo dan los almohadones estampados y la banqueta de apoyo a juego (De Levie). Las mesas de luz de madera con marqueterie (El Postigo Muebles) se actualizaron con las clásicas lámparas Tolomeo (Iluminación Agüero) y una silla Hemingway.
PERFUME DE MUJER. En el cuarto de las mujeres se continuó la paleta con unas camas con respaldo de arpillera y cubrecama rayado. Los almohadones bordados (Falabella) dan el toque femenino. Un sillón huevo de mimbre (El Postigo) y una alfombra a rayas finitas (Elementos Argentinos) mantienen el tono de los materiales del resto de los ambientes.
La bacha colgante en acero inoxidable y el espejo redondo regulable en altura completan el estilo vanguardista.
Producción: ANDREA SANGUINETTI
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